Las urgencias del hospital del Sureste de Madrid se quedan con la mitad de m¨¦dicos: ¡°Ya no podemos m¨¢s¡±
Los sindicatos Amyts y CC OO denuncian que solo quedan 12 profesionales en este servicio cuando deber¨ªan ser 25. La direcci¨®n del centro p¨²blico reparte octavillas en las que anima a los pacientes a acudir a los ambulatorios m¨¢s cercanos
Las urgencias del Hospital Universitario del Sureste de Madrid, en Arganda del Rey, penden de un hilo. En los ¨²ltimos cinco meses, 13 m¨¦dicos han abandonado el servicio y ya solo quedan 12 ¨Dlos sanitarios indican que deber¨ªan ser 25¨D, para atender a unos 200.000 habitantes de distintos municipios madrile?os, seg¨²n han denunciado este mi¨¦rcoles los profesionales del centro p¨²blico a trav¨¦s de los sindicatos Amyts y Comisiones Obreras (CC OO). Los facultativos ¨Dalgunos con m¨¢s de 10 a?os de antig¨¹edad¨D han huido de forma masiva, dicen, por la ¡°insoportable¡± y continua carga de trabajo que soportan que, en la mayor¨ªa de casos, ha derivado en cuadros de estr¨¦s y en la imposibilidad de arrastrar por m¨¢s tiempo el cansancio f¨ªsico y psicol¨®gico.
¡°No hemos tenido en a?os refuerzos de invierno ni de verano, de modo que tenemos que asumir nosotros mismos la sobrecarga, aumentando el n¨²mero de horas en estos periodos¡±, critican los profesionales en un comunicado publicado por Amyts. Una portavoz sanitaria de CC OO explica que la sobrecarga asistencial ¡°viene de lejos¡±, pero que el ¡°colapso total¡± empez¨® en mayo. Entre ese mes y agosto, siete m¨¦dicos abandonaron las urgencias y, en septiembre, los han seguido otros seis. ¡°Con 25 [sanitarios] pod¨ªan hacer turnos, que les aliviaba la carga, pero, al irse m¨¢s de la mitad, ya es imposible. Es una espiral de estr¨¦s y los pocos que quedan no van a poder soportarlo¡±, augura.
Uno de los facultativos que sigue en el servicio cuenta por tel¨¦fono, en nombre del resto de m¨¦dicos, que prev¨¦n m¨¢s renuncias. ¡°Desde hace a?os nunca est¨¢n los contratos al 100%. Es un hospital de dif¨ªcil cobertura, primero por la distancia [unos 33 kil¨®metros de la capital] y, segundo, porque no tiene residentes, al ser m¨¢s dif¨ªcil que vengan. Siempre han faltado una o dos personas, a veces hasta cinco. El refuerzo en vacaciones siempre los hemos asumido entre compa?eros y compa?eras, haciendo m¨¢s turnos y horas¡±, relata. Por convenio, cuenta, deber¨ªan trabajar 192 horas al mes, pero han hecho por encima de forma reiterada: ¡°En la planilla de octubre varios compa?eros tiene 230-240, que se incrementan por los d¨ªas de incidencia, por ejemplo cuando alguien se pone malo y hay que hacer una guardia extra¡±.
La Consejer¨ªa de Sanidad, confirma que desde mayo se han dado, ¡°de manera progresiva¡±, varias bajas en el hospital. ¡°Algunos han decidido continuar su labor profesional en otros hospitales del Servicio Madrile?o de Salud (Sermas), otros en centros de atenci¨®n primaria de la Comunidad de Madrid y otros en la sanidad de otros pa¨ªses¡±, se?ala un portavoz. Tambi¨¦n indica que se han ofrecido contrataciones de refuerzo, pero que no se han podido cubrir porque es un centro de dif¨ªcil cobertura debido a su localizaci¨®n. Esto, a?ade, ¡°ha generado una reducci¨®n en el n¨²mero de facultativos del servicio de urgencias¡± y ¡°ha llevado a la direcci¨®n de este centro sanitario p¨²blico a reorganizar el servicio¡±.
