Las 10 calles m¨¢s sucias de Madrid acumulan casi siete quejas diarias: ¡°Esto es un estercolero¡±
Las protestas ciudadanas por limpieza representan el 20% de las reclamaciones, seg¨²n el portal municipal. Es la principal preocupaci¨®n de los vecinos a mucha distancia del resto
¡°Gracias por mantener este espacio limpio¡±, se lee en un cartel pegado en uno de los quioscos de flores de la c¨¦ntrica plaza de Tirso de Molina, en el distrito de Embajadores. La ubicaci¨®n del mensaje tiene algo de ir¨®nico porque se ubica en el espacio que m¨¢s quejas ciudadanas recoge en Madrid por la suciedad: 203 en lo que va de a?o, como recoge el portal de transparencia municipal, donde destacan las 10 calles m¨¢s sucias de la capital a juicio de los ciudadanos, que acumulan 1.523 reclamaciones, a una media de casi siete al d¨ªa. Al lado de los contenedores de reciclaje ubicados en una esquina hay cajas de cart¨®n que no caben. Junto a los ¨¢rboles, un par de palomas picotean entre restos de botellas, cajas de pizza y latas de cerveza. Los mismos desperdicios que se acumulan al lado de las patas de los bancos y sillas que rodean el parque infantil. A apenas 500 metros en l¨ªnea recta se halla la Puerta del Sol, pateada cada d¨ªa por cientos de turistas a los que se trata de mostrar la mejor cara de la ciudad.
El segundo lugar en esta lista de la suciedad lo ocupa una de las ramificaciones de esta plaza, la calle de Magdalena (distrito Embajadores). 312 metros de v¨ªa p¨²blica en los que se concentran 192 reclamaciones ciudadanas. ¡°No me extra?a nada que est¨¦ tan alta en la tabla¡±, comenta Valle Quintana, trabajadora de una librer¨ªa y vecina de esta v¨ªa. ¡°Aqu¨ª los que limpian la acera son los vecinos y comerciantes¡±, asegura. Mientras se?ala a trav¨¦s de su escaparate, a?ade: ¡°Mohammed barre y friega la parte de delante de su tienda y el rinc¨®n de all¨ª en el que est¨¢ la mezquita, all¨ª est¨¢ un supermercado que tambi¨¦n limpia lo suyo...¡±. La empleada sale a la puerta para indicar tres contenedores ¡°sistem¨¢ticamente llenos¡± y un after en el que se concentran decenas de personas cada fin de semana. ¡°Usan la calle para hacer sus necesidades, se les cae la bebida...¡±, se lamenta.
Hay cuentas en las redes sociales gestionadas por los residentes en la zona dedicadas a denunciar diariamente las condiciones de Tirso de Molina y sus alrededores. En algunas de las ¨²ltimas publicaciones los ratones y las cucarachas son los protagonistas. En este caso, las malas condiciones no se dan solo en los barrios m¨¢s vulnerables. Se trata de una zona que se encuentra en la ruta de los que visitan Madrid, con cines y teatros y en la que el alquiler puede superar los mil euros al mes por un piso de 50 metros cuadrados.
Mi¨¦rcoles noche en Tirso: Hay basura, hay ruido, hay botell¨®n y siguen abiertas las tiendas asi¨¢ticas vendiendo alcohol; pero lo m¨¢s llamativo cuando llegas son las CUCARACHAS Y RATAS campando a sus anchas. Cada vez son m¨¢s y m¨¢s. Llevamos meses denunci¨¢ndolo.#Madridciudadsinley pic.twitter.com/8iXdgMtLq4
— PlazaTirsoDeMolina (@TirsoPlaza) August 3, 2022
Las quejas vecinales por falta de limpieza en Madrid representan el 20% de las reclamaciones que realizan sus ciudadanos, seg¨²n el portal municipal. Es la principal preocupaci¨®n de los vecinos a mucha distancia de las dem¨¢s. En la Encuesta de calidad de vida y satisfacci¨®n con los servicios p¨²blicos de la ciudad de Madrid 2021, la limpieza aparece como el segundo problema que m¨¢s preocupa a la ciudadan¨ªa. Un 12,7% mencion¨® este aspecto como el principal problema de la ciudad, mientras que un 29% lo situ¨® entre los tres principales, solo por detr¨¢s del tr¨¢fico y los atascos. Parte del dato se puede atribuir a que la acumulaci¨®n de basura y la suciedad es m¨¢s visible y molesto que otros problemas, pero esta lleva siendo la principal preocupaci¨®n de los madrile?os durante muchos a?os.
