El nuevo protocolo de Madrid para las residencias recomienda que los menores no vayan de visita
La nueva gu¨ªa establece sobre todo recomendaciones, entre ellas, contratar ¨²nicamente a profesionales vacunados
Las residencias de mayores, junto a otros centros sociosanitarios, fueron durante la primera ola de la pandemia el punto m¨¢s negro tras el paso del virus en Madrid. Siete de cada diez muertes de mayores que viv¨ªan en esos lugares ocurrieron all¨ª, dentro de los propios centros: fallecieron 11.389 y, de ellos, 8.338 (el 73%) no fueron trasladados a un hospital, seg¨²n los datos de la propia Comunidad de Madrid. M¨¢s de un a?o despu¨¦s, esta quinta ola tambi¨¦n ha logrado colarse. Aunque lejos de tener el impacto de aquellos meses de primavera de 2020, la incidencia acumulada en la franja de los mayores de 80 est¨¢ por encima de lo que el Ministerio de Sanidad marca como riesgo muy alto, con 329 casos por cada 100.000 habitantes en los ¨²ltimos 14 d¨ªas.
El incremento de casos y de brotes en centros residenciales, ha obligado a la Consejer¨ªa de Sanidad a modificar el protocolo que ten¨ªa vigente para estos centros. ¡°Las circunstancias presentes demoran, por ahora, la toma de medidas ma?s laxas en las visitas¡±, dice el documento publicado por el Ejecutivo regional, que entra en vigor este jueves.
Seg¨²n los ¨²ltimos datos que env¨ªa la Consejer¨ªa de Sanidad, hay brotes de covid activos en 24 de las casi 500 residencias de mayores de la regi¨®n, donde viven alrededor de 35.000 personas: ¡°Afectan [los brotes] a 247 residentes y trabajadores. De ellos, 31 han sido ingresados en centros hospitalarios¡±. Aunque, matiza una portavoz de Sanidad, ¡°la inmensa mayor¨ªa de los positivos, que cuentan con la pauta completa de vacunaci¨®n, son asintom¨¢ticos o est¨¢n cursando el contagio con s¨ªntomas leves¡±.
En 13 de estos centros est¨¢n con medidas suspendidas (no se permiten visitas, salidas o ingresos). ¡°No todas las residencias con brotes tienen medidas suspendidas ya que esta decisi¨®n depende del n¨²mero de casos y de que la tipolog¨ªa de las instalaciones permita sectorizar y aislar a los positivos sin interrumpir la actividad del centro¡±, explica la misma portavoz.
En general, un brote, seg¨²n la propia definici¨®n de Salud P¨²blica de la regi¨®n, es ¡°cualquier agrupaci¨®n de tres o m¨¢s casos con infecci¨®n activa en los que se establece v¨ªnculo epidemiol¨®gico¡±. Sin embargo, ¡°debido a la vulnerabilidad de los centros sociosanitarios¡±, el nuevo protocolo establece un cambio: ¡°La detecci¨®n de un solo caso en estas instituciones, se considerar¨¢ un brote a efectos de intervenci¨®n e implicar¨¢ la puesta en marcha de las medidas de actuaci¨®n¡±.
La vacunaci¨®n ¡ªla Comunidad asegura que pr¨¢cticamente la totalidad de residentes y trabajadores est¨¢n vacunados¡ª ha hecho que el n¨²mero de muertes se reduzca al m¨ªnimo y, quienes se contagian, pasan la enfermedad sin s¨ªntomas o de forma leve. Sin embargo, los expertos insisten en recordar que la vacuna ni es esterilizante [no deja pasar la enfermedad] ni es 100% eficaz y los mayores, con sistemas inmunes debilitados, est¨¢n m¨¢s expuestos a¨²n estando inmunizados, por lo que hay que seguir extremando las precauciones. Adem¨¢s, los aislamientos o cuarentenas por ser positivo o haber sido contacto de uno, implican tiempos de soledad no recomendables para esta poblaci¨®n, sobre todo, para quienes sufren deterioro cognitivo.
Para paliar en la medida de lo posible los efectos de esta quinta ola, estas son las medidas (casi todo recomendaciones) que recoge la gu¨ªa actualizada.
Las medidas b¨¢sicas
Mascarilla. Para los residentes, se recomienda su uso siempre que vaya a haber contacto con trabajadores o visitantes.
Ventilaci¨®n. ¡°Imprescindible¡±, establece el documento. ¡°Se llevar¨¢ a cabo ventilaci¨®n natural, cruzada y permanente, favoreciendo la circulaci¨®n de aire exterior mediante la apertura de puertas y/o ventanas en lados opuestos¡±. Todos los centros, adem¨¢s, deben disponer de medidores de CO2 y realizar mediciones peri¨®dicas en los espacios con m¨¢s riesgo.
Salidas y vacaciones
Residentes. El nuevo protocolo permite las salidas de los residentes, tanto los vacunados como los no vacunados, ¡°sin limitaciones¡±, tanto fines de semana como vacaciones. Aunque, como recomendaci¨®n, para los periodos vacacionales o ausencias superiores o iguales a siete d¨ªas se recomienda aportar una PCR negativa hecha en las 72 horas antes de volver al centro o un test de ant¨ªgenos a la entrada si el centro en cuesti¨®n dispone de estas pruebas y habr¨¢ que repetirlo a las 48 horas. Mientras, ¡°no realizar¨¢n actividades grupales y portar¨¢n mascarilla hasta aportar un resultado negativo¡±.
