Puigdemont, un actor pol¨ªtico clave en un momento procesal complicado

Carles Puigdemont se ha convertido en un actor clave para la gobernabilidad de Espa?a ¡ªlos siete diputados de Junts en el Congreso son determinantes para que Pedro S¨¢nchez sea investido presidente¡ª en un momento en que su situaci¨®n procesal es especialmente complicada. A punto de cumplir seis a?os de su huida a B¨¦lgica, el expresidente de la Generalitat est¨¢ cada vez m¨¢s cerca de tener que afrontar su supuesta responsabilidad penal por el proc¨¦s: a un paso de perder la inmunidad y con la petici¨®n de la Fiscal¨ªa de reactivar la orden de detenci¨®n internacional.

Apenas tres semanas antes de las elecciones del 23-J, el Tribunal General de la Uni¨®n Europea (TGUE), con sede en Luxemburgo, retir¨® a Puigdemont la inmunidad como diputado del Parlamento europeo. La decisi¨®n afecta tambi¨¦n a dos de los consejeros del Gobierno catal¨¢n que organiz¨® el refer¨¦ndum independentista del 1 de octubre de 2017: Toni Com¨ªn y Clara Ponsat¨ª. La resoluci¨®n no es firme y Puigdemont y sus compa?eros de filas ya la han recurrido, pero sus probabilidades de mantener la inmunidad son escasas. Tras conocer el fallo, el Gobierno de S¨¢nchez se mostr¨® ¡°muy satisfecho¡± por una sentencia que supone ¡°un respaldo indudable a las instituciones espa?olas¡±, se?al¨® la ministra de Justicia, Pilar Llop.

Las elecciones generales han dado un protagonismo inesperado a Junts, formaci¨®n que desde su sede en la residencia de Waterloo (B¨¦lgica) sigue bajo la tutela de Puigdemont. El partido independentista ya ha asegurado que no har¨¢ presidente gratis a S¨¢nchez. El mismo lunes, tras el 23-J, la Fiscal¨ªa del Tribunal Supremo pidi¨® al magistrado instructor del proc¨¦s, Pablo Llarena, que emita una orden de busca y captura internacional contra el expresidente catal¨¢n, y que curse una nueva euroorden. La petici¨®n del ministerio p¨²blico se produce como consecuencia de la decisi¨®n de la justicia europea (no firme a¨²n) de retirarle la inmunidad.

El indulto a los pol¨ªticos del proc¨¦s, la derogaci¨®n del delito de sedici¨®n y la modificaci¨®n de la malversaci¨®n hicieron que, en alg¨²n momento, el entorno de Puigdemont acariciase la idea de volver a Espa?a como algo no muy lejano. Pronto comprobaron que no ser¨¢ tan sencillo. El exmandatario est¨¢ procesado por Llarena por los delitos de desobediencia (que implica ¨²nicamente penas de inhabilitaci¨®n) y de malversaci¨®n. El magistrado ya ha dejado claro que atribuye al expresidente catal¨¢n ese delito en su modalidad agravada, lo que supone una pena de hasta 12 a?os de prisi¨®n.

En caso de regresar a Espa?a, Puigdemont ser¨ªa detenido por las ¨®rdenes nacionales de busca y captura dictadas por Llarena y que contin¨²an en vigor. Su futuro inmediato pasar¨ªa, probablemente, por el ingreso en prisi¨®n preventiva a la espera de un juicio que podr¨ªa suponerle una condena. El Gobierno tiene la posibilidad, una vez sea firme, de concederle el indulto, una posibilidad que, pese a la reci¨¦n adquirida influencia de Junts en el panorama pol¨ªtico, aparece como muy lejana.

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