Un ganadero mand¨® 49 correos a Ayuso para exigirle que cumpliera la ley y no obtuvo respuesta

Eugenio de la Morena es el ganadero que le ha escrito 49 correos a Isabel D¨ªaz Ayuso. Uno cada d¨ªa desde hace m¨¢s de dos meses, quitando los fines de semana, que es cuando la deja descansar. Pero no ha recibido ni una respuesta. ¡°Mira, es la segunda persona a la que m¨¢s he escrito en mi vida¡±, ense?a en su m¨®vil. La primera no es una persona, es la Direcci¨®n General de Ganader¨ªa de la Comunidad de Madrid, que tampoco ha contestado. Y est¨¢ desesperado. Cabreado y en n¨²meros rojos. Y para explicarlo lanza una idea sencilla: el sector primario se muere. Lo hace y se pone como ejemplo. A ¨¦l le cuesta m¨¢s producir la leche de sus vacas que lo que le paga el distribuidor, el segundo eslab¨®n de la cadena, el que recoge el producto para tratarlo y venderlo a los supermercados. Y lo mejor para entender su problema, y el de todo el sector, nada como los n¨²meros, as¨ª que los lanza de carrerilla: ¡°Me cuesta producir 48,65 euros la tonelada. Y me pagan 41. ?Le hago las cuentas? 10.500 euros pierdo todos los meses desde hace dos a?os¡±. Y eso es lo que denuncia. Que en Madrid no se cumple la ley estatal de la cadena alimentaria, que estipula precisamente eso, que no se puede pagar al productor menos de lo que le cuesta producir. Por eso ha escrito hasta la misma presidenta de regi¨®n. 49 veces. Ahora prepara el correo n¨²mero 50.

El ganadero, de 49 a?os, se mueve por sus tierras cojeando, porque le operaron de las dos rodillas, pero no para quieto ni un segundo. Acaba de despedir a un chico con el que llevaba trabajando 12 a?os. Era como de la familia. Hasta ha ido a las comuniones de sus hijos. Pero Eugenio lleva meses sin cobrar y cada vez le cuesta m¨¢s pagar las n¨®minas de sus trabajadores. ¡°Lo ha entendido, claro, me dec¨ªa: ¡®Jefe, no podemos pelear contra el sistema¡±, cuenta. As¨ª que para salirse del sistema le ha llevado ¨¦l mismo en coche a las oficinas del paro y le ha ayudado a arreglar sus papeles. Y ahora hace cuentas para apretar horarios, ya que en un a?o esta granja familiar en Colmenar Viejo ha visto mermada la plantilla a la mitad: ya solo quedan otros dos trabajadores, su hermano Diego, con el que comparte la responsabilidad de la granja, y ¨¦l. ¡°Y un chico que hace de correturnos. Nada m¨¢s¡±.

No es de extra?ar que no sepa lo que es irse de vacaciones o disfrutar de un fin de semana con su mujer. Trabaja, trabaja y trabaja. Sin festivos. Sin Navidades. Sin verano. ¡°Yo soy el que trabaja para que la gente desayune su cafetito con leche por las ma?anas¡±, recuerda. Tiene a su cargo 480 cabezas de vacuno que campan por un paisaje id¨ªlico entre las monta?as de Colmenar Viejo, un terreno donde caben ¡°208 Bernab¨¦us¡±, que hered¨® de su padre; este lo hizo de su abuelo; aquel de su bisabuelo; el otro de su tatarabuelo... ¡°Tengo datos de esta granja de 1816, aqu¨ª estaban mis antepasados. Tengo papeles antiqu¨ªsimos. Tengo datos de venta de leche que ven¨ªan en c¨¢ntaras, en reales. Pero date cuenta, lo que no han conseguido dos guerras mundiales y una guerra civil¡­ que lo consiga un Estado de derecho¡­ me parece triste¡±. Habla con amargura mientras se?ala a sus vacas y lamenta haber mandado al matadero a 60 de ellas en el ¨²ltimo a?o, animales a los que ha visto nacer y a los que no ten¨ªa con qu¨¦ darles de comer, el doble de lo que sol¨ªa mandar antes, ¡°cuando se les acababa el ciclo vital¡±.

Pero el problema de esta granja no es una excepci¨®n. Hace una d¨¦cada, m¨¢s de 100 ganaderos se dedicaban al mercado l¨¢cteo en la regi¨®n madrile?a. Ahora sobreviven 28, seg¨²n datos que aport¨® el diputado del PP ?ngel Ramos S¨¢nchez en una comisi¨®n de Medio Ambiente el pasado 19 abril. Unos datos que van por delante de los oficiales, que todav¨ªa las cifran en 33, porque no se han actualizado las cinco granjas que han bajado la persiana en los ¨²ltimos meses, han vendido el ganado y han claudicado ante un sistema contra el que Eugenio pelea a base de correos, de reclamaciones y de cantarle las cuarenta a todo el que se le ponga delante.

