La Uni¨®: ¡°El Consell debe actuar, ya no vale que nos digan lo que queremos o¨ªr¡±

El sector agrario valenciano observa con preocupaci¨®n los descensos a?o tras otro de sus producciones tradicionales. El cambio clim¨¢tico y la meteorolog¨ªa adversa, con fen¨®menos extremos, reducen el rendimiento de sus explotaciones y los tres temporales, acompa?ados de granizo, ca¨ªdos solo en septiembre arrojan ya m¨¢s de 50 millones de euros en p¨¦rdidas. ¡°Los productores no tenemos la capacidad de producir como antes. Llevamos varias campa?as consecutivas por debajo de la media y empezamos a estar preocupados. El campo da cada vez menos rendimiento¡±, sostiene Carles Peris (Alquerias, 46 a?os), secretario general de la Uni¨® Llauradora i Ramadera desde 2018. El dirigente agrario asegura que una cosa es estar en la oposici¨®n y otra gobernar: ¡°Ya hemos tenido los primeros roces con el Consell¡±.

Los productores no tienen capacidad de producir igual que antes, sostiene el dirigente: ¡°Solo hay que ver los datos de los aforos. Si hablamos del olivar, el a?o pasado la cosecha estuvo un 70% por debajo y este a?o ser¨¢ mejor pero aun as¨ª estaremos un 50% por debajo de la media de la ¨²ltima d¨¦cada¡±. Los aforos eran en dientes de sierra, un a?o hab¨ªa mucha producci¨®n y al siguiente bajaba pero ahora no ocurre as¨ª. Sucede algo parecido con los c¨ªtricos, el caqui, los frutos secos, el mel¨®n o la sandia. ¡°El factor clim¨¢tico influye mucho porque no hace el tiempo que toca cuando toca, hay meteorolog¨ªa adversa con fen¨®menos extremos en ¨¦pocas de floraci¨®n y de cuajado del fruto, y las plantas no se comportan igual y acaban con rendimientos menores. Nos hacen falta horas de fr¨ªo en invierno y el resultado en muchos cultivos le?osos, como la cereza y el resto de fruta de hueso, es desastroso. Luego est¨¢ tambi¨¦n la presi¨®n de las producciones de pa¨ªses terceros que se importan. El productor agrario se descapitaliza porque el campo da cada vez menos rendimiento¡±.

Seg¨²n Peris, la agenda 2030 tiene unos objetivos para los agricultores ¡°excesivamente ambiciosos y la lucha biol¨®gica no est¨¢ suficientemente desarrollada para darnos una respuesta buena al control de plagas. ¡°Es muy loable pero a la primera de cambio te das cuenta que no est¨¢n adaptados a nuestra realidad y es imposible cumplir en los plazos que se han marcado. Deber¨ªan de alargarse; no nos pueden dejar sin herramientas para cultivar¡±, reivindica. ¡°Gastamos cada vez m¨¢s feromonas, m¨¢s par¨¢sitos, pero ese sistema no te controla las plagas, te las reduce pero no las controla. Estamos tirando mucha fruta por ello y eso nadie lo valora¡±. No puedo cultivar con ese nivel de exigencia, o s¨ª, pero entonces la ca¨ªda de la producci¨®n ser¨¢ todav¨ªa mayor¡±, advierte.

El dirigente agrario asegura que el c¨®ctel de problemas es explosivo. ¡°Juntamos todo y nos encontramos con que el precio en las lonjas de origen son mayores, ahora nadie puede decir que no cobramos un precio digno, pero ese precio, con la ca¨ªda del rendimiento, no compensa en muchas ocasiones y la ¨²ltima parte de la cadena alimentaria no hace ning¨²n esfuerzo para ajustar el precio. ¡°A m¨ª los c¨ªtricos no me los pagan tan caros como para que el precio en los lineales sea tan alto. Continuan teniendo unos m¨¢rgenes muy amplios y ese desequilibrio crea especulaci¨®n dentro del sector agroalimentario¡±, apunta el secretario general de la Uni¨® Llauradora.

Los agricultores m¨¢s profesionales, los que est¨¢n m¨¢s encima de sus producciones, tienen una oportunidad ahora pero hay mucha superficie que no. Y hay otro inconveniente y es que las empresas a veces importan frutas y hortalizas de fuera porque tienen que dar servicio a sus clientes y si no tienen suficiente producci¨®n pues la importan. ¡°No tenemos una suficiencia alimentaria o productiva para servir a todos los clientes y las empresas est¨¢n abriendo l¨ªneas de trabajo en otros pa¨ªses. Marruecos env¨ªa tanta producci¨®n de hortalizas, por ejemplo, porque las empresas andaluzas mayoritariamente, que son las que trabajan ese producto, las necesitan. Estamos en un momento delicado porque no tenemos suficiencia alimentaria de producci¨®n europea y dependemos de otros¡±.

