La desconexi¨®n de los ciudadanos m¨¢s pobres de la pol¨ªtica se agrava: ni se hablan ni se escuchan
La poblaci¨®n andaluza en situaci¨®n de ¡°exclusi¨®n severa¡± casi se ha duplicado en cuatro a?os, seg¨²n C¨¢ritas, y los expertos alertan del aumento de la abstenci¨®n entre los m¨¢s humildes
La distancia entre la poblaci¨®n pobre y la clase pol¨ªtica es a menudo sideral. Y esa enorme brecha, que va en aumento, seg¨²n los expertos, es triple: las Administraciones no atienden sus necesidades y las carencias se hacen cr¨®nicas, mientras las familias no escuchan a los pol¨ªticos porque consideran que hablan otro lenguaje. Y esa masa casi se ha duplicado en Andaluc¨ªa con la crisis del coronavirus: de los 600.000 andaluces que se encontraban en 2018 en situaci¨®n de ¡°exclusi¨®n severa¡± (con carencias en al menos cinco de los ocho aspectos sociales analizados) se ha pasado a 1.100.000 en 2021. En solo tres a?os, el porcentaje ha pasado del 7,2% al 13,9% de la poblaci¨®n, seg¨²n el informe de la Fundaci¨®n Foessa, de C¨¢ritas Espa?a, para 2022. ?Tiene remedio esta desconexi¨®n entre la clase pol¨ªtica y la base m¨¢s humilde de la pir¨¢mide, traducida en una alt¨ªsima abstenci¨®n, de hasta el 50% en algunos barrios?
¡°El hast¨ªo llega cuando se alcanza la convicci¨®n de que el voto no sirve para nada y no interesa lo que dicen los pol¨ªticos. Tiene que ver con que los programas no incluyen soluciones a los problemas reales. Hay una doble direcci¨®n: ni los pol¨ªticos hablan de los pobres ni a los pobres les interesan los pol¨ªticos. Con la le?a que soportan de subidas de alquiler y que cada d¨ªa es todo m¨¢s dif¨ªcil, ?le planteas que vote? No est¨¢ en su hoja de ruta¡±, razona Juan Luis Delcan, presidente de la Red de lucha contra la pobreza y la exclusi¨®n en Andaluc¨ªa. La abstenci¨®n en las elecciones auton¨®micas de 2018 alcanz¨® el 51% en el distrito Palma-Palmilla de M¨¢laga; el 43% en el distrito Norte de Granada (con siete barrios de rentas dispares) y el 40% en el distrito Sur de Sevilla (con 14 barrios de renta alta y baja).
Juan Diego Acosta sobrevive en la capital andaluza ¡°haciendo encaje de bolillos¡± y censura: ¡°Los pol¨ªticos no saben qu¨¦ pasa en los barrios humildes, ellos viven en su mundo paralelo. Han quitado a los pediatras del ambulatorio Juan XXIII y los han pasado a otro. A pesar de que el servicio no tiene cercan¨ªa, ellos insisten en que se sigue dando. Somos n¨²meros y un pediatra solo da una buena atenci¨®n con un m¨ªnimo de calidad, si no es imposible¡±.
Antes los partidos acud¨ªan a los barrios m¨¢s humildes de las ciudades para dar m¨ªtines, ahora la mayor¨ªa ya ni hace parada. La mitad de los seis principales programas electorales ni mencionan las medidas para hacer desaparecer esa pobreza que desespera a tanta gente vulnerable. Porque la exclusi¨®n severa ata?e a 1,1 millones de andaluces, pero la cifra se duplica hasta los 2,2 millones (26,3% de la poblaci¨®n) si se cuenta la exclusi¨®n moderada, seg¨²n la encuesta de la Fundaci¨®n Foessa, el estudio m¨¢s reciente sobre pobreza en la comunidad, con m¨¢s de 7.000 hogares entrevistados. Ese informe analiza ocho par¨¢metros sociales: empleo, nivel de consumo, salud, educaci¨®n, pol¨ªtica, acceso a la vivienda, conflicto social y aislamiento social.
¡°No hemos dado con ninguna receta para romper el binomio pobreza-abstenci¨®n, que hace a?os van de la mano¡±, admite Soledad P¨¦rez, portavoz del PSOE para Igualdad y Pol¨ªticas Sociales. ¡°Hasta ahora la interlocuci¨®n con los vecinos no ha sido directa, sino a trav¨¦s de las ONG. Es una participaci¨®n con personas interpuestas, uno de los errores hist¨®ricos en esos barrios¡±, dice. Y a?ade: ¡°La participaci¨®n vecinal ha bajado much¨ªsimo respecto a anta?o. La complejidad y burocracia de las Administraciones genera m¨¢s brecha con la poblaci¨®n. Aunque nos sentemos a hablar, hablamos dos lenguajes diferentes: t¨² explicas la necesidad de una seguridad jur¨ªdica y ellos consideran que solo ponemos obst¨¢culos a sus ayudas¡±. P¨¦rez admite que los partidos ¡°nunca van lo suficiente a estos barrios¡±, donde por lo general carecen de sedes y arraigo.
