¡°La filantrop¨ªa es una iniciativa privada en favor del bien com¨²n¡±

¡°Filantrop¨ªa¡± es un t¨¦rmino griego que significa ¡°amor al g¨¦nero humano¡±. Con este recordatorio, ?ngel Font, director corporativo del CaixaResearch Institute, quiso subrayar su vigencia durante la intervenci¨®n en el F¨°rum Social que organiza la Fundaci¨® Pere Tarr¨¦s con la colaboraci¨®n de EL PA?S. ¡°La filantrop¨ªa¡±, dijo, ¡°es una iniciativa privada en favor del bien com¨²n y muchas veces act¨²a como catalizador de la colaboraci¨®n entre el sector privado, las fundaciones, y el sector p¨²blico¡±.

Aunque tiene una historia secular ¨C¡±el hospital de Figueres del siglo XIV es producto de la filantrop¨ªa¡±-, es ahora cuando ha adquirido una mayor relevancia social. ¡°Las crisis han pasado de ser sucesivas con per¨ªodos de estabilidad a acumularse y ser concurrentes. En el siglo XXI hemos tenido y vivimos desde crisis financieras, sanitarias o migratorias a la guerra en Europa y la escalada de precios. Son tiempos turbulentos que presentan nuevos riesgos sociales y a los que hay que dar respuesta. Es muy significativo en este sentido que la Uni¨®n Europea haya incluido por primera vez las fundaciones en su plan de econom¨ªa social, que contemple las fundaciones como un socio clave para la ejecuci¨®n del citado plan superando la dicotom¨ªa entre sector p¨²blico y privado. Demasiadas veces las fundaciones han sido actores invisibles¡±. Font preside actualmente Philea, una entidad que representa directa o indirectamente a unas 10.000 asociaciones filantr¨®picas europeas de las 180.000 que se calcula existen en este ¨¢mbito territorial.

?A qu¨¦ se dedicar¨¢n primordialmente las fundaciones en un futuro? Seg¨²n Font, se dibujan tres tareas primordiales: la lucha contra el cambio clim¨¢tico, la mitigaci¨®n de las desigualdades y la defensa de la democracia frente a tentaciones totalitarias. Entre las actuales tendencias de la filantrop¨ªa, Font destac¨® la incorporaci¨®n de una dimensi¨®n econ¨®mica a trav¨¦s de inversiones en el coraz¨®n de las fundaciones, el auge de las fundaciones comunitarias que no definen sus objetivos por una misi¨®n concreta si no que intervienen en todos los problemas de un territorio peque?o ¨C¡±de lo global a lo local¡±- y el crecimiento de las fundaciones de empresa. Un modelo en el que la fundaci¨®n es propietaria de la compa?¨ªa en un porcentaje relevante y los rendimientos de ¨¦sta sufragan los gastos de la primera. Entre los muchos ejemplos que cit¨® figur¨® el de la propia Caixa. Font mencion¨® un estudio dan¨¦s que afirma que este modelo mejora, obviamente, los indicadores sociales de las compa?¨ªas, pero tambi¨¦n, a medio plazo, su conducta econ¨®mica.

Font concluy¨® su intervenci¨®n con un listado indicativo de fil¨¢ntropos europeos que, a diferencia de lo que sucede en Estados Unidos, son m¨¢s desconocidos. En el cap¨ªtulo de catalanes mencion¨® a Dorotea de Chopitea (que impuls¨® el hospital de Sant Joan de D¨¦u, entre otras iniciativas); el fomento de la cultura popular de la mujer por parte de Francesca Bonnemaison; ?ngels Mateu, que fue secretaria del Institut de la Dona; Pere Tarr¨¦s, sacerdote y m¨¦dico cuya atenci¨®n sanitaria a los m¨¢s necesitados anticip¨® lo que ser¨ªa C¨¤ritas; Francesc Moragas, que cre¨® en Catalu?a la estructura del sistema de pensiones que, ocho a?os m¨¢s tarde, el Gobierno central le pidi¨® que extendiera a toda Espa?a; o, citando a la revista Forbes, Isidre Fain¨¦,, ¡°el arquitecto de la estructura corporativa de La Caixa¡±.

Una de las dedicaciones de Font actualmente, desde el cargo que ocupa, es levantar el Centre de Recerca Biom¨¨dica en Barcelona que iniciar¨¢ sus actividades dentro de dos a?os. El ponente del foro, fue presentado por Eug¨¨nia Bieto, presidenta de la Coordinadora Catalana de Fundacions que agrupa unas 700 entidades de las m¨¢s de 2.000 fundaciones que existen en Catalu?a, ¡°unas gran desconocidas¡±, y que ocupan a 90.000 trabajadores, sin contar los 40.000 voluntarios que colaboran con ellas. Tanto Bieto como Font se mostraron cr¨ªticos con la actual ley de mecenazgo y lamentaron que muchas veces el debate se focalice en las ventajas fiscales cuando, afirmaron, ninguna fundaci¨®n se crea con el objetivo de aprovecharlas. Hay que tener presente, concluyeron, que lo que la administraci¨®n deja de ingresar por la rebaja fiscal tambi¨¦n lo deja de gastar porque son las fundaciones quienes asumen la tarea.

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