Trabajadores. Para este grupo, las recomendaciones son las mismas que para los residentes, aunque la gu¨ªa matiza que ¡°siempre que sea posible se esperar¨¢ a la incorporaci¨®n efectiva al trabajo hasta disponer del resultado de una prueba negativa¡±. Si no hubiese resultado de PCR, el propio centro deber¨¢ hacer un test de ant¨ªgenos al trabajador y repetirlo a las 48 horas, como con los residentes, y ¡°durante ese tiempo, el trabajador se abstendr¨¢ de tener contacto estrecho con residentes no vacunados y extremar¨¢ medidas de prevenci¨®n y seguridad¡±.
Aquellos que no est¨¦n vacunados, ¡°deber¨¢n de permanecer con las mascarillas incluido el tiempo de descanso, quit¨¢ndosela s¨®lo en el instante en que sea imprescindible para una acci¨®n concreta, y no interactuando con otras personas en ese periodo, as¨ª como mantener en todo momento distancia de seguridad¡±.
Las recomendaciones
A los centros. La Comunidad aconseja ¡°contratar ¨²nicamente a trabajadores vacunados¡± y realizar cribados peri¨®dicos en el personal de los centros: ¡°Semanalmente, en el caso de trabajadores vacunados y, sobre todo, en el caso de personal no vacunado 2-3 determinaciones semanales. Esta medida especial se mantendr¨¢ mientras la incidencia a 14 d¨ªas supere los 150 casos por 100.000 habitantes¡±. Adem¨¢s, establece la obligaci¨®n de mantener un registro actualizado del estado de vacunaci¨®n tanto de la plantilla como de los usuarios.
A las familias o las personas que vayan de visita. La gu¨ªa desaconseja la visita de quienes no est¨¦n vacunados, pero si se produce, insta a que se realice al aire libre ¡°extremando¡± las medidas de precauci¨®n. En cualquier caso, con o sin inmunizar, cualquiera que acuda al centro deber¨¢ llevar mascarilla quir¨²rgica durante toda la visita y mantener la distancia de seguridad, tanto con residentes com con otras visitas y el personal del centro. Solo en caso de ¡°situaci¨®n final de vida¡± o si tanto residente como visitante est¨¢n vacunados, ¡°se puede optar por tener un contacto estrecho¡±.
Cada residente puede recibir tres visitas semanales de una hora de duraci¨®n, a las que pueden ir dos familiares ¡ªespecifica que no siempre han de ser los mismos¡ª, excepto si uno de los visitantes necesita ayuda para moverse, en ese caso, el protocolo ampl¨ªa hasta tres personas el m¨¢ximo permitido. E insiste en que, aunque pueden acudir menores, ¡°no se recomienda¡± que vayan personas no vacunadas.
Los lugares
En los centros, la estancia de familiares en zonas comunes de la residencia no habilitadas est¨¢ prohibida. Aunque, recuerda el protocolo, ¡°la visita es una prioridad para la salud de los residentes por lo que se les insta a facilitar diversas zonas comunes en los centros para facilitar las visitas y a que el tama?o de ¨¦stas guarde proporci¨®n con el n¨²mero de residentes¡±, es decir, que tienen que tener delimitado el aforo m¨¢ximo (se calcula dividiendo el n¨²mero de metros cuadrados entre cuatro, es decir, se reducen la capacidad al 25%) y se?alizado con un cartel visible.
En exteriores. El protocolo aconseja que las visitas en los exteriores de los centros sean en aquellas franjas horarias en las que disminuya el calor, por el riesgo que las altas temperaturas suponen para las personas mayores: ¡°Es de especial importancia que los centros garanticen horarios de visita a primera hora de la ma?ana y ¨²ltima hora de la tarde para permitir que ¨¦stas se realicen en el exterior¡±.
En interiores. Aunque no se recomiendan las visitas en habitaciones, pueden darse intentado pasar el menor tiempo posible y con la ventilaci¨®n adecuada. En el caso de las habitaciones dobles, tambi¨¦n pueden realizarse si el compa?ero de habitaci¨®n no est¨¢ presente y, en el caso de que por movilidad ninguno de los dos residentes que ocupa la habitaci¨®n pudiera moverse, se har¨¢ con todas las medidas de seguridad, von ventanas y puertas abiertas, mascarilla, distancia y, en ning¨²n caso, podr¨¢n coincidir los visitantes de ambos residentes. Se prohibir¨¢n en dos supuestos: cuando los residentes est¨¦n en cuarentena (por haber sido contactos estrechos de un positivo) o en aquellos centros que tengan un brote declarado.
La comunicaci¨®n
Hablar por tel¨¦fono o por videollamada con las familias es una de las cuestiones que prioriza el protocolo, posicion¨¢ndolo como un apoyo m¨¢s de la salud de los residentes. As¨ª, establece que todos aquellos usuarios que lo deseen, deber¨¢n poderse comunicar con sus familiares a diario, ¡°cuando no dispongan de medios propios, se deber¨¢n facilitar dichos medios si lo solicitan¡±.
El centro tambi¨¦n deber¨¢ garantizar el apoyo de un tercero para establecer o mantener la comunicaci¨®n, ¡°siendo preferentes aqu¨¦llas realizadas por personas que no tienen posibilidad de visita f¨ªsica o ¨¦sta no es recomendable con raz¨®n a las medidas de prevenci¨®n¡±. En todo caso, a?ade la gu¨ªa, ¡°se priorizar¨¢ la videoconferencia para todas aquellas personas cuya capacidad permita este tipo de comunicaci¨®n¡±.
En caso de brote, momento en el que se suspender¨¢n las visitas, se ¡°deber¨¢ aumentar el n¨²mero y calidad de los contactos telem¨¢ticos con allegados y familiares que habitualmente visitan a la persona, asegur¨¢ndose de disponer los medios tecnol¨®gicos necesarios para hacerlo¡±.
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