Prisi¨®n provisional y sin fianza para el presunto asesino que mat¨® a su novio clav¨¢ndole tres destornilladores

El juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 50 de Madrid ha ordenado este mi¨¦rcoles la prisi¨®n provisional comunicada y sin fianza para Gustavo O., el hombre que hace tres d¨ªas apu?al¨®, presuntamente, hasta la muerte a su compa?ero sentimental, Pedro E., en Puente de Vallecas. El detenido no se encontraba en disposici¨®n de declarar y est¨¢ ingresado en la planta de psiquiatr¨ªa de un hospital madrile?o. Seg¨²n indica el juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 37, que fue el primero en hacerse cargo del asunto, se investiga al autor de los hechos como responsable de un delito de homicidio doloso, sin perjuicio de ulterior calificaci¨®n.

Pedro E., de 54 a?os fue descubierto el pasado 2 de abril con tres destornilladores clavados en distintas partes del cuerpo. Seg¨²n las primeras informaciones, ambos se encontraban realizando un ritual esot¨¦rico, de espiritismo, cuando el fallecido recibi¨® los tres pinchazos mortales: dos en el abdomen y uno en un ojo.

Sobre las siete de la ma?ana del pasado domingo, varios vecinos se despertaron sobresaltados por el ruido proveniente del segundo piso. Cuando la polic¨ªa acudi¨® al bloque, fue el presunto autor de los hechos quien abri¨® la puerta despu¨¦s de varios minutos de negociaci¨®n. Gustavo O. preguntaba a los agentes que c¨®mo pod¨ªa estar seguro de que de verdad eran polic¨ªas y se enfadaba cada vez que la luz autom¨¢tica del rellano se apagaba. Cuando se decidi¨® a abrir, recibi¨® a los agentes desnudo y con dos palos en forma de cruz en la mano.

Pedro y Gustavo eran pareja desde hac¨ªa varios a?os. La v¨ªctima era espa?ola y el detenido es un argentino de 34 a?os. Era habitual ver a la v¨ªctima con el albornoz puesto en el rellano que comparten con varios vecinos para tender la ropa. Al final de la ma?ana, los servicios funerarios sacaron del bloque el cuerpo del difunto, ante la mirada de varios viandantes.

Gustavo ofreci¨® un relato inconexo y atropellado sobre lo sucedido y sobre su vida con su pareja. Les dijo que Pedro estaba ¡°maldito¡±, que ten¨ªa ¡°el demonio dentro¡± y que sab¨ªa que, desde hac¨ªa mucho, estaba tratando de envenenarle con la comida. Adem¨¢s, les explic¨® que su novio traficaba con droga y que, a pesar de las promesas, continuaba haci¨¦ndolo. Varios residentes confirman que el trasiego a altas horas de la madrugada era habitual en esa casa. Tambi¨¦n le cont¨® a los agentes que hab¨ªa consumido anfetaminas cuando estaban manteniendo relaciones sexuales, que ¨¦l no quiso seguir y que la v¨ªctima hab¨ªa intentado clavarle las jeringuillas con anabolizantes. Aunque hay que esperar a la autopsia y a los an¨¢lisis del detenido para determinar qu¨¦ papel ha jugado el consumo de drogas en lo sucedido.

Adem¨¢s de la imagen religiosa de las cruces, los agentes encontraron otros elementos espirituales en la vivienda: biblias, libros esot¨¦ricos y otras im¨¢genes. En el sal¨®n hab¨ªa tambi¨¦n un mont¨®n de sal esparcida por todos los rincones.

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