La bandera, de nuevo como ant¨ªdoto

Este viernes ha vuelto a escucharse el tono recio, circunspecto y l¨²gubre de los arcos desliz¨¢ndose sobre las cuerdas al interpretar el Adagio de Samuel Barber. Puede considerarse la triste banda sonora de la pandemia en Madrid. La entonaban a diario los altavoces de la sede de la presidencia regional en la Puerta del Sol durante el minuto de silencio en las semanas m¨¢s tr¨¢gicas del estado de alarma. Los agentes que en ese momento se encontraban en la plaza medio desierta se pon¨ªan como velas.

Ese adagio iba a ser tambi¨¦n el himno con el que la presidenta regional encabezara el izado de una gran bandera en la capital hoy. Un nuevo homenaje para las v¨ªctimas de la covid-19. Ya hubo actos con lazo negro en la Puerta de Alcal¨¢, con pebetero en Cibeles o con placa en Sol¡­ ahora la ense?a nacional en Valdebebas, en el distrito de Hortaleza. Pero a ¨²ltima hora Isabel D¨ªaz Ayuso, del PP, anuncia que no acude. Tampoco la vicealcaldesa Bego?a Villac¨ªs, de Ciudadanos. Lo vertiginoso de las agendas en un nuevo viernes de infarto, con evidentes diferencias entre los dos socios de gobierno, las apea a las dos.

Queda el alcalde como primer espada, que es recibido a su llegada por C¨¦sar Cort, rey del ladrillo y organizador del acto. Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida apenas tiene espacio para ocupar su sitio rodeado por un enjambre de reporteros. Un micro le inquiere por la ausencia de Ayuso. Otro por su afici¨®n futbol¨ªstica. Todo vale. El primer edil mantiene la calma con estoica profesionalidad, alcanza su silla y se detiene unos segundos a tratar de aclarar el cristal derecho de sus gafas, que se ha empa?ado sobre la mascarilla. A su alrededor, miembros destacados de su equipo de Gobierno, tanto de ciudadanos como del PP, y varios consejeros del Ejecutivo de Ayuso. Al fondo, fuera de la valla, alguien que no est¨¢ invitado muestra una pancarta de protesta en tela blanca: ¡°Mejor sanidad p¨²blica. Menos muertos¡±.

Al ritmo de Barber arranca el acto mientras se deposita una corona de flores junto a la placa que, con los emblemas auton¨®mico y municipal, se?ala el pie del m¨¢stil: ¡°Homenaje a Madrid en su lucha contra la covid-19. Octubre 2020¡±. El poder de convocatoria de Cort, pese a las ausencias, es importante. Algunos se llevan a casa de recuerdo mascarilla y hasta paraguas, que no hubo que usar a lo largo de la hora que dur¨® un acto.

¡°Esta bandera es la ¨²nica que compartimos todos los espa?oles¡±, se?ala Eugenia Carballedo, consejera de Presidencia, en ausencia de D¨ªaz Ayuso. ¡°El patriotismo es una virtud c¨ªvica¡±. Es el turno de Almeida, que sigue la misma senda de la unidad bajo la rojigualda. La bandera de Espa?a es ¡°el manto que nos cobija y nos protege¡± y ¡°no excluye a nadie¡±. El alcalde agradece la presencia entre los invitados de algunos de los ¡°h¨¦roes¡± de la pandemia: m¨¦dicos, farmac¨¦uticos, bomberos o profesores, elegidos para portar la bandera en su recorrido hasta ser izada al ritmo de Gabriel?s Oboe, la recurrente composici¨®n de Ennio Morricone para La Misi¨®n.

Nadie de M¨¢s Madrid, el principal grupo municipal, presencia ese ascender ceremonioso a trav¨¦s de los 25 metros de m¨¢stil de los 75 metros cuadrados de tela, cuatro veces m¨¢s peque?a que la que ondea en la plaza de Col¨®n. Han declinado la invitaci¨®n a un homenaje que ¡°privatizado" y que "m¨¢s bien parece un acto propagand¨ªstico de la promotora que aprovechan PP y Ciudadanos para su lucimiento. Estamos hablando de fallecidos, merecen respeto¡±, opinan fuentes de esta formaci¨®n. Se?alan a Cort, que es presidente de la Junta de Compensaci¨®n de Valdebebas. Por parte del PSOE est¨¢ presente su portavoz en la Asamblea, ?ngel Gabilondo, pero nadie del grupo municipal. Tampoco hay representantes de Podemos, que dicen que no estaban invitados.

La estrella medi¨¢tica, con la fracasada moci¨®n de censura todav¨ªa caliente, es el portavoz municipal de Vox y diputado nacional Javier Ortega-Smith. Aprovecha, mientras Almeida posa ante los fot¨®grafos, para lamerse las heridas delante de las c¨¢maras de televisi¨®n y asegurar que la batalla sigue. Y que pese a la ofensa del Partido Popular, no dar¨¢n mientras puedan el gusto de gobernar a la ¡°extrema izquierda¡±.

El barrio de Valdebebas es viejo conocido de las banderas de Espa?a. De hecho Cort salt¨® al ruedo medi¨¢tico cuando coloc¨® en uno de sus edificios una ense?a de 731 metros cuadrados en 2017 en pleno calent¨®n del independentismo catal¨¢n. Diez veces m¨¢s grande que la de este viernes en el que la despedida fue un sonoro ¡°?Viva Espa?a!¡±.