Necrolog¨ªa ideol¨®gica

?Act¨²a la derecha por ideolog¨ªa? A juzgar por algunos de sus miembros m¨¢s desacomplejados ¡ªEsperanza Aguirre, Ayuso, cualquiera de Vox¡ª hay que colegir que no. Cada vez que desde esos territorios se vierte una cr¨ªtica a alguna medida de la izquierda es raro que no aparezca la palabra ¡°ideol¨®gica¡± como descalificaci¨®n. Si Madrid, por poner un caso, no acreditaba el a?o pasado los datos sanitarios para comenzar la primera fase de la desescalada tras el confinamiento y el Gobierno socialcomunista se lo impidi¨®, esa decisi¨®n no pod¨ªa ser m¨¢s que ideol¨®gica, como ya nos ilustr¨® en su momento la presidenta de la Comunidad.

Cuando la izquierda propone subir impuestos a las rentas altas, aboga por primar el car¨¢cter p¨²blico de la educaci¨®n y la sanidad o defiende el aborto lo hace por una ideolog¨ªa, no hay duda. Lo extra?o es que, seg¨²n las voces m¨¢s desinhibidas de la derecha, las cosas contrarias no pueden ser tachadas de ideol¨®gicas. Hemos de suponer que bajar impuestos, favorecer a los colegios privados religiosos o propugnar restricciones al aborto obedece a algo. Pero ese algo resulta ciertamente misterioso. La ideolog¨ªa, desde luego, no. La ideolog¨ªa y el sectarismo, sostiene gente como Javier Ortega Smith, son siempre patrimonio de la izquierda. Algo parecido a lo que ocurre con el nacionalismo. Exhibir una estelada es nacionalismo. Manifestarse entre miles de banderas de Espa?a es plantar cara al nacionalismo.

Por todo lo expuesto resulta dif¨ªcil desentra?ar el motivo de la cicater¨ªa de las instituciones madrile?as para honrar la figura de Almudena Grandes y desatender las m¨¢s elementales cortes¨ªas sociales, en medio de la tristeza por el fallecimiento prematuro de una destacada ¡ªy muy querida por much¨ªsima gente¡ª vecina de la ciudad. Almudena Grandes era madrile?a hasta las entra?as, escribi¨® miles de p¨¢ginas sobre Madrid, su obra goza de un ampl¨ªsimo reconocimiento ?Por qu¨¦ entonces ni el Ayuntamiento ni la Comunidad creyeron oportuno lanzar un simple mensaje de condolencia? ?Por qu¨¦ Vox, esa formaci¨®n que lucha a brazo partido contra lo ideol¨®gico se opuso a cualquier tipo de homenaje? ?Por qu¨¦ toda la derecha municipal rehus¨® darle el t¨ªtulo de hija predilecta? ?Acaso las instituciones actuaron as¨ª porque la escritora cuya desaparici¨®n ha desgarrado tanto a tantos madrile?os era una izquierdista notoria y orgullosa? ?Ser¨¢ posible que el sectarismo haya contagiado tambi¨¦n a esa derecha?

Mientras buscamos explicaciones, queda una certeza. El mayor reproche a la actitud del Ayuntamiento y de la Comunidad no proviene de las cr¨ªticas de la izquierda o de la indignaci¨®n de amigos y lectores de la fallecida. Lo m¨¢s enojoso para Almeida y Ayuso ha sido el impecable mensaje de condolencia del l¨ªder de su partido. Pablo Casado sali¨® de inmediato a dar el p¨¦same a la familia y, desde la distancia pol¨ªtica, reconoci¨® incluso a una mujer ¡°comprometida con sus ideas¡±. Tal vez es que Casado s¨ª tiene ideolog¨ªa. Lo seguro es que tiene la m¨¢s elemental urbanidad.

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