Adi¨®s a Horacio Segu¨ª, el fotoperiodista que ense?¨® Barcelona a Cruyff

Horacio Segu¨ª (Barcelona, 1930) ha muerto cuando regres¨® la fiebre por los ¨¢lbumes de cromos y por los festivales musicales como Eurovisi¨®n. Nadie ha fotografiado m¨¢s plantillas de f¨²tbol, despu¨¦s de recorrer los distintos campos de la Liga, desde 1972 hasta 2002, ni seguramente dispone de tantas im¨¢genes de los cantantes de la Nova Can?¨®. Hay un libro, La meva vida en un click (Editorial Base, 2017), de Toni Vall, que explica muy bien una obra que ya forma parte del Arxiu Nacional y tambi¨¦n del FC Barcelona. Tambi¨¦n son de Segu¨ª la mayor¨ªa de instant¨¢neas sobre Johan Cruyff y su familia en Barcelona y de la historia del Bar?a durante la presidencia de Agust¨ª Montal (1969-1978). No es suya en cambio la del gol imposible marcado por el as volador contra el Atl¨¦tico de Madrid, aquel 23 de diciembre de 1973 en el Camp Nou, cuando un escorzo del delantero centro holand¨¦s petrific¨® a Miguelito Reina. Aquel gol ha sido inmortalizado como se ha sabido mucho tiempo despu¨¦s por su hermano Rafa Segu¨ª.

Horacio sigui¨® los pasos de Cruyff desde que pis¨® la ciudad en 1970, tres a?os antes de que fichara por el Barcelona, y fue un asiduo durante mucho tiempo a los partidos del Camp Nou. Hay en su casa, muy cercana al estadio, un mont¨®n de fotograf¨ªas todav¨ªa por clasificar y unos cuantos objetos de coleccionista, como por ejemplo las botas con las que Cruyff debut¨® como barcelonista en un amistoso contra el Brujas o unas postales de I?aki Urdangarin de su etapa como jugador de balonmano en el Palau Blaugrana.

Muchas im¨¢genes que no salieron publicadas las regal¨® a sus protagonistas despu¨¦s de luchar toda su vida para que fueran reconocidos los derechos de autor de los fot¨®grafos, uno de los fundadores de la Asociaci¨®n Nacional de Informadores Gr¨¢ficos de Prensa. Horacio fue un fotoperiodista autodidacta desde los 16 a?os, cuando un amigo le regal¨® una c¨¢mara y dej¨® de ser recadero del Banco Hispano Americano, y pas¨® a trabajar en 1963 como freelance en la cadena de revistas de Eusebio Su¨¢rez en Madrid.

Horacio Segu¨ª public¨® en S¨¢bado Gr¨¢fico, Disc¨®bolo o Velocidad antes de abrir en 1968 una tienda y un laboratorio en Barcelona, que estuvo hasta 1995. No par¨® de recorrer mundo en los a?os sesenta y setenta, de fotografiar jugadores y cantantes, como su querido Joan Manuel Serrat. Algunas de las cubiertas de varios discos son obra de Horacio, que presum¨ªa de haber paseado en coche a Tom Jones y en sidecar a Adamo. Procuraba no perderse los festivales de San Remo ni de Eurovisi¨®n.

Hay fotograf¨ªas suyas, muy particulares, de los Beatles, Aznavour, Duke Ellington, Ella Fitzegarld, Raphael, Nino Bravo, N¨²ria Feliu, Mary Santpere, el D¨²o Din¨¢mico o Massiel, algunas en el escenario y otras en sus camerinos, as¨ª como de figuras del cine o la pol¨ªtica de la talla de Orson Welles, Salvador Allende o Salvador Dal¨ª. Tambi¨¦n meritorias han sido sus im¨¢genes sobre distintos deportes disputados en Barcelona, publicadas en varios diarios, y las m¨¢s de 250.000 que versan sobre el Bar?a.

Horacio Segu¨ª ha recibido diferentes reconocimientos, como los premios del Sal¨®n del Autom¨®vil en 1976, 1977 y 1981, y a sus 93 a?os se sent¨ªa estimado como fotoperiodista hist¨®rico que ha sido sobre todo de los a?os 60 y 70.

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