Madonna, Gwyneth Paltrow o Eminem. ?Por qu¨¦ todos los famosos tienen un NFT y por qu¨¦ no pueden dejar de hablar de ¨¦l?

Hay muchas preguntas que un periodista querr¨ªa hacerle a Madonna. Su opini¨®n sobre el BAYC #3756 no es una de ellas. S¨ª lo fue para la revista Variety, que se sent¨® el pasado julio con la cantante y decidi¨® preguntarle por este NFT. Los non fungeable tokens o NFT son im¨¢genes virtuales con un c¨®digo de autenticidad asociado. Un JPG con certificado digital que garantiza que la imagen en cuesti¨®n es ¨²nica. Estos dibujos virtuales suelen pertenecer a colecciones con una est¨¦tica com¨²n y distintas variaciones, algo as¨ª como los cromos o los Funkos, pero en versi¨®n digital. Y cara, muy cara. Los Bored Apes Yatch Club (Club n¨¢utico de los simios aburridos o BAYC, por sus siglas en ingl¨¦s) son una de las colecciones de NFTs m¨¢s populares. Pueden llegar a costar cientos de miles de d¨®lares. Tanto que ni la mism¨ªsima Madonna pudo comprarse el BAYC #3756, tal y como desvel¨® Variety.

¡°Estaba muy cabreada por no haber conseguido comprarlo¡±, respondi¨® la int¨¦rprete de Like a Virgin en la entrevista. ¡°Una vez que tengo en mente algo, voy a por ello. Pero aprend¨ª r¨¢pidamente que no es lo mismo querer 32 m¨²sicos en el escenario, que una ilustraci¨®n de un simio con una gorra de cuero de motociclista y dientes multicolores¡±, a?adi¨®. Puede que la conversaci¨®n suene absurda a aquellos que no est¨¦n familiarizados con este tipo de arte digital. Lo cierto es que tambi¨¦n suena absurda a muchos expertos en el tema.

De un tiempo a esta parte, artistas, deportistas y famosos en general han venido presumiendo de sus NFTs. Hablan de ellos en entrevistas, se los ponen como foto de perfil en las redes sociales, incluso los colocan en sus videoclips. Snoop Dogg y Eminem han colaborado en una reciente canci¨®n. En el v¨ªdeo musical, los raperos ceden protagonismo a una versi¨®n animada de sus avatares de BAYC, algo que tambi¨¦n hicieron cuando actuaron en directo en la ¨²ltima entrega de los MTV Awards. Los motivos para hacerlo no son art¨ªsticos sino econ¨®micos.

¡°El objetivo es el generar FOMO [siglas en ingl¨¦s de fear of missing out, cuya traducci¨®n al espa?ol ser¨ªa miedo a perderse algo] y de paso subir el precio de los NFTs¡±, explica por correo electr¨®nico Andr¨¦s Guadamuz, investigador de la Universidad de Sussex y experto en esta tecnolog¨ªa. El precio de los NFTs es altamente variable y depende mucho de lo popular que sea la imagen en cuesti¨®n. En este contexto, que un famoso ense?e en televisi¨®n su dibujito de un mono (o se lamente de que no lo ha podido comprar) incrementa el valor de esa imagen concreta y de toda la colecci¨®n. Los da a conocer al mundo, vendiendo la idea de que son exclusivos, escasos y tan famosos como sus due?os. No es un videoclip, no es una entrevista, es product placement.

A finales de 2021, el mercado de criptoactivos (donde se incluyen los NFTs y criptomonedas como el bitcoin) estaba alcanzando su punto de ebullici¨®n. Los gur¨²s ya estaban convencidos, ahora hab¨ªa que convencer al mainstream. El reto era subir al carro a la gente com¨²n. Por eso el actor Matt Damon empez¨® a hacer publicidad de criptomonedas. Por eso, decenas de famosos empezaron a hablar de monedas y arte digital, deslizaban la idea casualmente en una entrevista, compart¨ªan la imagen en sus redes sociales. La idea era normalizar su uso, hacerlo cotidiano, animar a sus fanes a invertir.

La oscarizada actriz Gwyneth Paltrow se cambi¨® el pasado mes de enero su foto de perfil en la red social Twitter para ponerse la de una mona rubia y de ojos azules. Entr¨® as¨ª en el universo BYAC. Un mes m¨¢s tarde se lo cambi¨® por un NFT de la colecci¨®n FlowerGirls. Y 30 d¨ªas despu¨¦s por otro de la colecci¨®n WoWGalaxy. Jason Derulo es m¨¢s constante. Y m¨¢s insistente. El cantante no solo se ha cambiado su foto de perfil para poner una de la famosa colecci¨®n CryptoPunks, sino que da charlas sobre c¨®mo invertir en este mundo en la plataforma Discord. Otros m¨²sicos como John Legend, Steve Aoki o la banda Kings of Leon han decidido sacar su propia colecci¨®n de NFTs.

Todos hacen publicidad, pero quien la realiz¨® de forma m¨¢s descarada y vergonzante fue Jimmy Fallon, el pasado enero, cuando entrevist¨® a la empresaria y cantante Paris Hilton en su programa The Tonight Show. Ambos arrancaron la entrevista mostrando a c¨¢mara sus BAYC. O mejor dicho, una copia impresa de los mismos (una idea que ya tiraba por tierra el sentido de los NFTs, a los que se supone ¨²nicos e imposibles de replicar). Los dos comentaban ante la c¨¢mara, muy ufanos, las peculiaridades de sus monetes. ¡°Me encantan las gafas de corazones rojos que lleva el tuyo¡±, dec¨ªa Hilton. ¡°M¨ªralos juntos, yo creo que ser¨ªan amigos. Son colegas¡±, respond¨ªa Fallon. Las risas enlatadas ¡ªy escasas para los est¨¢ndares estadounidenses¡ª ayudaron a amortiguar el bochorno del momento, pero no evitaron las cr¨ªticas al d¨ªa siguiente. ¡°?Por qu¨¦ estos famosos hablaban de criptograf¨ªa en un late night show?¡±, se preguntaba la revista especializada Polygon.

¡°La respuesta es dinero¡±, recoge el guante Guadamuz. ¡°Hay un buen n¨²mero de fondos de capital de riesgo que han estado invirtiendo fuertemente en NFTs¡±, se?ala. De entre todos estos fondos merece la pena centrarse en uno: Horowitz. Este fondo de Silicon Valley tuvo un papel protag¨®nico en los primeros pasos de internet. Y ahora es el mayor inversor del mundo crypto. La empresa, adem¨¢s, ha hundido sus ra¨ªces en Hollywood, donde ha encontrado a un mont¨®n de clientes dispuestos a invertir.

¡°Horowitz tiene conexiones con varias agencias de talento de Hollywood y, al parecer, han estado comprando los NFTs para clientes como parte de sus paquetes de promoci¨®n¡±, se?ala Guadamuz. ¡°Yuga Labs [empresa creadora de los BAYC] son de los que han recibido m¨¢s dinero de esos fondos¡±, a?ade. Eso explicar¨ªa por qu¨¦ Justin Bieber, Jimmy Fallon, Snoop Dogg, Eminem, Gwyneth Paltrow, Madonna, Neymar, Paris Hilton, Timbaland, Ellen DeGeneres o Steve Aoki tienen un NFT de un mono. Y por qu¨¦ no dejan de hablar de ¨¦l.