La covid dispara el voto por correo

El miedo al contagio del coronavirus ha disparado el voto por correo en las elecciones catalanas del 14-F, envueltas en la incertidumbre desde el primer d¨ªa por el aplazamiento que intentaron el Govern y los partidos (todos menos el PSC) y que la justicia finalmente rechaz¨®. Correos revel¨® el viernes, horas antes de acabar el plazo, que hab¨ªa recibido un total de 270.392 solicitudes para ejercer el sufragio v¨ªa postal. La cifra es m¨¢s de tres veces superior a la registrada en las elecciones de 2017 ¡ªentonces fueron 78.872¡ª. Con el confinamiento municipal vigente en Catalu?a ¡ªa partir del lunes ser¨¢ comarcal¡ª, el volumen de votos refleja el miedo de muchos ciudadanos a acercarse a los colegios electorales, no solo para votar, sino para ejercer de miembros de mesa. La Junta Electoral de Barcelona resolvi¨® el viernes que, si es necesario, los suplentes de mesas ya constituidas ser¨¢n reasignados a otros colegios.

Las cifras son elocuentes y revelan el recelo may¨²sculo que ha despertado la celebraci¨®n del 14-F en plena tercera ola de la pandemia. M¨¢s de 21.180 de los 82.251 miembros seleccionados por sorteo para estar en las 9.117 mesas ¡ªes decir, el 25%¡ª han presentado alegaciones ante las juntas de zona para ser eximidos de esa responsabilidad. Esos ¨®rganos tienen de plazo hasta el pr¨®ximo jueves para contestar a los escritos, que en muchos casos aducen razones sanitarias y que casi ponen en jaque la buena marcha de los comicios. El grado de protesta soterrada, con mil y un argumentos, es tan elevado que la Junta Electoral de Barcelona ha dictado instrucciones para intentar solventar el problema. Las cifras son provisionales, pero de momento se han contabilizado 16.027 quejas en Barcelona; 2.490 en Tarragona; 1.386 en Girona y 1.277 en Lleida.

La Ley Org¨¢nica de R¨¦gimen Electoral General (LOREG) establece que las vacantes de las mesas deben suplirse con las primeras personas que acudan a los colegios a votar. El problema es que el operativo del 14-F distribuye a los electores por franjas de edad y aconseja que sean las personas mayores las primeras en ejercer su derecho, para evitarles riesgos. Por tanto, si se siguiera el criterio b¨¢sico de la ley, acabar¨ªan integrando las mesas personas especialmente vulnerables, que quedar¨ªan expuestas a un hipot¨¦tico contagio, precisamente lo que se intenta evitar.

Cada mesa tiene asignados tres titulares y seis suplentes. La f¨®rmula elegida, si se da el caso de ausencias el 14-F, es reasignar a los suplentes de las mesas ya constituidas a colegios del mismo municipio que sigan sin componer. La Junta provincial asume que la constituci¨®n de las mesas es ¡°uno de los potenciales momentos cr¨ªticos¡±, y conf¨ªa en neutralizarlo con los suplentes. ¡±No es de recibo [recurrir al primer elector] porque ¡°es esperable la afluencia de electores de edad avanzada¡±, alega.

La constituci¨®n de las mesas es el gran quebradero de cabeza del 14-F y el term¨®metro que muestra el miedo ante la pandemia. El Departamento de Salud notific¨® ayer 2.984 nuevos casos y 96 muertos por coronavirus. Hay un total de 718 en la UCI, superando ampliamente el l¨ªmite, lo que amenaza con producir un colapso hospitalario. Hay ciudadanos que consideran una incongruencia sufrir infinidad de restricciones ¡ªpor ejemplo, no poder salir a cenar o ir a una gran librer¨ªa¡ª pero que no haya problemas para formar parte de una mesa. No comparecer en un colegio est¨¢ castigado con multa o pena de tres meses a un a?o de c¨¢rcel.

La Generalitat, que intent¨® eximir a los mayores de 60 a?os para las mesas, insiste en que el protocolo garantizar¨¢ la seguridad de todo el proceso. Pero la cuesti¨®n es que una cosa es acercarse un rato para votar y otra muy distinta pasar todo el d¨ªa en un colegio. Santiago Garc¨ªa, el juez que preside la Junta Electoral de Zona de Barcelona, admiti¨® a este diario que solo a las 9.00 de la ma?ana del 14-F sabr¨¢n si las elecciones son viables. Ahora, en los juzgados, con el apoyo de forenses, est¨¢n estudiando los miles de alegaciones. El Govern no duda de que las juntas electorales las contestar¨¢n todas. En Barcelona ciudad han recurrido 8.000 ciudadanos. En Terrassa (Barcelona) se han registrado 1.100 de un global de 2.000.

El operativo electoral est¨¢ en marcha ¡ªcuenta con el aval de los grupos del Parlament, que trabajaron en la elaboraci¨®n de los protocolos¡ª y prev¨¦ que entre el martes y el viernes de la pr¨®xima semana se sometan a test de ant¨ªgenos todos los convocados, para localizar a posibles positivos. El Departamento de Salud del Gobierno catal¨¢n asume que la medida tensionar¨¢ a¨²n m¨¢s la asistencia primaria, pero ha optado por ella para extremar las medidas de seguridad. Ayer se realiz¨® un simulacro de votaci¨®n en Sant Juli¨¤ de Ramis (Girona).

El d¨ªa de las elecciones todo el personal dispondr¨¢ de equipos de protecci¨®n EPIS, que utilizar¨¢n en la ¨²ltima hora de la jornada, de 19.00 a 20.00, cuando est¨¢ previsto que las personas contagiadas con covid o sus contactos estrechos puedan acudir a votar (aunque es un horario recomendado, no obligatorio). Fuentes del Govern y de la Junta Electoral admiten que si una persona se contagia podr¨¢ presentar una demanda contra la Administraci¨®n, que tiene la responsabilidad objetiva.

La Generalitat conf¨ªa en que la jornada electoral se podr¨¢ desarrollar con normalidad, aunque advierte de que el recuento de votos se podr¨¢ dilatar por el uso de guantes y la distancia entre personas en las mesas. Otra cosa ser¨¢ si finalmente no puede constituirse un n¨²mero de mesas suficientemente significativo como para alterar la votaci¨®n. En ese caso, el Ejecutivo no divulgar¨¢ el resultado y aguardar¨¢ a que la votaci¨®n se realice 48 horas despu¨¦s en los colegios afectados. El voto por correo no complicar¨¢ el recuento, porque cada voto se a?adir¨¢ a la urna que tiene asignada. Esos 270.392 votos se repartir¨¢n, por tanto, por las m¨¢s de 9.000 mesas electorales.