Uno de los problemas enquistados es que la ayuda econ¨®mica p¨²blica que reciben estas familias ¨Ddesempleados, casi siempre con ni?os a su cargo¨D es tan reducida (entre 400 y 500 euros) que no les permite abandonar el c¨ªrculo vicioso de la pobreza. El acuerdo pol¨ªtico para poder compatibilizar la renta m¨ªnima del Gobierno central con el ingreso por la infancia y la inclusi¨®n de la Junta se ha quedado en el tintero por culpa del adelanto electoral, otro pu?etazo para las familias m¨¢s necesitadas. ¡°Se ha quedado hecho el borrador del decreto, pero no ha dado tiempo, a pesar de que es un tema muy importante¡±, reconoce Ana Vanesa Garc¨ªa, portavoz de Igualdad y Pol¨ªticas sociales en el PP.
El secretario t¨¦cnico de la Fundaci¨®n Foessa, Ra¨²l Flores, destaca que el abismo entre las clases m¨¢s vulnerables y la pol¨ªtica aumenta: ¡°La desafecci¨®n y el alejamiento es cada vez mayor, hay menos implicaci¨®n en movimientos sociales y menos voto. ?Qu¨¦ ocurre? Pues que las personas m¨¢s vulnerables no sienten que sus dificultades se reflejen en los programas pol¨ªticos, no les ofrecen soluciones. Y eso genera otro efecto: que los partidos no reflejan sus preocupaciones porque estas personas no votan¡±.
La carencia material severa en los ni?os andaluces ha pasado del 5,9% al 9,3%, lo que implica que las familias no se pueden permitir una comida de carne o pescado cada dos d¨ªas, mantener la vivienda a temperatura adecuada o pagar el alquiler, seg¨²n un informe de Save The Children en Andaluc¨ªa de hace un a?o, basado en datos del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE).
La emergencia por la pobreza infantil ha provocado que la Comisi¨®n Europea exija ahora a los Estados y autonom¨ªas que el 5% de sus fondos se dedique a la infancia. ¡°Las ayudas no son eficaces si solo sirven para sobrevivir, es necesario un incremento del presupuesto, lo primero es la inversi¨®n. Las pol¨ªticas son ineficientes¡±, censura Javier Cuenca, director de Save the Children en Andaluc¨ªa.
La mitad de las familias andaluzas tiene problemas para afrontar los costes de la crianza, seg¨²n otro informe presentado por Save the Children este martes. Si el coste de criar un hijo en la regi¨®n es de 641 euros al mes, hay un 48,5% de las familias que tiene dificultades para afrontar la factura. En Andaluc¨ªa hay 1,1 millones de familias con hijos, de las cuales 166.467 carecen de ingresos suficientes para cubrir la crianza y requieren ayudas p¨²blicas o de las ONG. En Andaluc¨ªa, 469.995 ni?os y adolescentes estaban en riesgo de pobreza o exclusi¨®n social en 2019, el 40% de la poblaci¨®n infantil, seg¨²n el Observatorio de la Infancia y Adolescencia de Andaluc¨ªa.
La recuperaci¨®n de las familias humildes tras la crisis de 2008 fue tan lenta que, cuando lleg¨® la del coronavirus, muchas no hab¨ªan levantado cabeza, alerta Delcan. ¡°A las entidades sociales nos piden resultados las Administraciones. ?Por qu¨¦ no se hace lo mismo con los cursos p¨²blicos de empleabilidad sin resultados? Habr¨¢ que redise?ar ciertas pol¨ªticas p¨²blicas¡±, incide.
La Red de lucha contra la pobreza y la exclusi¨®n, que aglutina a 61 entidades, se ha reunido con los principales partidos, excepto con Vox ¨D¡°ni nos recibe ni le interesa¡±¨D para transmitirles un dec¨¢logo con 10 medidas de inclusi¨®n social que incorporar a sus programas electorales. Entre ellas, garantizar el derecho a la vivienda de los m¨¢s vulnerables, lo que ayudar¨ªa a hacer desaparecer las decenas de asentamientos chabolistas de temporeros ¨Dsobre todo en Almer¨ªa y Huelva¨D y la lucha contra la transmisi¨®n intergeneracional de la pobreza.
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