D¨ªaz Ayuso, un a?o en el ojo del hurac¨¢n
12 meses despu¨¦s de su toma de posesi¨®n, el proyecto del Gobierno de PP y Cs encalla por sus discrepancias con Vox, y es medido por la gesti¨®n del coronavirus
¡°Ni somos parte de este Gobierno ni queremos serlo, y tampoco queremos ser sus socios, ?no!¡±. La frase de Roc¨ªo Monasterio (Vox), pronunciada durante el debate para la investidura de Isabel D¨ªaz Ayuso, retumba m¨¢s fuerte si cabe un a?o despu¨¦s de la toma de posesi¨®n de la presidenta de Madrid.
El Ejecutivo de PP y Cs, que depende para todo de la extrema derecha, no ha aprobado ni una sola ley. El ¨²nico cambio legislativo que ha llevado a la Asamblea (una rebaja impositiva) fue rechazado por Vox, que se mantiene en la oposici¨®n. Y la dura negociaci¨®n que se espera para los Presupuestos de 2021 resume el pecado original de la legislatura: PP y Cs necesitan a Vox para todo, pero no hay ning¨²n acuerdo que vincule a la vez a los tres partidos. Una mezcla inestable que aboca a los socios de gobierno a desmentir un d¨ªa el adelanto electoral (favorable al PP), y al otro la moci¨®n de censura (de Cs con la izquierda), argumentando que Madrid necesita estabilidad para afrontar la pandemia del coronavirus.
¡°Como nota al primer a?o de este gobierno pondr¨ªa un suspenso: su ¨²nico objetivo es que no gobierne el partido ganador de las elecciones (PSOE)¡±, lamenta ?ngel Gabilondo, el portavoz de los socialistas. ¡°Si bien es cierto que la pandemia ha sido y es de una extraordinaria crudeza, es evidente que el Gobierno de Madrid no la ha gestionado con diligencia ni con eficacia¡±, argumenta. ¡°Y antes de la pandemia, el Gobierno de Ayuso se ha caracterizado por la inacci¨®n: ni siquiera ha logrado aprobar la Ley de Presupuestos¡±, a?ade. ¡°Transcurrido un a?o, este Gobierno est¨¢ m¨¢s preocupado en discernir recelos entre sus socios y en poner el acento en la figura de la presidenta, m¨¢s centrada en confrontar con el Gobierno de Espa?a, que en gobernar Madrid¡±.
¡°La izquierda habla de falta de leyes porque les gusta regular todo¡±, discrepa Alfonso Serrano, portavoz del PP en la Asamblea. ¡°Este Gobierno ha generado confianza y estabilidad, y eso, para el futuro, vale m¨¢s que cualquier ley¡±, sostiene. ¡°Cada Comunidad Aut¨®noma tiene sus peculiaridades, pero lo que s¨ª es com¨²n a todas es que el Partido Popular es el garante de esa unidad del centro derecha, y el puente de entendimiento¡±, a?ade sobre el funcionamiento dispar de los pactos de PP, Cs y Vox en Andalucia, Murcia y Madrid. ¡°Debemos entendernos y forjar acuerdos entre los tres¡±.
Los tres partidos de derechas afrontan septiembre obligados a abrir una etapa de entendimiento por la crisis sanitaria, econ¨®mica y social que se avecina. Es probable su alianza para reformar la Ley del Suelo, eliminando la mayor¨ªa de licencias urban¨ªsticas, en lo que se convertir¨ªa en el primer cambio legal con el sello de D¨ªaz Ayuso. Y es predecible una negociaci¨®n a cara de perro para que se pongan de acuerdo para aprobar unos Presupuestos de emergencia para 2021: la extrema derecha reclama que se reduzca el n¨²mero de consejer¨ªas (13) a cambio de sus decisivos votos.
¡°Los consejeros no gastamos ni medio minuto, ni media energ¨ªa, en hablar de una supuesta o eventual crisis de Gobierno¡±, asegur¨® Mar¨ªa Eugenia Carballedo, la titular de Presidencia, intentando alejarse de la tormenta que se avecina para un grupo de pol¨ªticos que se han visto zarandeados de crisis en crisis desde que llegaron al Ejecutivo.
Del caso Avalmadrid a la gesti¨®n de la pandemia, el Gobierno de D¨ªaz Ayuso ha tomado decisiones in¨¦ditas con la Asamblea cerrada, la alianza gubernamental dividida internamente, y los Presupuestos de 2019 prorrogados: cerrar la educaci¨®n presencial en colegios y universidades, habilitar un hospital de campa?a (Ifema) y tres morgues, traer una veintena de aviones desde China con toneladas de material sanitario¡ Todo mientras saltaban chispas con el Gobierno central, a cuenta de la gesti¨®n de las residencias regionales (casi 6.000 muertos de un total de m¨¢s de 15.000), de los fondos para financiar el esfuerzo sanitario, o de la falta de equipos de protecci¨®n para proteger a los sanitarios. El ritmo ha sido fren¨¦tico, y las pol¨¦micas, diarias: por el apartotel en el que se recluy¨® la presidenta tras dar positivo por coronavirus; por la falta de rastreadores; por los men¨²s de los ni?os de las familias con menos recursos...
