El Ayuntamiento de Madrid cierra parcialmente dos grandes parques para instalar espect¨¢culos navide?os de pago
El Gobierno de Almeida acota el espacio del Tierno Galv¨¢n y el Juan Carlos I durante dos meses para celebrar eventos que rondan los 20 euros y consolida la estrategia de restringir el acceso a unos pocos
El carrito de beb¨¦ se atasca cada dos metros. El hombre que lo empuja lleva la cabeza fija en el c¨¦sped y solo la levanta para ver cu¨¢nto queda. ¡°Esp¨¦rame, Maite, ?no ves c¨®mo voy?¡±, le pide a una mujer a lo lejos. Ella, con la ni?a en brazos, avanza y no mira atr¨¢s. Van en busca de una salida, miran incr¨¦dulos hacia el camino de asfalto por el que no pueden ir, porque est¨¢ cerrado por unas vallas. Su paseo dominguero se acaba de llenar de barro, de una caminata por una pradera en pendiente no apta ni para los carros m¨¢s modernos, y una discusi¨®n se prolongar¨¢ hasta la salida del parque. El montaje de uno de los espect¨¢culos navide?os en el Tierno Galv¨¢n ¡ªque costar¨¢ una media de 20 euros por persona, unos 60 euros por familia de cuatro miembros con dos ni?os¡ª ha expulsado a los vecinos del coraz¨®n del recinto, que solo cuenta con unos pocos accesos, de manera que, dependiendo de por d¨®nde entren, solo pueden rodearlo. Y ser¨¢ as¨ª hasta mediados de enero. La Navidad privada ha llegado a las plazas p¨²blicas madrile?as.
A falta de que el Ayuntamiento de Madrid, dirigido por Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida, difunda el programa completo de las fiestas navide?as en la capital con alguna opci¨®n gratuita o m¨¢s asequible, dos espect¨¢culos privados arrancan a partir del 21 de noviembre en dos parques: el Juan Carlos I, en el distrito de Barajas, adem¨¢s del Tierno Galv¨¢n, en Arganzuela. Los dos ofrecen una experiencia con luces y animales. El primero, Brilla Zoo, ofrece una ¡°experiencia nocturna con 500 esculturas de luz¡± de todo tipo de animales. El segundo, Naturaleza Encendida, una edici¨®n con insectos, ¡°panales de abejas, lib¨¦lulas gigantes, escarabajos de mil colores¡±, promete en su p¨¢gina web. Las entradas van de los 17,50 a los 25 euros para mayores de 15 a?os y 12 a?os en cada caso.
Estos d¨ªas, los vecinos de los parques se han encontrado con las primeras vallas, focos, caminos cerrados o dif¨ªciles de acceder. Los dos espect¨¢culos abarcar¨¢n unas superficies de 1,3 kil¨®metros de recorrido en el caso del Juan Carlos I, adem¨¢s de 2.000 metros cuadrados destinados a una zona de comida, food trucks. En el Tierno Galv¨¢n, la empresa, que gestion¨® un espect¨¢culo similar en el Jard¨ªn Bot¨¢nico y el famoso ?rticus en la Casa de Campo ¡ªque recibi¨® un aluvi¨®n de cr¨ªticas al Ayuntamiento por la falta de previsi¨®n de aforo y las colas kilom¨¦tricas¡ª, ha pactado cerrar un espacio de 60.000 metros cuadrados del parque cada noche, ¡°un tercio m¨¢s de superficie que en ediciones anteriores¡±.
Y han comenzado a llegar las primeras cr¨ªticas, a una semana de que se inauguren estos espacios, pues para muchos vecinos acostumbrados a la estrategia municipal de ceder el espacio p¨²blico para eventos privados ¡ªtambi¨¦n festivales de m¨²sica cuya entrada ronda los 60 euros¡ª supone la privatizaci¨®n de facto de sus parques. ¡°La mayor queja que tenemos es que muchos decidimos venir a vivir aqu¨ª, porque ten¨ªamos un parque y esto es un privilegio, algo que decidimos para mejorar nuestra calidad de vida. Pero cuando lo tenemos, vemos que lo alquilan cada poco tiempo y no nos dejan hacer uso de ¨¦l. Entonces no tenemos parque ni tenemos nada¡±, denuncia Rub¨¦n Gonz¨¢lez, un vecino del Tierno Galv¨¢n, que pasea a su perro cada d¨ªa y ha observado c¨®mo despu¨¦s de cada evento masivo la pradera se convierte en un barrizal, en un basurero.
