El responsable de las ambulancias en la Operaci¨®n Bicho: ¡°En algunas residencias no hab¨ªa ni paracetamol¡±

La quinta sesi¨®n de la comisi¨®n de investigaci¨®n de lo que pas¨® dentro de las residencias entre marzo y junio se ha saldado con una verdad ya repetida: m¨¢s 11.000 mayores murieron, muchos de ellos en condiciones inhumanas. Este viernes pas¨® por el estrado de la Asamblea de Madrid Eduardo Aragon¨¦s, el gerente de la empresa privada de ambulancias al que recurri¨® Encarnaci¨®n Burgue?o, al cargo de la supuesta asistencia m¨¦dica a las residencias. Ha denunciado estar arruinado y apartado y ha revelado que la Administraci¨®n todav¨ªa le debe 16.000 euros, es decir, que no le ha pagado nada.

Durante 12 d¨ªas, del 26 de marzo al 6 de abril, Aragon¨¦s sigui¨® las instrucciones telef¨®nicas de Burgue?o para acceder a los centros de mayores donde hac¨ªa falta asistencia sanitaria. Fue un plan ca¨®tico e insuficiente. Catorce personas para frenar el horror en 473 geri¨¢tricos. ¡°En alguno no hab¨ªa ni paracetamol¡±, record¨® este viernes el encargado de Transamed, una peque?a empresa de ambulancias que antes de la pandemia ya bordeaba la crisis. ¡°Residencias sin EPI, con bolsas de basura¡±, enumer¨®, ¡°profesionales que dorm¨ªan en el suelo, otros que nos recib¨ªan llorando, suplicando¡±, dijo. En el recuerdo, de nuevo, qued¨® una imagen dantesca de aquellos d¨ªas.

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Aragon¨¦s, de 43 a?os, es un t¨¦cnico de ambulancias que en 2017 mont¨® su propio negocio. Cuando Burgue?o se puso en contacto con ¨¦l, a principios de marzo, Aragon¨¦s pens¨® en dos cosas: por un lado podr¨ªan ayudar en el momento en que m¨¢s se necesitaban ambulancias y los medios de los que ellos dispon¨ªan y, segundo, podr¨ªa ayudarse a s¨ª mismo a salir adelante y aliviar las deudas que ya ten¨ªa. ¡°Dijo que su padre estaba ah¨ª para ayudarnos¡±, admiti¨®, en referencia a Burgue?o, la mujer que se puso al mando de lo que iba a ser la atenci¨®n sanitaria de las residencias para no colapsar los hospitales. Antonio Burgue?o hab¨ªa sido presentado a principios de marzo como el principal asesor de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso, para coordinar la lucha contra la pandemia. Antes hab¨ªa sido el impulsor de la privatizaci¨®n de los centros sanitarios con Esperanza Aguirre.

As¨ª que Aragon¨¦s se fio de aquellas credenciales. Tanto, asegura, que puso dinero de su bolsillo para comprar material sanitario que necesitaban y que la Administraci¨®n regional no adelant¨® en ning¨²n momento. Tambi¨¦n para pagar en parte a su equipo, con el que despu¨¦s ha tenido sus tiras y afloja por problemas contractuales.

Por todo aquello no recibi¨® un duro. ?l reclama a Burgue?o 16.000 euros, una estimaci¨®n ¡°muy a la baja¡± de los gastos generados. Burgue?o desapareci¨® del mapa cuando la Comunidad le dijo que parara, despu¨¦s de que este peri¨®dico revelara su papel. Aragon¨¦s se qued¨® esperando nuevas instrucciones hasta que se dio cuenta de que no solo no las iba a recibir, sino que tampoco iba a cobrar.

As¨ª que Aragon¨¦s accedi¨® a destapar la denominada ¡°Operaci¨®n Bicho¡±, el c¨®digo que Encarnaci¨®n Burgue?o usaba para denominar el plan que intentaron ejecutar sin medios adecuados y con ansias de poder desmesuradas (so?aba con dominar el mercado una vez se pusiera fin a la pandemia). Burgue?o compareci¨® ante la Asamblea hace dos semanas y cont¨® que a ella tampoco le ha pagado la Comunidad de Madrid. El alto cargo de la consejer¨ªa de Sanidad que la contrat¨®, Carlos Mur de V¨ªu, fue destituido en mayo.

Seg¨²n Burgue?o, los trabajadores de Transamed fueron a las residencias a hacer un trabajo de campo, es decir, a recabar informaci¨®n de c¨®mo se encontraban los geri¨¢tricos por dentro. Pero el contrato que envi¨® a Aragon¨¦s, firmado por Mur de V¨ªu, le encargaba la ¡°gesti¨®n integral de la crisis¡± en los geri¨¢tricos. ¡°No se manda a un equipo m¨¦dico para realizar un estudio de campo¡±, dijo ayer Aragon¨¦s. ¡°Si quieres eso, no mandas a alguien preparado para atender pacientes. Llev¨¢bamos una UVI m¨®vil, y era para hacer una primera ayuda¡±.

Hoy, varios meses despu¨¦s de aquello, Aragon¨¦s cuenta que se ha convertido en un chivo expiatorio al que la Administraci¨®n le ha dado la espalda, pues considera que no ha tenido ninguna relaci¨®n contractual con ¨¦l y por tanto no le va a pagar los 16.000 euros que le debe. ¡°Hemos recibido amenazas, insultos, ha habido y hay una persecuci¨®n solo por sacar a la luz algo que consideramos que no era legal. A m¨ª me han cesado en el Summa de un d¨ªa para otro como t¨¦cnico de emergencias (donde estaba apuntado desde 2003 para cubrir suplencias)¡±, enumera. Hundido, sin dinero y sin trabajo, admite que sobrevive gracias a su pareja. ¡°?Si volver¨ªa a hacerlo? Si me llama Encarnaci¨®n, no. Si me llama la Comunidad de Madrid para continuar, pero con medios, encantado¡±.

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