Abrazos doloridos

La Real Filharmon¨ªa de Galicia (RFG), dirigida por Paul Daniel, ha celebrado este jueves su concierto de abono de esta semana bajo el t¨ªtulo Abrazando a natureza. El concierto comenz¨® con dos estrenos en Espa?a - Within her Arms, de Anna Clyne, y la Sinfon¨ªa pastoral de Brett Dean- para acabar con la Sinfon¨ªa n? 6 en fa mayor, ¡°Pastoral¡± de Beethoven.

Este ha sido, por dos razones, un programa adaptado a la actualidad como una llave a su cerradura. El dolor que la pandemia de covid-19 est¨¢ sembrando en el mundo necesita el b¨¢lsamo de obras como la de Clyne. En el otro extremo, la Pastoral de Dean es un grito musical que expresa lo que siente el autor ante lo que la civilizaci¨®n le est¨¢ haciendo a la naturaleza y su interpretaci¨®n por la RFG ha coincidido en el tiempo con el acuerdo de la UE elevando la reducci¨®n de emisiones en 2030.

Anna Clyne declar¨® en su momento que Within her Arms es una ¡°m¨²sica para mi madre con todo mi amor¡±. La obra es pr¨¢cticamente una eleg¨ªa compuesta para una orquesta de cuerdas con muy pocos efectivos y est¨¢ escrita con una gran individualizaci¨®n de las partes de cada ejecutante. Esto le proporciona un car¨¢cter dialogado y m¨¢s ¨ªntimo que intimista, lo que permite a quien la escucha seguir las sensaciones y sentimientos que inspiraron a su autora.

La versi¨®n de Daniel y la Real Filharmon¨ªa puso en valor esos valores a partir del motivo inicial de cuatro notas, verdadero germen de toda la composici¨®n. Los solos del concertino, James Dahlgrem, expresaron el dolor serenamente contenido que informa toda la obra, un canto de amor expresado como suspiros entre el dolor de unas disonancias que aparecen y desaparecen repentinamente a lo largo de la obra.

El final deja o¨ªr una serie de arm¨®nicos en el registro agudo, casi como un ¨²ltimo y sosegado suspiro. Como tal pareci¨® ser respetado y apreciado por quienes asist¨ªan al concierto: un silencioso respeto seguido de un c¨¢lido aplauso en el que se pudo apreciar que el aforo hab¨ªa crecido desde las treinta de anteriores conciertos hasta la m¨¢s de doscientas personas que pudieron asistir a este.

Se podr¨ªa decir que la Sinfon¨ªa pastoral de Brett Deaan tiene un car¨¢cter pr¨¢cticamente opuesto a la obra de Clyne: Dean utiliza una cinta grabada en la que se puede apreciar tanto el canto de los p¨¢jaros en plena naturaleza como una serie de ruidos industriales y de maquinaria que representan la contaminaci¨®n ambiental y el da?o que causa la deforestaci¨®n.

Un amplio org¨¢nico de vientos y percusi¨®n acompa?a a la cuerda y a la electr¨®nica: un acierto de programaci¨®n por el contraste con la obra anterior. La versi¨®n que se pudo escuchar en el Auditorio de Galicia y en la transmisi¨®n en streaming destac¨® el car¨¢cter de dolorida protesta de la breve sinfon¨ªa, con una tensi¨®n expresiva que proyect¨® adecuadamente el clima sonoro de la obra. El final, con un ambiente algo stravinskiano, dej¨® un poso de concienciaci¨®n.

Este final contrast¨® vivamente con el inicio de la Sexta de Beethoven, en el que ese ¡°despertar de alegres sentimientos al llegar al campo¡± fue el paso de la paz de aquellos alrededores de la Viena de 1808, con toda la fuerza con la que la naturaleza pod¨ªa expresar. Y as¨ª fue a lo largo de toda la interpretaci¨®n del jueves. Un canto a la naturaleza expresado con grandes dosis de serenidad, fuerza y alegr¨ªa de principio a fin de la obra. A ello contribuyeron tanto y tan bien todas las secciones y solistas de la Real Filharmon¨ªa que ser¨ªa injusto destacar a cualquiera en particular. En resumen: un inteligente programa, lleno de contrastes e id¨®neamente interpretado.