La investigaci¨®n agr¨ªcola para hacer frente a los efectos del cambio clim¨¢tico est¨¢ en marcha, no para, pero es lenta. ¡°Los cambios se ver¨¢n muy poco a poco porque se est¨¢n buscando variedades resistentes a la sequ¨ªa continuada. Costar¨¢ pero cada vez habr¨¢ variedades m¨¢s resistentes. Un producto tropical como el aguacate est¨¢ creciendo en superficie porque cada vez se adapta mejor a las nuevas condiciones pero llevamos, sin embargo, varias campa?as sin cerezas en la Comunidad Valenciana por los desajustes climatol¨®gicos¡±. Se est¨¢n dando variedades de oliva m¨¢s resistentes pero no veo que el cambio vaya a darse r¨¢pidamente.

Los temporales han tra¨ªdo lluvia al campo en septiembre, el problema es que han venido con granizo, y ha da?ado a miles de hect¨¢reas de cultivo de c¨ªtricos, almendra, olivos y uva de vinificaci¨®n en comarcas como Utiel-Rquena, Camp de Turia o la Plana Baixa, entre otras. ¡°La agricultura ecol¨®gica es una soluci¨®n para una parte de los productores y ha crecido bastante pero ahora se ha moderado, cuesta m¨¢s crecer.

Fotovoltaicas en terrenos degradados

Las recientes protestas de municipios del interior por la proliferaci¨®n de proyectos de placas fotovoltaicas inquietan tambi¨¦n a los agricultores. ¡°La Comunidad Valenciana tiene 12.000 hect¨¢reas catalogadas como terrenos degradados, sin embargo, no hay ni un solo proyecto de planta fotovoltaica en esos suelos. Es curioso, ?no? Veo mucho proyecto y poca ejecuci¨®n, pero hay muchos planificados en zonas agr¨ªcolas y nosotros, como organizaci¨®n agraria, defendemos el territorio, al agricultor y la producci¨®n¡±, hace hincapi¨¦ Peris. ¡°Si ya estamos produciendo poco y nos quitan m¨¢s superficies agrarias ¨²tiles, habr¨¢ m¨¢s merma en futuras cosechas. Son los da?os colaterales que vemos de la implantaci¨®n de las plantas fotovoltaicas. Adem¨¢s est¨¢ el impacto ambiental. Est¨¢s quitando una zona verde para crear una energ¨ªa verde y tenemos que tender a ello pero con sentido com¨²n.Nosotros siempre hemos apostado m¨¢s por la instalaci¨®n de placas solares en techos, aparcamientos, pol¨ªgonos industriales... Tenemos muchas superficies cuando el boom urban¨ªstico, campos de golf que se abandonaron y ah¨ª est¨¢n. Pero las empresas buscan tierras baratas. As¨ª que, claro que apostamos por la energ¨ªa renovable pero en superficies m¨¢s peque?as para el autoconsumo de industria u hogares, no en macroplantas pensadas para vender la energ¨ªa, para exportarla. Ese modelo nos penaliza a los agricultores¡±.

El nuevo gobierno valenciano, de PP y Vox, lleva unos meses ya al frente de la Generalitat y Peris valora que se haya separado la cartera de Agricultura de la de Medio Ambiente y que el titular de Agricultura conozca el sector y tenga una visi¨®n agrarista. ¡°No nos parece mal¡±, apunta el dirigente en alusi¨®n a la separaci¨®n de las dos ¨¢reas. Sin embargo, ¡°una cosa es estar en la oposici¨®n y otra gestionar desde el gobierno y ah¨ª hemos tenido los primeros roces¡±, precisa. El ¨²ltimo, con la autorizaci¨®n de quema de restos vegetales, que nos la han denegado. Ellos [en alusi¨®n a las carteras de Vox en el Consell] eran los primeros que, cuando estaban en la oposici¨®n y nosotros ped¨ªamos al gobierno del Bot¨¤nic quemas excepcionales, nos arropaban en nuestras peticiones. Y ahora que es una competencia suya, de la Consejer¨ªa de Interior, en manos de Vox. nos la deniegan a pesar de que el tiempo es favorable, ha llovido y est¨¢ todo h¨²medo. Hasta el 16 de octubre est¨¢ prohibido por eso le hemos pedido una orden excepcional.

Peris pone tambi¨¦n de ejemplo las ayudas por la sequ¨ªa. ¡°El Ministerio ha sacado un paquete de ayudas -el plazo acabo el d¨ªa 20 de septiembre-, que son insuficientes pero ah¨ª est¨¢n. Y nosotros le dijimos hace un mes a la Consejer¨ªa de Agricultura que las comunidades aut¨®nomas pod¨ªan complementar con m¨¢s ayudas las que recoge la orden ministerial. De hecho, hay algunas que han aportado fondos propios pero la Comunidad Valenciana no ha puesto un duro m¨¢s y el plazo se ha acabado. Hemos pedido dos cosas importantes para el sector y fundamentadas y no hemos obtenido respuesta. En esa l¨ªnea, la Uni¨® va a ser muy cr¨ªtica con el nuevo consejero. Ahora tienen que gestionar, ya no nos vale que nos digan lo que queremos escuchar¡± como cuando eran oposici¨®n, subraya el secretario general.