Ante esta situaci¨®n, los m¨¦dicos se han puesto en contacto con la direcci¨®n del hospital con el fin de plantear medidas para fidelizar a los que quedan ¨Dpor ahora las ausencias no se han cubierto, advierten¨D y de atraer nuevos profesionales. Pero no han obtenido respuesta y consideran que los pasos de la gerencia son ¡°insuficientes¡±. ¡°Los m¨¦dicos de urgencias remitieron un escrito a la direcci¨®n del hospital en el que reclamaban medidas para retener y afianzar a estos profesionales, pero no se ha implementado plan alguno que pusiera fin a la sangr¨ªa¡±, se?ala en una nota de CC OO.
Uno de los sanitarios lo narra as¨ª: ¡°Siempre pidiendo m¨¢s medios, m¨¢s medidas, que se pueda conciliar... A veces viene gente y dura poco porque ven la sobrecarga y se van. Las personas renuncian cada dos o tres d¨ªas, porque se crea un efecto domino al ver que todo pone peor. La gente va huyendo y nunca les han llamado para preguntarles por qu¨¦ se van o qu¨¦ pueden hacer [por ellos]. Todo sigue igual¡±.
Por ahora, dicen los facultativos, la direcci¨®n del hospital ha optado por repartir octavillas donde se indica a los pacientes que ¡°en caso de patolog¨ªas que no son urgentes¡±, debido a que las esperas pueden superar las seis horas, acudan a alguna de las seis urgencias extrahospitalarias (Puntos de Atenci¨®n Continua, PAC) de la zona. ¡°Es una medida muy insuficiente. La realidad es que los PAC no siempre tienen m¨¦dicos y as¨ª no se soluciona el problema, es casi un enga?o¡±, se queja el m¨¦dico. Un portavoz de Sanidad puntualiza que se atiende a todos los pacientes que acuden al servicio ¨D¡°por un profesional de enfermer¨ªa, como m¨¢ximo en cinco minutos, para establecer el grado de su dolencia¡±¨D y que ¡°en ning¨²n caso¡± se les insta, una vez en las instalaciones, a que vayan a otros centros para que les atiendan.
Los sanitarios opinan que el exceso de trabajo ha ido a m¨¢s desde que la el Gobierno de Isabel D¨ªaz Ayuso puso en marcha el plan de reorganizaci¨®n de las urgencias extrahospitalarias. Los m¨¦dicos de esos servicios llevan en pie de guerra desde hace 10 meses, despu¨¦s de que la Comunidad abriera los 78 centros, pero con la mitad de personal que hab¨ªa antes de la pandemia. Ante el caos generado, en noviembre estos sanitarios fueron a la huelga. Despu¨¦s de 10 convulsos d¨ªas de paros, el Gobierno regional se comprometi¨® a abrir 49 de los centros con el equipo completo (un m¨¦dico, un enfermero y un celador) y los 29 restantes, con personal de enfermer¨ªa. Pero los profesionales llevan meses denunciando que las plantillas est¨¢n cada vez m¨¢s mermadas y que en muchos puntos nunca hay m¨¦dico.
En abril de 2022, recoge el comunicado de CC OO, el sindicato firm¨® un acuerdo con la Consejer¨ªa de Sanidad para incentivar que se cubrieran puestos en hospitales de dif¨ªcil cobertura, como el del Sureste. Entre las medidas se inclu¨ªa, por ejemplo, mayores puntuaciones para obtener plaza en la selecci¨®n del Sermas. ¡°Desde entonces, CC OO ha pedido a la consejer¨ªa, reuni¨®n tras reuni¨®n, que se materializara dicho acuerdo, pero no se ha hecho¡±, dice el texto.
¡°Con el estr¨¦s de la sobrecarga, hay riesgo de que atendamos peor, porque ya no podemos m¨¢s. Nos da miedo por la atenci¨®n que podemos brindar, que se nos escapen cosas o en la espera ocurra algo. Estamos muy preocupados y estresados... Vemos la planilla de octubre y es aterrador, angustioso. Los compa?eros est¨¢n tristes y agobiados. No es posible atender as¨ª¡±, concluye el mismo m¨¦dico.
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