El fot¨®grafo que ha convertido a las torres de Madrid en sus musas
Jos¨¦ ?ngel Izquierdo Cano recoge en un libro una d¨¦cada en im¨¢genes junto a detalles de las localizaciones y los datos t¨¦cnicos de las tomas
Se qued¨® pillado hace 10 a?os. Fue m¨¢s que un amor a primera vista. Casi una obsesi¨®n. Un no poder dormir tranquilo sabiendo que se acerca la cita m¨¢gica del amanecer en que la luz se despereza dibujando toda su belleza sobre ellas. Un no poder irse a descansar hasta no haber atrapado esos ¨²ltimos rayos crepusculares que dan por finiquitado el d¨ªa acariciando sus esbeltas figuras. Una locura sin diagn¨®stico que transcurre en forma de guardias sin garita a la espera del ansiado encuentro. Horas planificando el mejor lugar desde el que observarlas. Paseos para descubrir nuevos puntos de vista. Un vicio muy confesable y confesado. Jos¨¦ ?ngel Izquierdo Cano, fot¨®grafo tan aficionado como obsesivo, vive atrapado desde hace una d¨¦cada en un laberinto del que no puede salir: las torres del paseo de la Castellana de Madrid.
Es conocido como @jaicano en redes sociales, en cuyos perfiles las presenta fotografiadas desde decenas de localizaciones. M¨¢s de un centenar, reconoce. Y ese es precisamente uno de los tesoros sobre los que se ha acabado gestando el proyecto Tit¨¢nides. Diez a?os retratando las torres de Madrid. La obra no es solo una recopilaci¨®n de las fotos que ha ido haciendo, sino que aporta informaci¨®n adicional que se ha dado cuenta que es de gran inter¨¦s para aquellos que siguen su trabajo y trayectoria.
Eso ha hecho que el micromecenazgo que ha abierto a trav¨¦s de la plataforma Libros.com se haya disparado y, a falta de dos semanas, cuente ya con dos centenares de personas que han aportado un 15% m¨¢s de los 8.000 euros que necesitaba para editar la obra. El ¨¦xito por adelantado, reconoce el autor, va a permitir que el resultado final del libro pueda ser mejor, con una calidad de papel superior a la planeada en un principio y m¨¢s p¨¢ginas. En plena oleada de la difusi¨®n digital de contenidos, Izquierdo Cano reivindica el libro de fotos como herramienta todav¨ªa necesaria. Se puede adquirir desde 25 euros y por unos euros m¨¢s incluye un cuadernillo digital con explicaciones para planificar la toma siguiendo el movimiento de la luna o el sol o acceso privado a un mapa con un centenar de localizaciones exactas desde donde se han realizado las fotos.
Otro edificio en el horizonte
Hace ahora una d¨¦cada que captur¨® por vez primera a sus diosas particulares. Desde entonces no ha parado y ha tenido que adoptar para su particular har¨¦n una nueva criatura, la Caleido, reci¨¦n llegada al universo del skyline de Madrid. Nadie le manda pero ¨¦l no se detiene. Por la ma?ana, por la tarde, por la noche; en primavera, verano, oto?o, invierno; de cerca, de lejos; en vertical, en horizontal¡
El valor a?adido de detallar las localizaciones as¨ª como los datos t¨¦cnicos de la toma han despertado un creciente inter¨¦s por su trabajo de aquellos que ya le siguen en Instagram o Facebook. ¡°Cada vez hab¨ªa m¨¢s gente que me preguntaba por las coordenadas desde las que hab¨ªa tomado las fotos. Es verdad que hay un boom a la hora de intentar repetir fotos que gustan¡±, explica. Hay en todo caso algunas de las fotograf¨ªas que se hicieron desde lugares privados como azoteas o terrenos particulares que no puede hacer p¨²blicos. En otros casos, algunos de los sorprendentes puntos de vista no podr¨¢n ser repetidos porque el sitio en el que se coloc¨® el fot¨®grafo ya no es accesible.
Es el caso de la torre Caleido, la que se acaba de terminar de levantar junto a las cuatro anteriores. Es de menor altura pero la enorme gr¨²a de 180 metros permiti¨® a Izquierdo Cano conseguir una de las vistas m¨¢s espectaculares de la nueva fisonom¨ªa de la capital. Para lograr la imagen que buscaba de los cinco edificios al atardecer tuvo que ascender en dos ocasiones. Por seguridad no hizo p¨²blica en sus perfiles la foto hasta que la gran estructura met¨¢lica no hab¨ªa sido desmontada. Era la manera de evitar que otros quisieran imitar la foto arriesgando m¨¢s de lo necesario, pues no ser¨ªa la primera vez que alguien se cuela en las obras de la torre.
El libro ahonda en el equipo empleado, la lente, los par¨¢metros de exposici¨®n y apertura del diafragma o la hora en que se realiz¨® cada toma. Tambi¨¦n recuperar¨¢ en algunos casos la historia que hay detr¨¢s de la producci¨®n y la planificaci¨®n, las personas que aparecen o los que le ayudaron a ejecutarla. No es sin embargo, aclara, un tratado t¨¦cnico sino una obra divulgativa.
Este inform¨¢tico ha llegado a plantearse tras ser despedido de su pesto en plena pandemia el dedicarse profesionalmente a lo que sigue siendo una afici¨®n. No tard¨® en encontrar de nuevo trabajo, pero sigue dedicando un n¨²mero importante de horas a la semana a la fotograf¨ªa. Participa en la grabaci¨®n de tutoriales o podcasts junto a prescriptores que tiran de su experiencia y ¨¦xito en redes para dar a conocer los entresijos de su trabajo. Una de las f¨®rmulas de adquisici¨®n de Tit¨¢nides incluye incluso un taller personalizado individual.
En su perfil de Instagram Izquierdo Cano public¨® en marzo de 2020 la foto que ha conseguido de las torres desde una localizaci¨®n m¨¢s alejada. Coloc¨® el tr¨ªpode en La Atalaya, un punto pr¨®ximo a la localidad avulense de El Tiemblo, a m¨¢s de 66 kil¨®metros de distancia. Emple¨®, como casi siempre, un objetivo 100-400 mm con duplicador que, junto al factor de recorte de la c¨¢mara Fuji, equivale aproximadamente a un 1.200 mm. En la imagen aparece una superluna de un tama?o mayor que los propios edificios. ?l mismo reconoce que la fotograf¨ªa no tiene excesiva calidad por la enorme distancia a la que se halla, pero aclara que ¡°no hay trampa ni cart¨®n¡ y menos Photoshop¡±.
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