Enamorados en Malasa?a de la belleza y de la pol¨ªtica
La nueva asociaci¨®n La Imprenta pretende ofrecer al barrio un espacio para la cultura, la cooperaci¨®n y la cr¨ªtica
¡°Yo pensaba que esto iba de recomendar libros y leer poes¨ªa, pero se parece m¨¢s a un m¨¢ster en manejar el dat¨¢fono y montar estanter¨ªas¡±, bromea Miguel ?ngel V¨¢zquez, sombrero, gafas, camisa abierta y colgantes, portavoz de la asociaci¨®n cultural La Imprenta. Acaban de abrir su sede en Malasa?a (en la calle de Montele¨®n, 5) y todav¨ªa huele a nuevo, a obra, el espacio parece ansioso por albergar existencias y palabras.
El colectivo, formado por seis personas, resolvi¨® algo tan ¡°subversivo¡± como decidir qu¨¦ quer¨ªan hacer con su vida, sin dejarse llevar por inercias y corrientes, y decidieron esto: montar un centro social y cultural abierto a la ciudadan¨ªa en el que organizar recitales, exposiciones, talleres, debates, grupos de crianza, ceder espacios a quien lo necesite, tomar vino tinto, generar barrio en un momento en el que muchos centros vecinales son cerrados por el Ayuntamiento y en una zona azotada por las lacras de la gentrificaci¨®n y la turistificaci¨®n. No es f¨¢cil que la gente se asocie y participe, y menos en estos tiempos distanciados y temerosos, pero en La Imprenta pretenden abrir una brecha que ayuden a ampliar los amigos, los vecinos, los artistas. En la zona, sobre todo en la aleda?a calle de Divino Pastor, hay un buen pu?ado de librer¨ªas, pero ni esto es una librer¨ªa al uso, ni han venido a competir, sino a colaborar.
¡°Queremos bajarle el pist¨®n al ritmo de la cultura¡±, dicen los promotores del proyecto
¡°Aqu¨ª estamos enamorados de la belleza, pero tambi¨¦n muy preocupados por el futuro del planeta¡±, asegura el portavoz. Esas son sus l¨ªneas de trabajo: la cultura y el ¨¢mbito de lo pol¨ªtico y social, teniendo siempre muy en cuenta a las periferias geogr¨¢ficas y sociales, a los m¨¢s vulnerables o invisibilizados, que tendr¨¢n aqu¨ª su hueco. Prueba de todo ello fue su primera publicaci¨®n, la Gu¨ªa de preguntas para construir otro mundo posible tras el covid-19. ¡°Hay muchas voces dici¨¦ndonos c¨®mo va a ser el mundo despu¨¦s de la pandemia, cosa de la que no tenemos ninguna certeza, as¨ª que nosotros decidimos lanzar preguntas¡±, dice V¨¢zquez. Se las lanzaron a expertos punteros en diferentes ¨¢mbitos, desde las relaciones internacionales al feminismo, de los derechos humanos a la infancia, de la energ¨ªa sostenible a la salud global, las mil y una cosas que hacen del futuro parezca un lugar sombr¨ªo.
¡°Ahora se estrenan pel¨ªculas y series cada semana en las plataformas audiovisuales, se publican libros que enseguida caen en el olvido, siempre parece que nos estamos perdiendo algo, que no podemos estar en la conversaci¨®n: nosotros queremos bajarle el pist¨®n al ritmo de la cultura¡±, dice el promotor. As¨ª, apostar¨¢n por libros de segunda mano y tambi¨¦n nuevos, de editoriales muy seleccionadas. Su m¨¢ximo referente es el espacio de cultura cr¨ªtica La Vor¨¢gine, en Santander; son primos hermanos del bar po¨¦tico Aleatorio, en la calle paralela, y tambi¨¦n podr¨ªan darse un aire a la librer¨ªa Traficantes de Sue?os, en Lavapi¨¦s, aunque con una vertiente m¨¢s vecinal. Se quieren apoyar en los ¡°aliados¡± que sustenten el local, ya sea con contribuciones econ¨®micas, con trabajo voluntario o con conocimiento, es decir, impartiendo charlas, talleres, etc.
Si arriba est¨¢ la librer¨ªa y el peque?o sal¨®n de actos, con su tel¨®n carmes¨ª y su pared de pizarra pintarrajeada de colores; abajo, en el s¨®tano, se encuentra una sala para reunirse ¡°a conspirar¡±, como reza el cartel que anuncia la escalera. El local fue antes una carboner¨ªa llamada Riesgo (¡°muy apropiado para lo que ahora queremos hacer aqu¨ª¡±, dice V¨¢zquez) y un taller de encuadernaci¨®n del que conservan algunos elementos que dan cierta solera al local.
Planeaban abrir en octubre, pero la pandemia trunc¨® tambi¨¦n este plan. Ahora han considerado que ya es momento de las personas vuelvan a compartir, siempre siguiendo las m¨¢s estrictas medidas de seguridad y respetando escrupulosamente los aforos. As¨ª que su primer evento fue la presentaci¨®n de su primer poemario publicado, Derecho de admisi¨®n, del poeta Yeison F. Garc¨ªa, polit¨®logo afrocolombiano y espa?ol. Su colecci¨®n de poes¨ªa tiene algunas particularidades: un c¨®digo QR en el que ver un video que un artista realiza ad hoc para los poemas (en este caso Heidi Ram¨ªrez) y una lista de Spotify con las preferencias del poeta. Son curiosos artefactos h¨ªbridos que transitan entre los ¨¢tomos del papel y los bits de informaci¨®n.
Otro de sus proyectos editoriales futuros son unos manuales de instrucciones para entender el mundo, ¡°muy sencillos, como los manuales de los v¨ªdeos VHS de los a?os 80¡±, ejemplifica el portavoz. El primero ser¨¢ sobre un tema tan interesante e inopinado como los pa?ales de tela. ¡°Es que un beb¨¦ a lo largo de su vida puede generar¡ ?hasta una tonelada de residuos!¡±, concluye V¨¢zquez. Si uno se fija, hay much¨ªsimas cosas que cambiar en nuestra realidad. Y aqu¨ª se fijan.
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