Divorcio: hay que decirlo m¨¢s

Tengo una amiga que acaba de ¡°interrumpir¡± su matrimonio. Dicho as¨ª da la impresi¨®n de que se est¨¦n tomando un tiempo porque necesitan espacio, pero no. Se han ¡°divorciao¡± y no van a volver ni de co?a. ?Y mejor! Mejor para ambos. Me encontr¨¦ a mi amiga en la Puerta del Sol. Ella iba con un lookazo que parec¨ªa que fuera a pasar por un photocall, pero solo estaba renaciendo. La vi bella, con luz propia. Ese sentimiento de fracaso que nos embarga cuando las cosas se acaban es algo de lo que deber¨ªamos empezar a desembarazarnos. Darnos cuenta de que decir ¡°hasta aqu¨ª¡± o ¡°merezco m¨¢s¡± tiene mucho de valent¨ªa y muy poco de fracaso. Y no es un menosprecio a la otra persona.

Es que el tiempo pasa, las cosas cambian, la mierda ocurre y a veces el amor permanece entre toda esa vor¨¢gine, pero otras se marchita. Y no pasa nada. No digo que no duela, ?ojo!, duele un huevo. Digo que, si adem¨¢s nos fustigamos con culpas, nos preocupamos de los dimes y diretes y pretendemos seguir los dogmas impuestos pues duele mucho m¨¢s.

Llevaba mucho, much¨ªsimo tiempo sin ver a mi amiga. Madurar tambi¨¦n es entender que ya no hay un parque en el que te re¨²nes con tus amigos sin necesidad de acordarlo. La madurez no es un parque, porque es un jard¨ªn. ?Y menudo jard¨ªn!

La vi bien, con un halo de paz y serenidad en su palabra, como con m¨¢s comas. Nos sentamos en una terraza del barrio de las letras. Le muestro uno de los poemas grabados en el suelo. Me dice: ¡°F¨ªjese c¨®mo los pisan¡±. Est¨¢ ¡°on fire¡± prepar¨¢ndose para hablarme. Qu¨¦ bien explica las historias, es que me encanta. Comenz¨® con un ¡°pens¨¦ que no sal¨ªa¡± como un desgarro con quej¨ªo. ¡°Por poco me muero¡±, me dijo, y la cre¨ª.

Yo tambi¨¦n me he sentido morir, dos veces, pero escribo esto porque aqu¨ª sigo. No conozco a nadie que se haya muerto de amor, sin embargo, conozco a muchas personas que viven sin vivir en un ¡°amor¡± que los mata. Dicen que ahora aguantamos poco, ser¨¢ porque aguantar es un verbo que siempre deber¨ªa declinarse.

Me cuenta que se divorcian porque ¡°nos queremos mucho¡± y la entiendo. Es el punto ¨®ptimo, adem¨¢s, ese en el que todav¨ªa os repart¨ªs los recuerdos decidiendo bonito. Uno desea estar con alguien a quien quiere, pero querer no es amar, por eso duele alejarse, porque todav¨ªa podr¨ªas estar y hay quien lo hace. Yo no. Y mi amiga tampoco. Est¨¢ sexy riendo con su gin-tonic mientras me dice divertida que es un ¡°cese temporal de la convivencia¡±. ¡°Te has divorciao, t¨ªa, te has divorciao¡± ?Brindamos? ?Enhorabuena!

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