Xavier Trias, en pos de la reunificaci¨®n

Con la recomposici¨®n del centro derecha catal¨¢n nacionalista perseguida por Xavier Trias en su campa?a municipal ha sucedido algo muy parecido a su aspiraci¨®n de recuperar la alcald¨ªa de Barcelona. Obtuvo un buen resultado, incluso cabe decir que muy bueno, pero result¨® insuficiente. La reunificaci¨®n del espacio pol¨ªtico de la antigua CiU era y es el objetivo declarado de Trias y de los antiguos dirigentes nacionalistas. En la reciente batalla de Barcelona ha avanzado, pero el inesperado adelanto de las elecciones generales les ha privado del tiempo de maduraci¨®n necesario para rendir sus frutos. Junts y el PDeCat todav¨ªa van a ir cada uno por su lado a esas elecciones.

Trias exhibe avales suficientes para la operaci¨®n y estos d¨ªas define la reunificaci¨®n como una necesidad e incluso una obligaci¨®n pol¨ªtica. En las elecciones del 23 de julio ¡°Jordi Pujol, Artur Mas y yo votaremos lo mismo¡±, afirm¨® rotundo en una reciente entrevista. Su idea es que la marca Junts puede ser el nuevo eje del nacionalismo catal¨¢n moderado, el nuevo pal de paller. Trias da por hecho que, como acaba de suceder en la ciudad de Barcelona bajo su batuta, a Junts le basta con dejar en suspenso el objetivo de la independencia, colocar en segundo plano a las figuras abrasadas en la pira que result¨® ser el oto?o de 2017 y volver a presentarse como el partido de orden y amigo de los negocios para competir de nuevo con ¨¦xito por la hegemon¨ªa en el catalanismo.

Este planteamiento choca en el ¨¢mbito nacionalista con los sectores que se niegan a olvidar, los que no han perdido la memoria. Unos, porque no se han recuperado del shock emocional que les produjo la confesi¨®n de la evasi¨®n fiscal de Jordi Pujol en el verano de 2014; otros porque, una vez consumada en el periodo 2012-2017 la ruptura entre autonomistas e independentistas, no quieren volver atr¨¢s. Y otros porque tras la voladura de CiU por las diversas causas de corrupci¨®n han encontrado otros cobijos. Valgan dos ejemplos. Carles Campuzano, anta?o dirigente de las juventudes pujolistas y diputado de CiU durante varias legislaturas, es ahora consejero en el Gobierno de ERC; Eva Parera, anta?o dirigente de la Uni¨® Democr¨¤tica de Duran Lleida, ha defendido ardorosamente en la reciente campa?a municipal como exponente de Valents, un nuevo partido, posiciones antinacionalistas netamente incompatibles con las de Trias y Junts.

Entre los que no olvidan, adem¨¢s, se cuentan los independentistas que han decidido combatir a los contemporizadores, los pol¨ªticos que, como Trias, preconizan la asunci¨®n de la derrota de 2017 y la adaptaci¨®n a las circunstancias. Para que entre Junts y el PDeCat alcancen el 23-J porcentajes parecidos a los que en sus buenos tiempos obten¨ªa CiU deben ganarse ahora tambi¨¦n a los desenga?ados que preconizan la abstenci¨®n como revuelta pol¨ªtica.

La campa?a abstencionista es el nuevo e inesperado adversario de los nacionalistas. Se presenta como una f¨®rmula de rechazo a las estructuras estatales espa?olas, pero en la pr¨¢ctica es una declarada moci¨®n de censura de los partidos independentistas por las pol¨ªticas seguidas desde 2017 hasta hoy. Si esta campa?a triunfara dejar¨ªa sin sost¨¦n electoral a Junts y ERC y desde luego dejar¨ªa sin base la recomposici¨®n preconizada por Trias.

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