Mid-century: las claves del estilo de decoraci¨®n que est¨¢s viendo por todas partes
La moda que premiaba la funcionalidad, las l¨ªneas sencillas y los materiales nobles en busca de un ma?ana m¨¢s seguro y acogedor vuelve d¨¦cadas despu¨¦s como obsesi¨®n interiorista de quienes cuidan los detalles de su hogar
Al pensar en el llamado estilo Mid-century es posible que acudan a la memoria im¨¢genes de Mad Men, aquella serie de siete temporadas que se estren¨® en 2007 y que narraba el d¨ªa a d¨ªa de una agencia de publicidad en Madison Avenue, Nueva York, en los a?os cincuenta y sesenta. La paleta c¨¢lida de sus muebles de oficina, aderezada con una importante presencia de texturas de madera y l¨ªneas rectas, dominan el universo visual creado por la dise?adora de escenograf¨ªa Claudette Didul, que logr¨® definir est¨¦ticamente la ficci¨®n televisiva. Otra serie c¨¦lebre por su dise?o de set fue Frasier, la sitcom de la d¨¦cada de los noventa en la que se pod¨ªan apreciar piezas de dise?o estilo Mid-century en el apartamento del psiquiatra Frasier Crane, como el sill¨®n con otomana del matrimonio Eames. Fue tambi¨¦n en una serie de televisi¨®n, la segunda temporada de And Just Like That..., esta vez ambientada en la contemporaneidad, en la que uno de los conflictos m¨¢s importantes del guion sale a relucir entre dos personajes (Lisa y Charlotte) en una tienda de objetos de decoraci¨®n vintage, rodeadas de copas italianas estilo Mid-century.
No es casual que todos estos personajes pertenezcan o trabajen en entornos frecuentados por las clases altas, en las que se impone este criterio est¨¦tico tambi¨¦n en el interiorismo. Tal y como exclama la agente inmobiliaria Monique Anton en su podcast Mid-Century Modernism with Monique, en el que ¡°instruye a las masas en el maravilloso mundo del estilo Mid-century modernista¡±, para algunas personas esta tendencia trasciende el dise?o y la arquitectura, y llega a ser ¡°una forma de pensar y estar en el mundo¡±. El mobiliario Mid-century, en su propia contemporaneidad, que va desde mediados de los cuarenta a finales de los sesenta, pero tambi¨¦n su eco tard¨ªo en los noventa, y ahora en 2023, est¨¢ codificado bajo ideas normativas de buen gusto, alineadas con aquella idea generalizada de que menos es, en t¨¦rminos est¨¦ticos e invariablemente, siempre m¨¢s.
En la prescripci¨®n que arrojan las publicaciones de interiorismo y los perfiles presentes en redes sociales especializados en el tema, las referencias al estilo Mid-century parecen infinitas. As¨ª lo atestigua el ¨¦xito de perfiles de Instagram como Mid-Century Home o el fen¨®meno de la agencia inmobiliaria brit¨¢nica The Modern House. Casas envueltas en paneles de madera, con muebles de poca altura, de tejidos y tonalidades c¨¢lidas, con las paletas menos brillantes del verde haciendo su aparici¨®n junto a suelos de terrazo: las tendencias de interiorismo actuales est¨¢n fascinadas con la influencia del estilo Mid-century, que extiende sus brazos en el tiempo hasta hoy.
Pero, aunque haya sido la ficci¨®n televisiva producida en Estados Unidos la que m¨¢s haya hecho porque los sue?os est¨¦ticos de ascenso social se plasmen en forma de l¨ªneas depuradas de muebles de dise?o Mid-century, este es un estilo que se origina inicialmente en Europa a mediados del siglo XX, tal y como indica su nombre. Aunque impact¨® de lleno en una generaci¨®n de dise?adores y arquitectos estadounidenses responsables del llamado Mid-century modernista, influidos por Europa e incluso por la Escuela Bauhaus, y sedientos de una est¨¦tica que definiese una ¨¦poca post Segunda Guerra Mundial, sus ra¨ªces se hunden originalmente en los pa¨ªses n¨®rdicos.
El estilo Mid-century ¡°influy¨® en todos los pa¨ªses europeos, hasta el punto de que ebanistas n¨®rdicos trabajaron en Inglaterra o Centroeuropa dejando su huella¡±, explica ?frica Salces, la persona detr¨¢s de la selecci¨®n de objetos y muebles vintage de la tienda madrile?a La Recova (en Chueca y El Rastro), quien posee un vasto conocimiento en este tipo de mobiliario: ¡°Es el caso de marcas inglesas tan prestigiosas como Gplan, cuyo aspecto es muy, muy n¨®rdico.¡±
C¨®mo reconocer este estilo
El Mid-century, en lo que a dise?o de mobiliario se refiere, est¨¢ al servicio de la practicidad. En este sentido, el adorno o cualquier detalle superfluo es prescindible. ¡°Apost¨® por la funcionalidad, de ah¨ª que primen las l¨ªneas sencillas y muy puras, limpias de adornos¡±, explica Salces. ¡°Sin embargo, el cuidado en los detalles fue una obsesi¨®n, llegando a crear trabajos casi preciosistas, que velaban por los detalles, incluso en las zonas menos visibles de las piezas¡±, asegura. Para Salces, en este estilo es fundamental el empleo de maderas nobles en los muebles, ¡°trabajadas con esmero para un dise?o atractivo y acogedor¡±.
