Implicar a la peque?a empresa, clave para el impulso de la FP dual

La formaci¨®n profesional (FP) dual en Espa?a, por la que los alumnos de este tipo de ense?anza reciben conocimientos te¨®ricos y pr¨¢cticos casi a partes iguales desde el principio, ha tenido un gran impulso tras la ley que entr¨® el pasado mes de abril. La norma implanta un sistema completamente dual, por el cual los estudiantes de la FP general deben contar entre un 25% y un 35% de formaci¨®n pr¨¢ctica in situ en empresas, y los de FP intensiva entre un 35% y un 50%. En esta etapa ya existe contrato laboral y, por consiguiente, remuneraci¨®n.

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La formaci¨®n profesional (FP) dual en Espa?a, por la que los alumnos de este tipo de ense?anza reciben conocimientos te¨®ricos y pr¨¢cticos casi a partes iguales desde el principio, ha tenido un gran impulso tras la ley que entr¨® el pasado mes de abril. La norma implanta un sistema completamente dual, por el cual los estudiantes de la FP general deben contar entre un 25% y un 35% de formaci¨®n pr¨¢ctica in situ en empresas, y los de FP intensiva entre un 35% y un 50%. En esta etapa ya existe contrato laboral y, por consiguiente, remuneraci¨®n.

La ley ha sido muy bien recibida en los ¨¢mbitos educativo y empresarial. De hecho, fue consensuada con todos los agentes sociales durante su elaboraci¨®n. No obstante, el camino que se abre no est¨¢ exento de problemas, pues la mayor implicaci¨®n de la empresa en la formaci¨®n profesional va a llevar su tiempo. ¡°Las compa?¨ªas, grandes, medianas y peque?as se han convertido en impartidoras de formaci¨®n m¨¢s all¨¢ de tener a un becario en pr¨¢cticas y eso supone una transformaci¨®n¡±, asegura Juan Carlos Tejeda, director de Formaci¨®n de CEOE, quien a?ade que por eso se habilit¨® un periodo de transici¨®n hasta 2028.

La principal dificultad para el tejido empresarial no es tanto econ¨®mica, explica Tejeda, sino ¡°el desconocimiento que gran parte de las empresas espa?olas tiene sobre lo que es la nueva FP dual o de c¨®mo ponerla en pr¨¢ctica¡±. En Espa?a, el 54,9% de las empresas son pymes sin asalariados y el 38,3% son micropymes que tienen entre uno y nueve trabajadores, seg¨²n datos del Ministerio de Industria del mes de julio pasado. ¡°El tama?o es lo que dificulta mucho la participaci¨®n de la empresa en la formaci¨®n. Se calcula que un mill¨®n de j¨®venes van a cursar FP y la gran pregunta es c¨®mo las pymes espa?olas van a absorber esta cantidad de alumnos¡±, concluye el directivo de CEOE.

Salir a la calle confirma esta impresi¨®n. La propietaria de una panader¨ªa artesanal situada en el centro de Madrid, abierta tras la pandemia y con una clientela ya consolidada, y que no quiere identificarse, declara ¡°que no me he planteado tener alumnos para impartirles formaci¨®n, adem¨¢s no conozco la ley¡±. Empresas ubicadas en pueblos peque?os tienen el mismo problema. ¡°Yo no tengo tiempo de formar trabajadores¡±, afirma la titular de una cl¨ªnica veterinaria de un municipio abulense, que tampoco quiere que aparezca su negocio. ¡°Tengo ayudantes que han hecho FP, pero ya con los estudios terminados¡±, agrega. El trabajador en cuesti¨®n cobra un salario ligeramente superior al m¨ªnimo interprofesional, que viene a ser similar al contrato remunerado de la FP intensiva. Por eso, insiste Juan Carlos Tejeda, el problema no es econ¨®mico, ¡°ya que el contrato formativo est¨¢ bonificado¡±.

Cuesti¨®n de costes

Aqu¨ª no solo entran las pymes. Una empresa de Alemania, pa¨ªs referente en el desarrollo de la FP dual, la electrot¨¦cnica y suministradora de abastecimiento de edificios Gebr¨¹der Peters, que est¨¢ en manos de la misma familia desde hace 120 a?os y con m¨¢s de 800 empleados, cuenta con 65 j¨®venes que aprenden hasta ocho profesiones en sus instalaciones. Sumando sus salarios, que en el pa¨ªs germano se abonan desde el principio, la inscripci¨®n del contrato, los cursos de los gremios, el material, la ropa laboral, el tiempo de trabajo de los formadores y su capacitaci¨®n, as¨ª como la b¨²squeda de alumnos que quieran formarse en la empresa, Gerbr¨¹der Peters dedica por aprendiz unos 40.000 euros a su formaci¨®n completa que dura cuatro a?os. A los propietarios, el matrimonio Peters, les compensa. ¡°Se quedan en la empresa, nos ahorra buscar despu¨¦s talento desconocido fuera y nos asegura el futuro¡±, argumentan.

Este coste en Espa?a todav¨ªa es impensable en la mayor¨ªa de las empresas y hasta infrecuente en las de la misma envergadura. Para Ignacio de Benito, gerente de proyectos s¨¦nior de la Fundaci¨®n Bertelsmann, las ayudas al desarrollo de la FP dual deben consistir en facilitar herramientas. ¡°El apoyo financiero no lo vemos de una manera generalizada, no pensamos que sea eficiente subvencionar a todas las empresas por igual, puesto que, al acabarse la financiaci¨®n, muchas sociedades tienden a abandonar el objeto subvencionado que, en este caso, es la formaci¨®n de los j¨®venes¡±, advierte.

