Tridente de izquierdas
La coordinaci¨®n entre el PSOE, M¨¢s Madrid y Unidas Podemos se refuerza tras el giro a la campa?a provocado por Vox
A diferencia del PP, Vox y Ciudadanos, en la campa?a de Madrid el bloque de izquierdas se est¨¢ comportando como tal por primera vez. En vez de enzarzarse por escenificar qui¨¦n es m¨¢s aut¨¦ntico y encarna mejor los valores progresistas, PSOE, M¨¢s Madrid y Unidas Podemos evitaron los duelos en el debate de Telemadrid el pasado mi¨¦rcoles. ?ngel Gabilondo, M¨®nica Garc¨ªa y Pablo Iglesias se coordinaron con un ¨²nico objetivo: desgastar a Isabel D¨ªaz Ayuso en el ¨²nico debate al que la presidenta de Madrid asisti¨® antes del 4-M.
El rechazo de Roc¨ªo Monasterio, la candidata de Vox, a retractarse y condenar las amenazas de muerte a Pablo Iglesias dos d¨ªas despu¨¦s en el debate organizado por la Cadena SER termin¨® de cohesionar la estrategia, con sus matices, del PSOE y los partidos a su izquierda. La campa?a se ha reducido a una cuesti¨®n: ¡°Ultraderecha o democracia¡±, con Gabilondo calcando el discurso de Iglesias en su alerta antifascista.
¡°Una de las valoraciones m¨¢s expl¨ªcitas que se hizo del debate de Telemadrid¡±, reflexiona Gabilondo en conversaci¨®n con EL PA?S, ¡°fue el hecho de que la izquierda hab¨ªa mostrado por primera vez que hab¨ªa intereses leg¨ªtimos, democr¨¢ticos, superiores a sus propios intereses particulares y partidistas. Y eso fue una ilusi¨®n para muchos. Hay una sensaci¨®n de que por primera vez se ve que estamos pensando en algo distinto a c¨®mo me va a m¨ª, a mi partido, mis esca?os... Estamos pensando en la poblaci¨®n, en el colectivo. Nos abrimos a la ilusi¨®n de una sociedad distinta¡±.
Una de las pruebas m¨¢s claras que dej¨® ese debate fue la decisi¨®n de Iglesias de no rebatir, salvo una ligera protesta, con el candidato del PSOE sobre fiscalidad. ¡°No se van a tocar los impuestos, entendamos la situaci¨®n actual. En este momento, no¡±, interpel¨® Gabilondo a Iglesias, partidario de revisar los impuestos a las rentas m¨¢s altas. El candidato de Unidas Podemos no disimul¨® su sorpresa, pero se mordi¨® la lengua. Igual que cuando Gabilondo ofreci¨® de forma expl¨ªcita un Gobierno de coalici¨®n a M¨¢s Madrid ¡°con el apoyo¡± de Unidas Podemos. Es decir, dando a entender que no entrar¨ªa en el Ejecutivo. Iglesias no puede estar m¨¢s en desacuerdo, pero tampoco elev¨® el tono. Ambos ejemplos, en otra coyuntura, habr¨ªan supuesto un rifirrafe seguro.
La candidata de M¨¢s Madrid tampoco ha buscado la confrontaci¨®n con los otros espacios de izquierda. Su rechazo a ir en coalici¨®n con Iglesias ¡ª¡°Las mujeres estamos cansadas de hacer el trabajo sucio para que en los momentos hist¨®ricos nos pidan que nos apartemos¡±¡ª fue su ¨²nico ataque a Unidas Podemos. Desde entonces, se ha centrado en aunar esfuerzos dentro de la izquierda.
Del mismo modo, Iglesias apenas se ha desviado de su empe?o, aunque de vez en cuando lanza alg¨²n mensaje buscando diferenciarse, fundamentalmente del PSOE. ¡°No podemos ganar a la derecha haciendo lo mismo que ellos¡±, ha deslizado en referencia a la fiscalidad en la ¨²nica comunidad que no grava el impuesto de patrimonio y donde el impuesto de sucesiones y donaciones, bonificado al 99%, no existe en la pr¨¢ctica. Pero Iglesias parte de una certeza: las peleas desmovilizan al ya de por s¨ª abstencionista electorado de izquierdas de Madrid.
La relaci¨®n que M¨¢s Madrid mantiene con el PSOE es muy buena, seg¨²n fuentes de las dos direcciones. Y eso que, seg¨²n las ¨²ltimas encuestas, estar¨ªa creciendo a costa de los socialistas. A Gabilondo no parece importarle. Tampoco a la direcci¨®n federal del PSOE. ¡°La mayor¨ªa absoluta est¨¢ en 69 esca?os. El objetivo es sumar entre las tres sensibilidades de la izquierda. Da igual si bajamos o no. Lo importante es movilizar al m¨¢ximo entre todos para que haya un cambio de Gobierno¡±, sostienen en Ferraz. Gabilondo mantiene: ¡°Hay que ser generosos, tenemos que saber generar espacios donde puedan respirar diferentes opciones. Hay modelos distintos de afrontar los asuntos y todos ellos con una opci¨®n de progreso. En Telemadrid se vio a tres fuerzas de izquierda, cada una con su historia, mandando el mensaje de que ah¨ª hab¨ªa algo que construir m¨¢s que lo que la propia derecha plante¨®¡±.
Diferentes p¨²blicos
El tridente de izquierdas afronta la semana decisiva de la campa?a diversificando sus recursos. Para complementarse, cada uno se concentrar¨¢ en movilizar a los diferentes p¨²blicos donde tiene m¨¢s tir¨®n. ¡°La derecha es de gasolina y nosotros funcionamos como un di¨¦sel. Nos cuesta m¨¢s carburar¡±, resumen en la c¨²pula del PSOE. De los tres partidos, es el que tiene los votantes de m¨¢s edad. Pero su gran fortaleza es que se trata de la fuerza con la mayor capacidad de atraer a votantes. Una de las claves ser¨¢ la participaci¨®n en las grandes ciudades del cintur¨®n industrial del sur de Madrid y del Corredor del Henares. Casi todas tienen alcaldes socialistas.
Las encuestas internas que manejaba M¨¢s Madrid antes de la campa?a revelaban que Garc¨ªa era una candidata con un potencial enorme entre los menores de 45 a?os. ¡°Antes de la campa?a not¨¢bamos cierta dificultad para calar en el electorado de los mayores, pero estos d¨ªas todo est¨¢ cambiando¡±, cuenta un alto cargo del partido. Garc¨ªa, aseguran, tiene la baza de ser una candidata muy vertical. El CIS incluso la sit¨²a como la m¨¢s valorada entre los propios votantes de Podemos. La prioridad de Garc¨ªa, que conecta muy bien con los universitarios y los profesionales sanitarios, ser¨¢ arrastrar el voto joven y el voto femenino. Este domingo, por ejemplo, tuvo un acto solo de mujeres.
A su vez, Iglesias se dirige a la clase trabajadora y les recuerda que tienen derecho a pedir un permiso que les permita desplazarse hasta las urnas el 4-M. En opini¨®n de la polit¨®loga Cristina Monge, el l¨ªder de Unidas Podemos se dirige con su discurso al votante ¡°tradicional de Izquierda Unida, pero tambi¨¦n a un electorado joven, militante y activista que se identificar¨ªa hoy con IU¡±.
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