Madrid ¡®first¡¯

¡°Un Gobierno de Espa?a sobrepasado, la Comunidad de Madrid sola frente al virus. El m¨¦rito de Enrique Ruiz Escudero es incalculable¡±. Parece el inicio del tr¨¢iler de una pel¨ªcula, pero es uno de los ¨²ltimos tuits del PP madrile?o, en campa?a permanente, como el resto de partidos. Se refer¨ªan los populares a la negociaci¨®n del consejero de Sanidad con proveedores de la vacuna rusa Sputnik, que a¨²n no ha sido autorizada por la Agencia Europea del Medicamento. ?Comunismo o libertad? Madrid first.

Afortunadamente, la Comunidad de Madrid no tiene capacidad para comprar y suministrar las dosis de una vacuna que carece del aval de la UE - la Agencia Europea del Medicamento inici¨® el pasado 4 de marzo el proceso de autorizaci¨®n- del mismo modo que Donald Trump, promotor del America first, no pod¨ªa inyectar desinfectante a los contagiados por coronavirus por mucho que un d¨ªa se le pasara por la cabeza y lo contara con desparapajo en rueda de prensa -¡°Ser¨ªa interesante probarlo¡±, dijo-. Por algo parecido ¨C negociar en secreto la compra de Sptunik- dimiti¨® el pasado 28 de marzo el primer ministro de Eslovaquia, el conservador Igor Matovic.

Isabel D¨ªaz Ayuso compar¨® las gestiones con los rusos a la compra de material sanitario, aunque evidentemente no es lo mismo adquirir mascarillas que suministrar un medicamento a miles de personas. La adquisici¨®n de vacunas se hace a trav¨¦s de la Uni¨®n Europea para evitar, entre otras cosas, el s¨¢lvese quien pueda de la b¨²squeda de material sanitario en la primera ola del coronavirus. Pese a todo, la portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, informada por la prensa de los movimientos de Escudero, opin¨® que en este asunto Pedro S¨¢nchez es como ¡°el perro del hortelano, que ni come ni deja comer¡± y a?adi¨® que el jefe del Ejecutivo har¨ªa bien en ¡°contagiarse de la audacia¡± de su hom¨®loga madrile?a -Ayuso asegura que ¡°la campa?a¡± para las eleccioenes auton¨®micas del 4 de mayo es entre ella y el presidente del Gobierno, al que ya ha retado p¨²blicamente en duelo: ¡°Nos vemos en las urnas¡±-.

En realidad, otras consejer¨ªas, como la de la Comunidad Valenciana, presidida por el PSOE, hab¨ªan pedido tambi¨¦n la agilizaci¨®n de los tr¨¢mites para usar esta vacuna, y la ministra de Sanidad, Carolina Darias, a pregunta de un diputado de Bildu, tambi¨¦n aclar¨® a principios de febrero que no se descartaba esa v¨ªa siempre que fuese autorizada por la Agencia Europea del Medicamento. Todo esto lo sabe la Comunidad de Madrid, pero esos contactos con proveedores de la vacuna rusa que no conducen a ninguna parte ¨Csalvo que adem¨¢s de negociar su compra a escondidas pretendiesen suministrarla tambi¨¦n a escondidas- permiten hacer tuits resultones, que es en lo que se concentran la mayor parte de las energias ahora en pol¨ªtica.

Es f¨¢cil, tambi¨¦n imaginar cu¨¢l hubiera sido la reacci¨®n del PP de haber sido la Generalitat de Catalu?a la que hubiese negociado la compra de vacunas sin autorizaci¨®n europea y a espaldas del Gobierno de la naci¨®n. Seguro que ninguno hubiese dicho que el m¨¦rito del consejero catal¨¢n era ¡°incalculable¡±.