De Iglesias a Ayuso, Podemos se agarra a las pol¨ªticas del Gobierno central para resistir en Madrid

¨DHemos fracasado.

Pablo Iglesias pronuncia esas palabras el 4 de mayo de 2021. Isabel D¨ªaz Ayuso acaba de arrasar en las elecciones auton¨®micas de Madrid: el PP suma m¨¢s esca?os que toda la izquierda junta. Tras dejar la vicepresidencia del Gobierno de Espa?a para ser el candidato de Podemos, Iglesias abandona la pol¨ªtica. Ha salvado un proyecto al que las encuestas situaban sin representaci¨®n en la Asamblea, pero su tir¨®n solo ha alcanzado para sumar un 7% de los votos y 10 diputados. Casi dos a?os despu¨¦s, el partido afronta las elecciones de mayo sumido en la misma incertidumbre de entonces.

¡°El tema est¨¢ complicado¡±, reconoce una fuente conocedora de las interioridades de la organizaci¨®n sobre las encuestas privadas que sit¨²an a Podemos en el entorno del 5% de los votos (requisito m¨ªnimo para tener representaci¨®n en la Asamblea), y que contrastan con el CIS, que dispara al partido hasta los 13 representantes y alimenta la posibilidad de un gobierno de izquierdas. ¡°Ya el resultado de 2021 no fue bueno, porque con un candidato que deja la vicepresidencia del gobierno de Espa?a para serlo no se puede celebrar un 7% de voto. Y ah¨ª est¨¢ su propia salida para reflejarlo¡±, sigue este interlocutor. ¡°Hay que aprovechar lo que queda de legislatura, y el altavoz de la Asamblea, para visibilizar propuestas¡±, a?ade, pues la organizaci¨®n est¨¢ centrada en promocionar a una candidata a¨²n poco conocida para el gran p¨²blico, la diputada Alejandra Jacinto. ¡°Para las pr¨®ximas elecciones, la apuesta era el frente amplio, una sola candidatura [a la izquierda del PSOE], pero M¨¢s Madrid est¨¢ en otra onda¡±.

El reproche al partido de M¨®nica Garc¨ªa no es un asunto menor. La izquierda vuelve a acudir a las urnas separada en tres marcas (PSOE, M¨¢s Madrid y Podemos-IU). En 2021 y 2019, las tres lograron representaci¨®n. En 2015, no. Entonces, IU no alcanz¨® el 5% de los votos que marca la entrada en la C¨¢mara, y los 132.000 apoyos que obtuvo facilitaron que Cristina Cifuentes llegara al poder a trav¨¦s de un pacto del PP con Cs. Ese recuerdo mantiene en tensi¨®n a los partidos implicados, que saben que ahora compiten por cada voto.

Sirva de ejemplo lo ocurrido este domingo. Juan Lobato, l¨ªder del PSOE, public¨® ese d¨ªa un tuit en el que criticaba a D¨ªaz Ayuso por afirmar que las grandes fortunas de la regi¨®n abandonar¨ªan Madrid si se sub¨ªan los impuestos ¨D¡°Ya est¨¢ bien de que criminalice a las grandes fortunas¡±, escribi¨®¨D. El mensaje serv¨ªa de introducci¨®n a una entrevista en la que el secretario general del PSM defend¨ªa una reforma fiscal aparentemente contraria a la que propone su partido, y de la que se desmarc¨® la direcci¨®n nacional socialista el lunes: ¡°Nadie que herede o tenga patrimonio productivo va a pagar ni un euro¡±, dec¨ªa Lobato. Podemos y M¨¢s Madrid se lanzaron a atacarle. El mensaje acab¨® siendo borrado por Lobato, y rectificado con uno nuevo (¡±Cre¨ªmos que no se entend¨ªa bien lo que quer¨ªamos plantear y decidimos poner otro m¨¢s claro¡±, explican en su equipo).

El encontronazo digital, del que participaron Jacinto y Pablo Echenique, de Podemos, as¨ª como Garc¨ªa, de M¨¢s Madrid, refleja que ya ha comenzado la pelea por la movilizaci¨®n, que es tambi¨¦n la lucha por la supervivencia y la relevancia pol¨ªtica. En ese contexto, y a la espera de saber el papel que jugar¨¢n la vicepresidenta nacional, Yolanda D¨ªaz, y su plataforma (Sumar), Podemos buscar¨¢ resistir en Madrid siendo el altavoz de las pol¨ªticas sociales del gobierno central, que forma junto al PSOE.

¡°Las encuestas son encuestas, pero cualquiera que sepa, m¨ªnimamente, leerlas, puede observar que cualquier muestra significativa pone muy claro que, solo con intenci¨®n directa de voto (esto es, suponiendo que ning¨²n votante que no hubiera decidido su voto nos votara) ya existe un margen superior al punto porcentual de entrada (esto es, en la peor hip¨®tesis)¡±, defiende Jacinto, que previsiblemente contar¨¢ como n¨²mero dos con Carolina Cordero (IU). ¡°Preguntarse, a la vista de las encuestas, si la coalici¨®n de Podemos e Izquierda Unida va a entrar en la Asamblea parece, desde un punto de vista cuantitativo, un relato interesado¡±, a?ade. ¡°Pero es que adem¨¢s, desde un punto de vista cualitativo, ser¨ªa un perjuicio directo para la ciudadan¨ªa, teniendo en cuenta que las grandes transformaciones sociales las est¨¢ impulsando Unidas Podemos en el Gobierno de coalici¨®n, que es precisamente lo que necesitamos para rescatar Madrid del Partido Popular¡±, argumenta en referencia al aumento del salario m¨ªnimo, la aprobaci¨®n de la ley trans o la reforma laboral.

La formaci¨®n conservadora lleva gobernando la regi¨®n ininterrumpidamente desde 1995. Los pr¨®ximos comicios, sin embargo, son todo un examen para la organizaci¨®n. D¨ªaz Ayuso, que debuta en las urnas como presidenta del PP regional, busca una dif¨ªcil mayor¨ªa absoluta el 28-M. Sus objetivos de campa?a est¨¢n claros, seg¨²n detalla uno de sus asesores: mantener a los fieles del PP, reunir a los desencantados de Cs, sumar a los electores de Vox que no hayan entendido que este partido votara contra los Presupuestos regionales de 2023, y seducir a votantes del PSOE en desacuerdo con las pol¨ªticas del presidente del gobierno, Pedro S¨¢nchez.

?Y Podemos? ?Puede ser un factor decisivo en funci¨®n de la representaci¨®n que logre (o no) en la Asamblea? ¡°Las circunstancias eran muy similares en 2021, y que Iglesias se presentara polariz¨® la campa?a, y les benefici¨®, porque con ello pudieron ganar votos y pasar de 7 a 10 diputados¡±, dice una fuente conocedora de la estrategia de los conservadores sobre la dicotom¨ªa Ayuso-Iglesias que se plante¨® entonces de cara a las urnas. ¡°A Podemos en el 2021 le salva Pablo Iglesias¡±, subraya. ¡°Ahora, el car¨¢cter de la campa?a, que la confrontaci¨®n sea PP-PSOE, o que los medios apuesten por M¨¢s Madrid, puede influir en que Podemos no llegue, o s¨ª, al 5%¡±. En el partido est¨¢n convencidos de que superar¨¢n la barrera de entrada en la Asamblea sin ning¨²n problema. No hay debate. Pero quedan poco m¨¢s de cinco meses para las elecciones, y la tensi¨®n aumenta.

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