Eso fue lo que pas¨® en aquella comisi¨®n, la del 19 de abril. Estaba invitado Adolfo Galv¨¢n, el presidente de la asociaci¨®n de ganaderos productores de leche (Agaprol) y apareci¨® acompa?ado de Eugenio, vicepresidente, que tom¨® la palabra e hizo un discurso acalorado, personal e inapelable.

El ¨²nico presente que le llev¨® la contraria en algo fue el propio S¨¢nchez, que asegur¨® que el Gobierno de Ayuso ¡°igual podr¨ªa hacer m¨¢s¡± pero defend¨ªa y le preocupaba el campo. ¡°Mentira¡±, le contest¨® Eugenio. ¡°El movimiento se demuestra movi¨¦ndose. Y no me duele en prenda decirlo: soy de derechas, a todas luces. Pero lo mismo me siento con un se?or de Unidas Podemos, como con uno de M¨¢s Madrid, como con un socialista. Siempre y cuando reivindiquen lo que creo que es justo: hacer cumplir la ley¡±.

Durante la intervenci¨®n, parec¨ªa que hab¨ªa chinches en el asiento del director general de Ganader¨ªa, ?ngel de Oteo Mancebo, que se coloc¨® justo detr¨¢s del diputado del PP, y que intentaba defenderse de los datos que aportaba el ganadero con aspavientos, resoplando, movi¨¦ndose en el asiento, pas¨¢ndole papeles a su compa?ero.

Pero Eugenio hab¨ªa llegado con el discurso bien elaborado. Y no se amilan¨®:

¡°Que ustedes est¨¢n jugando con un proyecto de vida (...) que salgan llen¨¢ndose la boca, la fotito, pero ?qu¨¦ verg¨¹enza es esa? No es ni verg¨¹enza torera. Yo no apoyo las subvenciones. El sector ganadero no quiere subvenciones, a ver si les queda claro a los pol¨ªticos. Queremos que se nos pague por nuestro producto¡±.

Los ganaderos firman un contrato anual con el distribuidor en abril de cada a?o. En ese momento fijan el precio de lo que van a recibir por cada tonelada de leche. ?l, a rega?adientes, acepta perder 10.500 euros al mes, ¡°porque si no firmo nada me quedo con la leche y es mucho peor¡±. ¡°Y te digo una cosa, nos quedaremos sin leche, pero luego vendr¨¢ de fuera y os quejar¨¦is de lo cara que es¡±, avisa.

La reforma de la cadena alimentaria aprobada por el Congreso de los Diputados entr¨® en vigor el 16 de diciembre de 2021 y busca equilibrar las relaciones comerciales, mediante la transposici¨®n de la directiva comunitaria de pr¨¢cticas comerciales desleales. El Parlamento espa?ol aprob¨®, con los votos en contra de PP y Vox, la obligaci¨®n de que los precios que se establezcan en los contratos respeten los costes de producci¨®n de los productores primarios y que, adem¨¢s, en cada una de las sucesivas transacciones se respeten los costes de producci¨®n de cada uno de los eslabones anteriores.

Eso defiende Eugenio de la Morena con u?as y dientes. Pero la Consejer¨ªa de Medio Ambiente de Madrid replica que esa norma ¡°tiene muy dif¨ªcil encaje en el marco de la econom¨ªa de mercado, basada en la oferta y la demanda, donde no cabe la intervenci¨®n de precios¡±. Aunque, eso s¨ª, admite que ¡°a las comunidades aut¨®nomas les corresponde efectuar los controles, donde se verifique que los contratos y las declaraciones son conformes a derecho y, por lo tanto, cumplen los requisitos que marca la ley. Pero en ning¨²n caso las autonom¨ªas tienen atribuidas labores fiscalizadoras¡±.

?Qu¨¦ pasa entonces cuando detectan que a un productor le pagan menos de lo que toca? ?Hay multas? ?Algo? No ha habido respuesta por parte de la Consejer¨ªa.

Eugenio, sin embargo, lo resume r¨¢pido: ¡°No hacen nada. Cero. Y no me importa decirlo, es un delito, este Gobierno est¨¢ prevaricando¡±. El ganadero ha perdido 38 kilos, no duerme, la ansiedad le come, de d¨ªa y de noche. As¨ª que prepara el pr¨®ximo correo para Ayuso, a la que reconoce, vot¨® en las pasadas elecciones. ¡°?Que si repetir¨¦ el a?o que viene? No. Ni de co?a¡±. Eso s¨ª, sigue siendo de derechas. Es lo que hay. Pero no le doler¨¢ en prenda apoyar a quien cumpla la ley. Sea quien sea.

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