¡°En Las Rozas se ha apoyado siempre las decisiones m¨¢s duras¡±
El alcalde Jos¨¦ de la Uz (PP) considera que la gesti¨®n de la pandemia queda fuera de la esfera pol¨ªtica y pertenece al ineludible terreno de la ¨¦tica
Las Rozas encierra dos mundos a la vez. Por un lado, el de las urbanizaciones con piscina y las viviendas unifamiliares rodeadas de seto. Por otro, el del casco hist¨®rico, un complejo arquitect¨®nico de casas bajas y apariencia rural que fue hogar de pastores y floreci¨® al auspicio de la l¨ªnea f¨¦rrea en el siglo XIX. La expansi¨®n del primero de esos universos es, a buen seguro, responsable del aumento poblacional: el padr¨®n de esta localidad se ha triplicado en tres d¨¦cadas, casi el mismo tiempo que lleva gobernando aqu¨ª el PP. El regidor de ese signo, Jos¨¦ de la Uz, de 42 a?os, reside en el barrio de Las Matas, aunque la casa consistorial permanece enclavada en mitad del antiguo pueblo. Bajo sus soportales, solo unos chavales que juegan al f¨²tbol rompen el sosiego.
Pregunta. Usted es padre, ?c¨®mo se le explica a un hijo la pandemia?
Respuesta. Tiene nueve a?os y justo estuvo aprendi¨¦ndolo en clase unos meses antes de que se declarara el estado de alarma. Qu¨¦ cruda lecci¨®n pr¨¢ctica. Lo m¨¢s complicado fue darle a entender que yo estaba en casa, pero no de vacaciones. En nuestra familia nadie se infect¨®, as¨ª que ¨¦l lo vivi¨® de un modo un poco abstracto. Los directores de los colegios me han contado en alguna ocasi¨®n c¨®mo los peque?os han sido muy responsables estos meses. Han ayudado en casa, sin olvidar sus responsabilidades en el aprendizaje. En muchos casos dieron una lecci¨®n de madurez.
P. ?Con los vecinos tambi¨¦n tuvo que hacer pedagog¨ªa?
R. Mi trabajo desde el primer momento consisti¨® en permanecer pendiente de d¨®nde estaba cada uno de ellos. Las Rozas tienen una poblaci¨®n mayoritariamente joven, pero tambi¨¦n hay n¨²cleos con personas mayores que no manejan el m¨®vil ni las redes sociales. Por eso habilitamos un n¨²mero de tel¨¦fono para atenderlos ante cualquier necesidad, evitando que salieran de casa. Tambi¨¦n se revel¨® la importancia del tejido vecinal. Recurrimos a los clubes deportivos, el Consejo Sectorial de Discapacidad o al de la Mujer. A trav¨¦s de ellos, procuramos llegar hasta el ¨²ltimo rinc¨®n del pueblo. El contacto fue siempre telem¨¢tico: esta pandemia constituye el final de la era contempor¨¢nea y el impulso definitivo a la ¨¦poca tecnol¨®gica. Nuestros hijos estudiar¨¢n esta crisis como un hito en la digitalizaci¨®n.
P. ?Cont¨® con voluntarios?
R. La ayuda en las primeras semanas se llev¨® a cabo bajo el paraguas de un recurso que llamamos Las Rozas Conecta. Se trata de un grupo de trabajadores del Ayuntamiento que empez¨® a tirar de censo y llamar a todos los vecinos mayores de 75 a?os. Se dedicaron a prestar servicio por tel¨¦fono y por email todos los d¨ªas de la semana. Atend¨ªan dudas sobre el estado de alarma, gestiones administrativas o necesidades de alimentaci¨®n. A parte de estos profesionales, nos llamaron muchos voluntarios, que siempre fueron m¨¢s que quienes requirieron ayuda. Hubo hasta quien cosi¨® mascarillas, imprimi¨® m¨¢scaras 3D o tune¨® las gafas de buceo con el fin de fabricar respiradores. Aqu¨ª la gente no se ha sentido abandonada. Los Ayuntamientos han lidiado con el gran drama humano de la pandemia. Nuestra labor no entiende de pol¨ªtica, sino de ¨¦tica y humanidad. Los vecinos que no pudieron despedirse de sus familiares han llorado sobre mi hombro.
P. Un d¨ªa despu¨¦s de la declaraci¨®n del estado de alarma ya ten¨ªa a todo el Consistorio trabajando en casa.
R. La clave fue la anticipaci¨®n. Cuando cierran los colegios y los centros de mayores comenzamos a pintar escenarios y a teletrabajar todos. A distancia hemos empadronado a nuevos vecinos y tramitado expedientes. Incluso pulverizamos el periodo medio de pago a nuestros proveedores, que pas¨® de 80 d¨ªas a 14 para contribuir a que las empresas de la zona estuvieran menos ahogadas. Vimos, tambi¨¦n, la f¨®rmula de evitar los ERTES a las subcontratas del Ayuntamiento, en tanto en cuanto estuviera en vigor el contrato p¨²blico. Fuimos los primeros en anunciar ayudas al alquiler de marzo y abril para parados. Y continuamos trabajando en aquellos planes que ya estaban en marcha, como las l¨ªneas de ayuda a la innovaci¨®n tecnol¨®gica que reciben los centros escolares.