En el caso del Tierno Galv¨¢n, la superficie que estar¨¢ destinada a Naturaleza Encendida comprende el coraz¨®n del parque. De manera que tanto los ni?os, como los adolescentes, las familias y los due?os de los perros han quedado arrinconados estos d¨ªas de montaje en los alrededores. As¨ª como la pareja que discut¨ªa con el carrito del beb¨¦, otros peregrinaban perdidos tratando de rodear las vallas el pasado fin de semana. ¡°Ya no importa tanto la superficie que ocupan, que es bastante, sino que no podemos hacer uso normal de nuestro espacio¡±, insiste Rub¨¦n, que ha elaborado un mapa sobre su parque con la informaci¨®n del recorrido que ofrece la web de la empresa.
Por su parte, los organizadores de Naturaleza Encendida, la empresa Letsgo, aseguran que el recinto se utilizar¨¢ solo en la noche y quedar¨¢ abierto al p¨²blico general durante el d¨ªa, pues es un espect¨¢culo nocturno, igual que el del parque Juan Carlos I. Adem¨¢s, insisten en que se preservar¨¢ el medio ambiente de la zona afectada, que inquietaba a los vecinos. Aunque para muchos esto significa que igualmente la instalaci¨®n y las vallas se quedar¨¢n fijas hasta mediados de enero, que es cuando termina el evento.
Los vecinos del parque calculan que ha estado cerrado este a?o 18 semanas para todo tipo de eventos. Cuando llega la primavera, comienzan las fiestas, conciertos, festivales de electr¨®nica, que se suceden en el verano, despu¨¦s alguno gastron¨®mico y ahora con la Navidad, otro m¨¢s. ¡°El anfiteatro lleva destrozado desde el Brunch Electronik. Ahora vemos a los jardineros poni¨¦ndolo bonito, pero no para los vecinos, sino para otro evento a puerta cerrada, es indignante¡±, comenta Rub¨¦n.
Navidad para unos pocos
Los vecinos se han organizado y han enviado sus quejas al principal partido en la oposici¨®n, M¨¢s Madrid. Una de sus concejalas, Cuca S¨¢nchez, critica que ¡°la cesi¨®n de espacios p¨²blicos para eventos privados por parte del Ayuntamiento de Almeida se extiende cada vez m¨¢s por nuestra ciudad¡±. ¡°No es para que toda la gente disfrute de espect¨¢culos navide?os, no, hablamos de la ocupaci¨®n del espacio p¨²blico que es de todos para actividades culturales muy caras, que poco o nada tienen de familiar. En realidad, est¨¢n restringidas a unas pocas familias que puedan pagar una media de 25 euros por entrada. Son espect¨¢culos privativos en lugares p¨²blicos¡±, insiste.
El Ayuntamiento no ha querido proporcionar informaci¨®n sobre cu¨¢nto han pagado estas empresas a cambio de la cesi¨®n del espacio p¨²blico por parte del distrito de Arganzuela y el de Barajas, tampoco el porcentaje exacto de superficie acordada. Pero se trata de una pr¨¢ctica que los madrile?os han observado en otras zonas clave, como plaza de Espa?a, declarada por el alcalde como ¡°recinto ferial¡± y que abri¨® la puerta a que la mayor parte del a?o su enorme explanada se utilice para mercadillos de todo tipo, en lugar de funcionar como un oasis familiar para el peat¨®n en el centro de Madrid.
Unos d¨ªas antes del montaje de las vallas y las luces en el Tierno Galv¨¢n, un grupo de mujeres de unos 50 a?os, se organizaba para practicar Zumba en el centro del anfiteatro. Ya ha sucedido muchas veces que cuando tratan de hacer ejercicio con m¨²sica al aire libre en este punto del parque, la polic¨ªa municipal ha acudido a dispersarlas, alegando que el ruido molesta a los vecinos y que incumpl¨ªan la ordenanza por no tener una licencia. Desde el verano y cuando por fin este espacio se queda libre, lo hacen con cascos. Algunos grititos y palmas les sirven para guiar sus movimientos. ¡°Es el ¨²nico ruido que se nos permite. Pero luego llegan y montan un festival, es incre¨ªble¡±, se quejaba una de ellas a este diario.
¡°Como este gobierno municipal ya ha demostrado que es un desastre de gesti¨®n en todo aquello que tiene que ver con la organizaci¨®n y control de eventos, ya tenemos muchos precedentes, vamos a exigir a Almeida que no se ponga de perfil y requiera a las empresas todas las garant¨ªas de seguridad, movilidad, niveles de ruido, zonas adaptadas para personas con discapacidad, precios asequibles para colectivos vulnerables¡±, insiste S¨¢nchez, de M¨¢s Madrid. Aunque las empresas han anunciado que son accesibles para personas con discapacidad y quienes vayan con carritos de beb¨¦.
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