Misterios del f¨²tbol

Las principales avenidas de las grandes capitales de Europa ya hab¨ªan sido trazadas y urbanizadas cuando el Paseo de la Castellana era un curso de agua ocasional, cobijo de ¨¢lamos, zarzas y conejos. ¡°Ahora los grandes conductos de agua, de saneamiento, de evacuaci¨®n, van por ah¨ª¡±, se?ala el arquitecto e historiador Eduardo Prieto. ¡°Porque aquello originariamente hab¨ªa sido el arroyo Castellana, que corr¨ªa de norte a sur. Eso produce problemas en el Museo del Prado, que est¨¢ en su cota m¨¢s baja. El almac¨¦n de cuadros lo tienen bajo tierra; y sufren un problema secular de filtraciones porque por ah¨ª va el riachuelo que hab¨ªa en superficie en origen¡±.

El atraso presidi¨® la creaci¨®n de la gran arteria de Madrid del mismo modo que ahora lo marca su desarrollo futurista, vertiginoso, a escala sobrehumana. La monumentalidad de la Castellana es tal que solo puede apreciarse en su totalidad si se mira de reojo por la ventanilla de un veh¨ªculo lanzado. M¨¢s all¨¢ de la Plaza de Lima en direcci¨®n norte no admite apreciaci¨®n si el aparato no vuela. ¡°Es una avenida que se pens¨® como carril r¨¢pido¡±, explica Prieto. ¡°Los edificios est¨¢n concebidos para ser vistos desde el coche. No es una avenida grata para el peat¨®n. Est¨¢ pensada para esa visi¨®n din¨¢mica¡±.

Sobre el plan que concibieron Secundino Zuazo y Hemrann Jansen en 1929 actu¨® Franco, tan decidido a convertir la Avenida del General¨ªsimo en el eje del Estado que sobre ella articul¨® los ministerios estrat¨¦gicos: Defensa, Econom¨ªa, Seguridad Social, Industria, Turismo y Fomento. Y, a modo de Ministerio de la Felicidad, el actual estadio de Chamart¨ªn, inaugurado en 1947.

El f¨²tbol, indica, la arquitecta Nieves Mestre, no estaba contemplado en la visi¨®n original: ¡°Zuazo y Jansen proyectaron dos equipamientos monumentales gemelos: un Palacio De Congresos, en su actual ubicaci¨®n, y una sala de conciertos o Kursaal, situada aproximadamente sobre el emplazamiento del primer estadio de Chamart¨ªn¡±.

Gracias al esfuerzo conjunto del urbanista del r¨¦gimen, Pedro Bidagor, el banquero Rafael Arias-Salgado y el presidente madridista Santiago Bernab¨¦u, el ¨²nico Gran Palacio de las Artes que se levanta en el norte de la avenida exhibe exclusivamente artes balomp¨¦dicas. Ninguna capital europea gravita tanto alrededor de la pelota como Madrid. Casi tres siglos despu¨¦s de su fundaci¨®n en el extremo viejo de la avenida el Prado pierde protagonismo, menos presa de la erosi¨®n acu¨ªfera que de las nuevas tendencias, frente a la cuarta renovaci¨®n del estadio del Real Madrid, ahora a punto de revestirse de reluciente plata, custodio de la fantas¨ªa del ¨¦xito perpetuo y expresi¨®n cabal del voto de Sancho Panza: ¡°?El rey es mi gallo!¡±.