¡°No ha habido un solo momento en el que transmitiese seguridad sobre lo que la Comunidad iba a hacer¡±, opina Jos¨¦ Rama Caama?o, profesor en el King¡¯s College de Londres y doctor en Ciencia Pol¨ªtica. ¡°Ha entrado en constantes contradicciones con Ignacio Aguado (Cs), que muchas veces ha intentado llevar la voz cantante¡±, a?ade. ¡°Parece que improvisa continuamente¡±.
¡°Tiene un aire a la que quiere sea su mentora, Esperanza Aguirre¡±, ampl¨ªa el polit¨®logo Pablo Sim¨®n. ¡°PP madrile?o en estado puro: muy liberal en lo econ¨®mico, conservador en lo social, puntal de lanza contra La Moncloa cuando gobierna el PSOE¡±.
Todo empieza en julio de 2019. D¨ªaz Ayuso observa con inquietud c¨®mo ni siquiera es capaz de reunir en la misma habitaci¨®n a Aguado (Cs) y Monasterio (Vox), de quienes depende su investidura como presidenta. Entonces, la candidata del PP desliza que est¨¢ a la b¨²squeda de ¡°f¨®rmulas alternativas¡± con las que unir a los tres partidos. Finalmente, PP, Cs y Vox optan por conformarse con unas palabras que reflejen su entendimiento en el pleno de investidura, y que queden recogidas en el diario de sesiones..., sin ning¨²n documento de por medio entre los tres.
Tras cosechar la primera derrota electoral del PP en Madrid desde 1987, esos son los precarios mimbres sobre los que ha sostenido su poder D¨ªaz Ayuso en estos 12 meses. Pese a que ha intentado mantener la iniciativa con decisiones ejecutivas (desbloqueo de la Operaci¨®n Chamart¨ªn, pacto regional de la vivienda, o el proyecto del Arco Verde), y proyectarse como l¨ªder nacional, aplicando la premisa de que lo que se ve y lo que se dice puede superar a lo que realmente se hace, lo vivido se resume en una frase.
¡°Un a?o lleno de dificultades¡±, dijo la propia presidenta el viernes, cuando se cumpli¨® el primer aniversario de su investidura.
Lo excepcional de la situaci¨®n se muestra en el d¨ªa a d¨ªa y por comparaci¨®n.
En el d¨ªa a d¨ªa. Vox pide la destituci¨®n de un consejero de Cs (Alberto Reyero, por la gesti¨®n de las residencias). Y Cs dinamit¨® el acuerdo del PP con Vox para aprobar un paquete de rebajas fiscales porque no estaba de acuerdo con las contrapartidas.
Por comparaci¨®n. En Murcia, donde tambi¨¦n se da la alianza de las tres formaciones, negociaron sentados en la misma mesa, y cuando avanz¨® la legislatura acabaron firmando documentos conjuntos con los logos de todos. Y en Andaluc¨ªa ya se han despejado las fricciones iniciales: tras negociar la investidura con mesas paralelas (PP-Cs y PP-Vox), tambi¨¦n hay documentos con las siglas de los tres partidos.
Eso nunca se ha visto en Madrid, donde el verano no ha sido un respiro para los pol¨ªticos. El desaf¨ªo se conjuga en presente. Y es tit¨¢nico: una pandemia nunca vista para un Gobierno en minor¨ªa.
Un acuerdo verbal
Estas son las breves frases que comprometen a PP, Cs y Vox, seg¨²n el diario de sesiones de la investidura de Isabel D¨ªaz Ayuso en la Asamblea.
-"Agradezco al se?or Aguado, y tambi¨¦n a la se?ora Monasterio, su generosidad en el apoyo a este proyecto que hoy comienza", dice D¨ªaz Ayuso.
-"Nuestro compromiso con el Partido Popular y con Ciudadanos acaba en el momento en el que comienza el de ustedes con nosotros, que es despu¨¦s de esta votaci¨®n", contesta Monasterio. "Saben que no pueden contar con nosotros para aplicar la totalidad de las 155 medidas de su programa; con lo cual, a algunas de ellas tendr¨¢n que renunciar o pactarlas con el apoyo de la Izquierda".
-Vox present¨® un documento con alguna de sus propuestas para esta Legislatura que no son incompatibles con el acuerdo de Gobierno, remata l¨¢nguidamente Aguado.
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