La importancia de los espacios acogedores parec¨ªa haber escalado posiciones en un mundo que quer¨ªa sacudirse el horror de la Segunda Guerra Mundial, y que deseaba ver que sus formas y texturas contribu¨ªan a iniciar un nuevo cap¨ªtulo en la historia, m¨¢s esperanzador. Sin duda, los materiales, paletas de color y texturas contribuyen a esta sensaci¨®n de calidez: desde maderas caoba, en tonalidades rojizas, al tacto del terciopelo y una gama de tonos tierra salpicada, en ocasiones, de intensos pero apagados acentos en color verde. Tal vez porque estas terminaciones y texturas pueden resultar intensas, las siluetas de los muebles compensan en t¨¦rminos de ligereza, no solo reduciendo las l¨ªneas al m¨ªnimo, sino tambi¨¦n sin avasallar el espacio, haciendo de los muebles de poca altura todo un emblema.
¡°Los muebles se caracterizan por el uso de pata cortita, dejando atr¨¢s aquellos bastidores pegados al suelo que resultaban tan inc¨®modos para la limpieza y dot¨¢ndolos de ligereza¡±, explica Salces, que convive en La Recova con distintos muebles de este tipo, aparadores, tocadores, butacas y mesitas. ¡°Un claro ejemplo de funcionalidad son los aparadores que hoy se utilizan tanto para sostener el televisor y como punto de almacenaje¡±.
Otro signo con el que es posible reconocer los muebles de esta escuela es el de presentar las patas ligeramente inclinadas. ¡°En forma de V, tanto en el caso de las patas de madera como las de metal, con un remate conocido como ufo, ic¨®nicas en dise?o italiano¡±, detalla Salces, para quien existen una serie de objetos que destacan a la hora de perfilar el gusto por este estilo de interiorismo. Desde una pareja de butacas c¨®ctel aderezadas con una mesa p¨²a a?os cincuenta (su superficie, como un tri¨¢ngulo de bordes redondeados, recuerda a una p¨²a de guitarra), que la experta en mobiliario vintage describe como un acierto garantizado, a objetos de decoraci¨®n artesanal que emplean el cristal, la cer¨¢mica o el textil: ¡°Nosotros siempre contamos con una amplia colecci¨®n de cer¨¢mica alemana y n¨®rdica Mid-century en La Recova.¡±
Las l¨¢mparas se han convertido en otro objeto del hogar que ha abandonado su inclinaci¨®n anterior por la discreci¨®n abrazando formas rotundas llenas de personalidad y un gusto por el dise?o de autor y las joyas vintage. En el caso del Mid-century, Salces destaca al dise?ador dan¨¦s Poul Henningsen, ¡°especialmente por su serie de l¨¢mparas PH4 y PH5, que se editaron bajo la marca de Louis Poulsen¡±.
Objetos de deseo
El estilo de mediados del siglo pasado est¨¢ asociado no solo a un concepto acogedor de hogar, sino tambi¨¦n a una cierta aspiraci¨®n de encuentro con la naturaleza, a una b¨²squeda de paz. La convulsa primera mitad de siglo XX hab¨ªa creado esta necesidad, que afloraba en su dimensi¨®n pl¨¢stica y est¨¦tica, pero que tambi¨¦n plasmaba un deseo aspiracional. De alguna manera, este significado se reproduce en el gusto por los objetos Mid-century de hoy.
Llisa Demetrios, comisaria del Instituto Eames y nieta de Charles Eames, confesaba en una entrevista en el podcast Design Better que todav¨ªa segu¨ªa aprendiendo de la obra de sus abuelos: ¡°Puedes apreciar un objeto por una raz¨®n, pero luego descubrir que subyace un mensaje m¨¢s profundo en ¨¦l¡±. Demetrios explicaba el sentido y la intenci¨®n detr¨¢s de este estilo. ¡°Lo realmente interesante del movimiento Mid-century era que afrontaba el dise?o como una manera de resolver problemas. Para los dise?adores, la producci¨®n en masa podr¨ªa ser algo positivo, porque pod¨ªa elevar los est¨¢ndares de calidad para todo el mundo, pero eso significa contar con el mejor prototipo posible¡±, expon¨ªa. ¡°Ray y Charles dec¨ªan que hab¨ªa que adelantarse a las necesidades del usuario antes de que reparase en ellas. Eso era lo que les permit¨ªa escalarlo. Mis abuelos nunca pretendieron hacer un dise?o una sola vez, sino crear un sistema con el que producir mil, y creo que esto forma parte de este movimiento: pensar en escalas diferentes a las de antes. El mundo estaba cambiando, los soldados que volv¨ªan de la guerra necesitaban viviendas, y pensaron en c¨®mo los m¨¦todos de producci¨®n que se emplearon durante la guerra pod¨ªan replicarse para crear casas¡±.
En la cualidad que poseen los objetos para contar historias, las piezas Mid-century cuentan algo sobre la voluntad de movilidad en el ascensor social de quienes las buscan. El dise?o actual sabe de esta demanda y no renuncia a beber de ella: ¡°Los a?os cincuenta y sesenta tienen magnetismo, y la prueba de ello es la cantidad de marcas actuales que reproducen hasta el infinito el dise?o original¡±, expone Salces, que cita la chaise longue LC4 de Le Corbusier, la butaca con Ottoman del matrimonio Eames y la silla Barcelona de Mies van der Rohe como piezas de dise?o moderno que hoy forman parte de la retina colectiva.
Desde que el confinamiento en 2020 redoblara la atenci¨®n que ponemos en el hogar, tanto en su dimensi¨®n funcional como la m¨¢s est¨¦tica, el inter¨¦s por crear un espacio acogedor y distintivo tambi¨¦n se ha multiplicado. Estos son, en m¨¢s de un sentido, tiempos convulsos. En una aldea global cada vez m¨¢s furiosamente hiperconectada, la calidez de encontrarse en casa vuelve a parecer m¨¢s atractiva que nunca.
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