De Benito sostiene que lo importante es ¡°el conocimiento de lo que representa la FP dual para los futuros trabajadores y las propias empresas. A muchas, especialmente pymes, les suena algo, pero no conocen el nuevo modelo¡±. La fundaci¨®n, instituci¨®n que a trav¨¦s de su proyecto Alianza FP Dual persigue la consolidaci¨®n de este tipo de ense?anza en nuestro pa¨ªs, cre¨® hace siete a?os, antes por tanto de que entrara en vigor la nueva ley, la figura del prospector empresarial. Este profesional tiene como objeto visitar empresas, informarles de las ventajas de la FP dual y ofrecerse como acompa?ante durante todo el proceso de aprendizaje del alumno. ¡°El prospector es clave y est¨¢ funcionando en cada vez m¨¢s comunidades aut¨®nomas, las que tienen las competencias en esta materia¡±, a?ade De Benito. Esta labor de informaci¨®n reca¨ªa hasta hace poco tiempo en el mismo profesorado de las escuelas de Formaci¨®n Profesional, con lo que lleg¨® un momento, explica el directivo de Bertelsmann, en que dej¨® de hacerse y se estanc¨®, ¡°porque bastante tarea tienen ya los profesores¡±.

Apoyo com¨²n

Los dos escollos fundamentales de la implantaci¨®n de una FP dual eficaz, el desconocimiento y el peque?o tama?o de las empresas a las que se convierte en centro de formaci¨®n, pueden llegar a paliarse gracias a la labor que est¨¢n empezando a llevar a cabo asociaciones profesionales, tanto sectoriales como profesionales, y las c¨¢maras de comercio; tanto Ignacio de Benito como Juan Carlos Tejeda destacan el papel cada vez m¨¢s intenso que est¨¢n ejerciendo respecto a la implicaci¨®n de las compa?¨ªas en la formaci¨®n de j¨®venes, as¨ª como en el apoyo a la figura del tutor externo, prevista en la ley aprobada la primavera pasada. Este tutor tiene como cometido b¨¢sico ayudar a varias peque?as empresas a la vez para que realicen ense?anzas pr¨¢cticas a alumnos en sus instalaciones. La uni¨®n de pymes en el campo de la FP dual es otro aspecto importado de Alemania, pa¨ªs que tambi¨¦n cuenta con un porcentaje muy elevado de peque?as empresas, aunque las micropymes solo suponen el 13,7% de su tejido productivo frente al casi 40% que representan en Espa?a.

Instrumento valioso

La FP dual es un instrumento que puede contribuir a resolver otro problema que lastra el mercado laboral en Espa?a: la falta de personal cualificado de grado intermedio. El presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva, se?ala que ¡°creamos hoy m¨¢s empleo en Espa?a con profesionales de FP que con profesionales de perfil universitario y esta tendencia va a continuar durante los pr¨®ximos a?os¡±. Seg¨²n la Fundaci¨®n Bertelsmann, el 39,7% de los trabajadores espa?oles tiene un nivel formativo bajo, el 37,1% lo tiene alto, y solo el 23,2% est¨¢ formado en un nivel intermedio. En Cepyme afirman que sectores como la construcci¨®n y la industria est¨¢n sufriendo una preocupante falta de trabajadores cualificados. Tambi¨¦n es notorio en el sector primario, donde al d¨ªa de hoy, por ejemplo, grandes explotaciones agrarias no pueden utilizar drones porque no encuentran personas que los sepan manejar.

Hasta tal punto llega este d¨¦ficit que una empresa catalana del sector del metal, TNComas, cuya actividad es el mantenimiento industrial o sustituci¨®n de plantas y maquinaria, ha creado su propia escuela de formaci¨®n para formar futuros profesionales para todo el que lo necesite. ¡°No encontr¨¢bamos torneros, fresadores o reparadores, en definitiva, lo que se conoce en FP como operadores de fabricaci¨®n mec¨¢nica, pero tampoco lo encontraban en toda la industria de la zona de Girona¡±, dice Georgina Comas, una de las dos responsables de la empresa. La soluci¨®n fue crear hace tres a?os una escuela com¨²n, un centro de formaci¨®n, con reconocimiento de los t¨ªtulos por parte de la Generalitat de Catalunya, para formar operarios que cubran las necesidades de todo el sector. Es un centro privado, pero que est¨¢ sirviendo a sectores tan diversos como el c¨¢rnico, ¡°en el que el mantenimiento de las plantas requiere trabajadores cualificados¡±, indica Comas.

Esta situaci¨®n se agrava en los llamados oficios tradicionales, en los que la ausencia de aprendices pone en peligro negocios familiares. Una vez m¨¢s hay que acudir al modelo alem¨¢n, cuyo sistema sirvi¨® de gu¨ªa en muchos aspectos recogidos en la ley espa?ola. En la peque?a f¨¢brica de cerveza artesanal Ayinger el propio due?o curs¨® FP dual como maestro cervecero, y en la actualidad cuentan con un joven que est¨¢ aprendiendo el oficio ya que tienen como norma que nunca falte alguien que se prepare para continuar la tarea.