El tercer lugar del ranking con m¨¢s avisos de los vecinos es el paseo de la Florida (Casa de Campo), que discurre paralelo al r¨ªo Manzanares desde la estaci¨®n de Pr¨ªncipe P¨ªo. Acumula 181 avisos en lo que va de a?o. A media tarde de este lunes, dos hombres ataviados con uniforme militar y mochilas del la armada americana salen por la boca del metro. Esquivan unas bicis mal aparcadas y uno de ellos pisa una de las latas de cerveza que hay en el suelo terminando por salpicar al compa?ero. ¡°Shit!¡± (?Mierda!), exclama. Miran a su alrededor y se percatan de la basura que los rodea.
Decenas de palomas se amontonan en las sombras de las cristaleras junto a los fumadores que salen del subterr¨¢neo. Las colillas llenan la acera junto a toda clase de envases e incluso comida en mal estado. Hay varias papeleras en un ¨¢rea de 20 metros a la redonda, pero est¨¢n todas a rebosar. Ra¨²l Rocholl y Mohamed Eloutmani trabajan de lunes a viernes en la remodelaci¨®n del Santiago Bernab¨¦u. Cada d¨ªa a media tarde se sientan en un bordillo junto a la boca de metro para hacer tiempo hasta coger el bus de vuelta a Toledo, donde viven. ¡°Esto es un estercolero. Los servicios de de limpieza brillan por su ausencia. Llevo pasando desde 2005 por aqu¨ª y no he visto nunca a nadie limpiando¡±, asegura. ¡°?Ves esa papelera? Ma?ana seguir¨¢ igual o peor. Est¨¢ m¨¢s limpia la obra del Bernab¨¦u que esto¡±, sentencia.
Madrid no acaba de dar con la soluci¨®n al problema de la suciedad urbana, y el alcalde, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida, se limita a insistir que la ciudad est¨¢ m¨¢s limpia de lo que estaba con Manuela Carmena, cuya legislatura se extendi¨® entre 2015 y 2019 despu¨¦s de 24 a?os de Gobierno popular. En 2013, la entonces regidora Ana Botella unific¨® la concesi¨®n de la limpieza en un ¨²nico contrato integral, que no exig¨ªa plantilla m¨ªnima, lo que hizo que el n¨²mero de barrenderos se redujera un 38%. Adem¨¢s clasificaba como calles principales con especial prioridad solo 500 kil¨®metros de los 3.900 que tiene la capital.
En noviembre, Almeida dej¨® atr¨¢s ese contrato y anunci¨® que invertir¨ªa 1.636 millones de euros en limpieza ¨Del 32% del presupuesto anual¨D y 435 millones para otro de zonas verdes. Con este nuevo pliego, la plantilla aumentar¨¢ en 2.000 trabajadores, pero seguir¨¢ lejos de los niveles a los que estaba en 2013. ¡°?Madrid est¨¢ m¨¢s limpia? S¨ª ?Madrid est¨¢ en mejores condiciones? S¨ª. Pero eso no quiere decir que caigamos en la autocomplacencia¡±, afirm¨® Almeida en julio cuando present¨® 60 nuevas bicimotos el¨¦ctricas y 800 carritos para el servicio de limpieza.
En la calle Gutierre de Cetina (Pueblo Nuevo), los coches dan vueltas y vueltas en busca de un aparcamiento libre. A la altura de dos supermercados ubicados a mitad de la calle, los veh¨ªculos se detienen esperanzados al ver un hueco misteriosamente libre. Ninguno estaciona. El suelo est¨¢ lleno de restos de obra, cristales, cartones y melocotones podridos. ¡°No lo comprendo. He visto c¨®mo muchas veces los camiones de la basura pasan de largo o recogen nada m¨¢s que la mitad¡± explica C¨¦sar Rodr¨ªguez (63 a?os), vecino del barrio. ¡°El caso es que la calle est¨¢ bien acondicionada con sus cubos y contenedores. Digo yo que si se acumula la mierda ser¨¢ por dejadez¡±, cuestiona. Esta es la cuarta calle que m¨¢s avisos registra. La lista de las 10 con m¨¢s quejas la completan Camarena (Aluche), Lavapi¨¦s (Embajadores), Cristo de la Victoria (Pradolongo), Marqu¨¦s de la Corbera y San Emilio (ambas en Las Ventas) y Delicias, en el distrito del mismo nombre.
La propia Carmena trat¨® de involucrar a los ciudadanos en esta cruzada contra la suciedad, se?alando que si hab¨ªa residuos en el suelo o cerca de los contenedores era porque los vecinos y comerciantes los hab¨ªan dejado ah¨ª. En numerosas ocasiones fue retratada recogiendo colillas del suelo e incluso impuls¨® un ¡°concurso infantil¡± para retirar basura de la v¨ªa p¨²blica. Una pedagog¨ªa parecida que usa el sistema de recogida de basuras de Nueva York, que ha conseguido despertar un inusitado inter¨¦s con los v¨ªdeos que cuelga en los que promociona buenas pr¨¢cticas ciudadanas.
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