El inesperado placer de ordenar casas y vidas
Alicia Iglesias fund¨® hace cuatro a?os Orden y limpieza en casa como un blog y una empresa hoy convertidos en tienda, talleres y gran comunidad


Cuando alguien que tiene una empresa de ¨¦xito dedicada a ordenar, limpiar y convertir simples casas en verdaderos hogares (y a mantenerlos) suelta un ¡°Yo era una persona profundamente desordenada¡±, llega la sorpresa. Y cuando dice: ¡°Soy la tiradora oficial de mi casa de toda la vida. Se me da fenomenal. Pero eso no significa ser ordenado...¡± la cosa se pone interesante.
Tan interesante y sorprendente como Alicia Iglesias (Avil¨¦s, 1982), que entra y trastoca casas, armarios y vidas. En 2016, despu¨¦s de crear muchas empresas y bastantes negocios (ropa de ni?os y madres a juego, ¡°inform¨¢tica, desinfecci¨®n... miles que han funcionado fatal¡±, r¨ªe al otro lado del tel¨¦fono), de mudarse a Madrid, de estudiar un m¨®dulo de dise?o de moda y ver que en la capital cualquier empresa de ese sector ¡°era inviable¡±, tuvo una revelaci¨®n. Su cu?ada, que viv¨ªa en EE UU, le cont¨® que hab¨ªa contratado a una persona ¡°para que organizara su casa¡±. Y vio su oportunidad, esa que hoy es Orden y Limpieza en casa.
Aquello era 2016. ¡°Nos sentamos e hicimos el plan de negocio. Llam¨¦ a una coach, que me ayud¨® a redondearlo, me dio pautas. Me puse en contacto con Mar¨ªa Gallay, la ¨²nica organizadora profesional que hab¨ªa en Madrid y le dije: 'Yo quiero ser tu chica de pr¨¢cticas¡¯. Estuve seis meses con ella". Y con ella sigue colaborando. Durante esos seis meses el blog que ten¨ªa desde 2007 se transform¨®. Hoy es un blog, s¨ª, ¡°el primero en castellano ¨ªntegramente dedicado a la organizaci¨®n de la casa¡±, cuenta con orgullo y alegr¨ªa, pero tambi¨¦n una web, un perfil de Instagram con 115.000 seguidores (con un directo cada domingo donde hay siempre m¨¢s de mil personas directas a lanzar una pregunta), un canal de YouTube con 161.000 suscriptores y, desde septiembre, un exitoso podcast.
Iglesias tiene sus m¨¦todos. El m¨¢s conocido es el llamado M¨¦todo 21 d¨ªas. ¡°Funcion¨® muy bien porque sub¨ªa un post cada dos d¨ªas, la gente lo iba haci¨¦ndolo", rememora. Y siguen, siguen. A trav¨¦s de sus perfiles sociales, de sus libros (que se leen en China o en Am¨¦rica Latina; est¨¢ a punto de autoeditar el cuarto), de sus talleres, que le hicieron recorrer 12.000 kil¨®metros por toda Espa?a en 2019 y que ahora imparte online y, por supuesto, de ella misma.
Porque tambi¨¦n acude a domicilio, para poner la casa en orden y la vida m¨¢s f¨¢cil. Con tareas que van de un cambio de armario (dos horas justas) hasta encargarse de toda una mudanza (en apenas ocho). Sus clientes son de lo m¨¢s variopinto. ¡°Grandes mudanzas de Chile o Argentina. O una reorganizaci¨®n porque van a tener un beb¨¦ y es una casa chiquitita con dos personas y no entran. O una casa en El Soto de La Moraleja: los hijos ya son mayores y ella ha decidido tomar las riendas¡±, repasa. Tambi¨¦n momentos duros, como separaciones o vaciado de casas postmortem. ¡°En Orcasitas hab¨ªa muerto un matrimonio con poco tiempo de diferencia, el hijo no era capaz de hacerlo y hab¨ªa cosas que pod¨ªan tener una segunda vida¡±, relata, siempre con un toque de optimismo. Ella no tira: dona, recicla, regala. A puntos limpios espec¨ªficos, organizaciones ben¨¦ficas o empresas que recogen casi de todo.
?Cu¨¢ntas veces la han comparado con la c¨¦lebre japonesa Marie Kondo? Muchas no, much¨ªsimas. ¡°Uno de los posts m¨¢s le¨ªdos de mi blog es No soy Marie Kondo. Yo no doy las gracias a las cosas. Los bienes materiales son bienes materiales, seres inertes, no me arrodillo, no los abrazo. Esto es como muy normal¡±, resume, quit¨¢ndole hierro a su capacidad organizadora que, por cierto, empieza por la cocina. ¡°?Ella se salta totalmente la cocina! Y es imprescindible en Espa?a, hacemos todo alrededor de la mesa". Adem¨¢s, el choque cultural tambi¨¦n suma. ¡°No estoy de acuerdo en c¨®mo hay que ordenar. En Jap¨®n la gente tiene pocas cosas; en Espa?a no. Ella pone a los objetos a un nivel muy alto. ?Que son objetos, ya est¨¢! Adem¨¢s, ella no ordena. Yo me visto de obra y trabajo, f¨ªsicamente¡±. Aunque reconoce que s¨ª ha ayudado ¡°a conocer la profesi¨®n "y a crear vocaciones¡±.
El orden, adem¨¢s, no tiene que llegar tan tarde. ¡°A los ni?os hay que ense?arles a ordenar. Tu madre te dec¨ªa ¡®Ordena eso¡¯, pero no te dec¨ªa c¨®mo, no se pon¨ªa a hacerlo, a dividir por categor¨ªas. Si no te ense?an, no sabes¡±. Por eso ve que este puede ser un buen momento para sentar una base en los peque?os. Como con el reparto de tareas: si es diario, se evitan las discusiones y las acumulaciones de fin de semana. Pero como profesional afirma que ¡°sigue costando llegar al 50%-50%. El 90% de mis clientes son mujeres, el 97% de mis seguidores. Ellos todav¨ªa no se implican, aunque a veces a ellas les cuesta saber delegar¡±. M¨¢s en un asunto que se considera delicado, superficial, del que no se habla y que, de la forma m¨¢s tonta, hace surgir la pelea. ¡°No hay que reaccionar: cuando no haya ropa interior limpia, ser¨¢ el momento de que alguien se ponga las pilas¡±, desvela.
?Y lo pr¨®ximo? Adem¨¢s del orden, le chifla la limpieza. Ella jura y perjura que con media hora de mantenimiento diario no hay que pringar los fines de semana. Y que lo natural funciona: en semanas, cuando todo pase, lanzar¨¢ su propia l¨ªnea de jabones, botellas, difusores, trapos (¡°100% algod¨®n, hechos en Espa?a y bien de precio¡±). Y espera poder tenerlo todo en una futura tienda f¨ªsica en el centro de Madrid. Y seguir con sus clientes, claro. Con cari?o y confianza. ¡°Porque el d¨ªa que yo toco el caj¨®n de tus bragas, t¨² y yo tenemos que caernos bien".
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