D¨ªaz Ayuso reconoce su dependencia de Vox y pide ¡°humildemente¡± que apoye su plan econ¨®mico

Pasado el confeti de la victoria del 4-M, el choque con la dura realidad: Isabel D¨ªaz Ayuso ha tenido que pedir este jueves ¡°humildemente¡± el apoyo de Vox a sus grandes proyectos econ¨®micos para la legislatura. Ha ocurrido durante la sesi¨®n de control al Gobierno celebrada en la Asamblea de Madrid. Frente a los titulares triunfales que dan por aprobadas propuestas que a¨²n no han pasado por la C¨¢mara, se ha impuesto la tozudez de la aritm¨¦tica parlamentaria: D¨ªaz Ayuso necesita al menos cuatro abstenciones de Vox para sacar adelante los Presupuestos, la rebaja del IRPF, y la eliminaci¨®n de las tasas propias de la regi¨®n. Como esos proyectos son clave para un Ejecutivo que cerr¨® la pasada legislatura sin dejar huella, la presidenta se ha arremangado para intentar desencallar la negociaci¨®n.

¡°Yo necesito seguridad, saber si vamos a sacar adelante los Presupuestos¡±, ha arrancado D¨ªaz Ayuso, que ha aprovechado que Roc¨ªo Monasterio, la l¨ªder de Vox, le ha hecho una pregunta gen¨¦rica que ha convertido en una diatriba contra la izquierda. ¡°Con cuatro abstenciones podr¨ªamos seguir adelante, pero les pido humildemente no solo la abstenci¨®n, sino el apoyo¡±, ha seguido. ¡°Lo buscar¨¦¡±, ha recalcado. ¡°Aunque no lo necesitara, creo que es de ley entendernos, lo sensato y lo que la gente ha votado en Madrid. No tengo la seguridad de que me vayan a aprobar los presupuestos, la rebaja de impuestos, la supresi¨®n de los impuestos innecesarios. Y necesitamos estabilidad¡±.

Nada ha contestado Monasterio. El PP a¨²n no ha logrado que Vox le traslade un documento que resuma sus exigencias en la negociaci¨®n. Con el 22 de diciembre como l¨ªmite para llegar a un acuerdo para las cuentas, la extrema derecha quiere apurar los plazos para as¨ª engordar la factura que se cobrar¨¢ por sus votos. Ya ha conseguido que el PP se abra a reformar las leyes LGTBI. Tambi¨¦n que eval¨²e si se puede ampliar el cheque guarder¨ªa para satisfacer su reclamaci¨®n de que las guarder¨ªas privadas sean gratuitas. Y cada d¨ªa a?ade una petici¨®n m¨¢s, sin que se cierre el trato.

?Y pactar los Presupuestos con el PSOE, como ofreci¨® Juan Lobato, el nuevo secretario general, para sortear las exigencias de la extrema derecha, que este jueves ha calificado como ¡°peaje¡±? D¨ªaz Ayuso ha respondido con un no rotundo, y la primera intervenci¨®n del portavoz socialista ha servido para recalcar la distancia entre los dos proyectos.

¡°No estamos aqu¨ª para repartir miseria, por eso no puedo pactar los Presupuestos con el PSOE¡±, ha lanzado la presidenta regional.

¡°Comienza una etapa dura, de fiscalizaci¨®n contundente. Le pido que nos ocupemos de Madrid¡±, le ha advertido Lobato, que sustituye como portavoz a Hana Jalloul y este jueves se ha estrenado como tal en la sesi¨®n de control al Gobierno.

Cancelada la posibilidad de un acuerdo PP-PSOE como el que se ha intentado negociar en Andaluc¨ªa, todo queda igual en Madrid: con el PP en manos de Vox, y Vox en manos del PP. El uno depende del otro. Y mientras se deciden a pactar, pasan los d¨ªas sin que el Ejecutivo apruebe sus reformas ni adapte sus propuestas a las consecuencias de la pandemia.

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