Aqu¨ª la gente no se ha sentido abandonada
P. El coronavirus ha exacerbado las desigualdades entre alumnos. No todos pudieron seguir las clases virtuales por falta de medios. ?El Ayuntamiento ayud¨® a reducir esa brecha?
R. Aqu¨ª esa no fue la situaci¨®n m¨¢s extendida. En todo caso, los directores de los centros detectaron algunos casos y pusimos a disposici¨®n de las familias un centenar de equipos. Las Rozas alberga una de las comunidades educativas m¨¢s potentes de la regi¨®n. Llevamos trabajando a?os la innovaci¨®n tecnol¨®gica con los centros. El liderazgo siempre lo han tomado los profesionales, pero nosotros concedemos las ayudas para invertir en tecnolog¨ªa, material y proyectos. Seguramente seamos el ¨²nico municipio del pa¨ªs que cuenta con un torneo propio de rob¨®tica, al que puede concurrir cualquier alumno.
P. Ha cancelado las fiestas de San Miguel y el presupuesto se destinar¨¢ a partidas sociales. ?La decisi¨®n se ha entendido en el municipio?
R. Esta es una sociedad que ha apoyado desde el principio las decisiones m¨¢s duras. El comportamiento ha sido ejemplar. No solo lo intuyo por los mensajes de ¨¢nimo en las redes sociales, sino tambi¨¦n porque cada semana me re¨²no con la oposici¨®n, para escuchar propuestas, rendir cuentas y analizar el contexto. Estuve con los diferentes actores que organizan las fiestas: las pe?as, la hermandad y el p¨¢rroco. Y ellos han podido decidir a qu¨¦ se destinar¨¢ el presupuesto de los festejos cancelados. Uno de los portavoces, por ejemplo, enfatiz¨® la educaci¨®n en valores tecnol¨®gicos. Reducir la brecha digital est¨¢ bien, pero ¨¦l consideraba que los nativos digitales necesitan repensar el buen uso de m¨®viles u ordenadores. Y as¨ª ser¨¢: vamos a montar cursos y talleres escolares.
P. Dice que el comportamiento ciudadano en Las Rozas fue mod¨¦lico. ?Y las caceroladas de las nueve contra el Gobierno de Espa?a?
R. No tengo constancia de sanciones por esas manifestaciones ni de que aqu¨ª hayan gozado de un seguimiento especial. La geograf¨ªa ayuda al distanciamiento y las medidas de seguridad, porque Las Rozas es el tercer t¨¦rmino municipal en extensi¨®n de toda la regi¨®n. Con otra densidad, las circunstancias quiz¨¢ habr¨ªan sido diferentes.
Un abogado especialista en asesor¨ªa empresarial
Jos¨¦ de la Uz est¨¢ casado y es licenciado en Derecho y m¨¢ster en Administraci¨®n y Direcci¨®n de Empresas (MBA) por ICADE. Comenz¨® su actividad laboral en la banca, que compagin¨® con sus primeras responsabilidades pol¨ªticas, siempre asociadas al Partido Popular. En 2011, fue nombrado secretario general t¨¦cnico en la vicepresidencia de la Comunidad de Madrid, que entonces encabezaba Ignacio Gonz¨¢lez. ¡°La experiencia de Las Rozas ha sido de absoluta sinton¨ªa con el Gobierno regional durante la crisis sanitaria. Yo he hablado personalmente con varios consejeros¡±, se?ala De la Uz.
El primer mun¨ªcipe considera que los Ayuntamientos se han echado a la espalda ¡°el gran drama humano de la pandemia. Nuestra labor no entiende de pol¨ªtica, sino de ¨¦tica y humanidad. Los vecinos que no pudieron despedirse de sus familiares han llorado sobre mi hombro¡±. Cuando lo peor de la crisis sanitaria parece haber quedado atr¨¢s, De la Uz sugiere que los test masivos pierden valor y utilidad: ¡°Entiendo perfectamente la decisi¨®n de Torrej¨®n, porque constituye uno de los municipios m¨¢s tocados por el virus. Pero ahora, con esta incidencia, resulta de mayor utilidad un estudio serol¨®gico basado en una muestra poblacional y coordinado por la Comunidad. Lo dem¨¢s puede contribuir a una falsa sensaci¨®n de seguridad¡±.
Las Rozas, en cifras
Las Rozas es una localidad situada al oeste de la capital que cuenta con una poblaci¨®n de 96.000 habitantes. La renta bruta media de sus vecinos alcanza los 50.166 euros, lo que sit¨²a al municipio en el tercer lugar del posicionamiento nacional. Los datos de contagios por coronavirus muestran a primero de julio 880 casos de vecinos infectados.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.