Los cr¨ªticos de Junqueras se preparan para enmendar a la nueva c¨²pula de ERC

Esquerra Republicana celebra este s¨¢bado su primer Consell Nacional tras la elecci¨®n de la nueva c¨²pula que lideran Oriol Junqueras y Elisenda Alamany. En esa reuni¨®n, entre otras cosas, se dar¨¢ luz verde a algunas de las promesas hechas por el t¨¢ndem durante la campa?a, como la puesta en marcha de la comisi¨®n de la verdad sobre el esc¨¢ndalo de los carteles contra los hermanos Maragall o la que evaluar¨¢ el avance de los pactos con los socialistas. Tambi¨¦n se abrir¨¢ oficialmente el periodo de redacci¨®n de los borradores de las tres ponencias que se votar¨¢n a mediados de marzo. Pero el encuentro tambi¨¦n medir¨¢ la intensidad del pulso interno entre Junqueras y sus cr¨ªticos. De momento, las tres listas que compitieron con la del exvicepresident optan por marcar distancias en el borrador de la hoja de ruta y usar¨¢n la v¨ªa de las enmiendas para introducir puntos como separar los cargos org¨¢nicos de los institucionales. Tambi¨¦n descartan formar parte de las comisiones de seguimiento de los pactos con el PSOE y el PSC, de cuyo balance depende el apoyo a los presupuestos estatales y de la Generalitat.

Junqueras se hizo de nuevo con las riendas del partido tras tener que someterse a dos votaciones y cosechar el 52% del apoyo en la segunda vuelta, en una campa?a muy bronca donde pr¨¢cticamente todo se plante¨® como un plebiscito sobre su continuidad. Nova Esquerra Nacional, que aglutin¨® a los afines a la exsecretaria general Marta Rovira y los defensores de un cambio de caras en la direcci¨®n, obtuvo el 42%. Por el camino se hab¨ªan quedado otras dos candidaturas: Foc Nou (que obtuvo el 12% del voto en la primera llamada a las urnas) y Recuperem Barcelona, que no super¨® la fase de los avales. La victoria del exvicepresident parece no ser suficiente a la hora de lidiar con un partido completamente dividido y con pocos ¨¢nimos aparentes de cerrar filas con ¨¦l, como hab¨ªa sucedido desde que en septiembre de 2011 recibi¨® por primera vez el mando en ERC.

Pese a que todas las candidaturas y la nueva direcci¨®n insisten en la necesidad de recoser el partido tras las turbulencias del ¨²ltimo a?o ¨Den junio pasado se hizo evidente del cisma entre Junqueras y Rovira¨D, no se avista un momento de tranquilidad en las filas republicanas. La desconfianza no se ha diluido con la pausa navide?a. Un ejemplo de ello es la manera de c¨®mo se ha gestionado la composici¨®n de las comisiones redactoras de las ponencias que se vota este s¨¢bado. En su d¨ªa, el exvicepresident hab¨ªa aceptado que esos textos que se aprueban en la segunda fase del congreso se redactara de manera conjunta y no solo por la lista ganadora. Los de God¨¤s declinaron el pasado mi¨¦rcoles la invitaci¨®n porque solo se les ofreci¨® una silla en cada uno de los grupos. Por ejemplo, el que se encargar¨¢ del texto estatutario tiene 11 miembros y la pol¨ªtica, 14.

.Foc Nou, el pasado viernes, sigui¨® el mismo camino que los de God¨¤s despu¨¦s de deliberar la situaci¨®n en una asamblea del grupo promotor y rechaz¨® tener presencia en esas comisiones. En la direcci¨®n del partido argumentan que, aparte de la silla para excandidatos, ya hay una representaci¨®n adicional de otras sensibilidades, no hay mayor¨ªa de miembros de la actual direcci¨®n y no quieren entrar en un juego que ven m¨¢s propio de la carrera para elegir la c¨²pula que para pactar la hoja de ruta

La situaci¨®n es id¨¦ntica en la comisi¨®n de seguimiento de los pactos con los socialistas. All¨ª est¨¢n los presidentes de los grupos parlamentarios y Junqueras hab¨ªa invitado a que se propusieran otros nombres desde las excandidaturas. La posici¨®n oficial de ERC es que si no hay avances reales en lo que se pact¨® en su d¨ªa a cambio de investir a Pedro S¨¢nchez y Salvador Illa ¨Del traspaso de Rodalies, la condonaci¨®n de la deuda del Fondo de Liquidez Auton¨®mica o la financiaci¨®n singular, entre otros¨D no se apoyaran las cuentas ni en el Congreso ni en el Parlament. Voces de Nova Esquerra Nacional justifican su ausencia porque consideran el trabajo de ese grupo es una labor exclusiva de la direcci¨®n y el Consell Nacional.

La foto de desuni¨®n de este s¨¢bado ser¨¢ el primer rev¨¦s de Junqueras en su intento por generar espacios para recoser a las diferentes sensibilidades del partido. El anuncio, el pasado mi¨¦rcoles, de que Josep Maria Jov¨¦ aceptaba continuar al frente del grupo parlamentario pese a haberse alineado con Rovira, daba cierto mensaje de acercamiento. El portazo de los de God¨¤s y de Foc Nou, sin embargo, no implica que se abstengan de participar en la ¨²ltima fase del periodo congresual. Ambos colectivos, junto con Recuperem Barelona, se disponen a dar la pelea en la fase de las enmiendas para plantar cara a la direcci¨®n que lidera Junqueras e influir en sus decisiones. Las tres candidaturas aprovechar¨¢n ahora para repescar puntos fuertes de sus programas electorales en la carrera para la direcci¨®n del partido e incluirlos en los textos. De momento, dos puntos claros est¨¢n sobre la mesa: un r¨¦gimen de incompatibilidades de los miembros de la direcci¨®n y la lucha ideol¨®gica sobre cu¨¢l debe ser el espacio pol¨ªtico del partido.

Durante la campa?a, Junqueras tuvo que presenciar como las otras listas mostraban sinton¨ªa en la idea de separar los cargos org¨¢nicos de los puestos institucionales o de las candidaturas a ocuparlos. Para nadie es un secreto que el flamante presidente de ERC aspira a gobernar en Catalu?a. Sin embargo, es inelegible, porque est¨¢ inhabilitado por condena del juicio al proc¨¦s y est¨¢ pendiente de que se decida si se le aplica o no la amnist¨ªa. A ese escollo se suma ahora el riesgo real de un veto estatutario del partido, pues tanto Nova Esquera Nacional como Foc Nou piensan remar para incluir el cambio.

Ambas plataformas tambi¨¦n piensan plantar cara ante un grupo de militantes, con el exportavoz en el Congreso Joan Tard¨¤ a la cabeza, que pugna porque ERC deje de ser un partido solamente independentista y ponga como objetivo la rep¨²blica, para as¨ª ser la fuerza central de un soberanismo m¨¢s amplio y ampliar su base. Las otras listas que participaron en la carrera rechazan este planteamiento que creen que desdibuja a un partido que creen se ha de enmarcar en la izquierda nacional.