Los grupos espa?oles refuerzan sus cimientos en Estados Unidos

Las ofertas lanzadas por Washington para corregir el enorme d¨¦ficit de infraestructuras de la primera econom¨ªa del mundo encuentran a las grandes contratistas espa?olas con una pala en el tajo, pero menos preparadas a las m¨¢s peque?as. Mientras que las multinacionales agrupadas en Seopan ya obtienen un tercio de sus ingresos extranjeros en Estados Unidos y Canad¨¢, las que forman parte de ANCI, la asociaci¨®n nacional de constructoras no cotizadas, apenas tienen all¨ª el 1% de su contrataci¨®n internacional.

Entre las grandes, por ejemplo, Ferrovial ampliar¨¢ el aeropuerto JFK de Nueva York; Dragados, OHLA y CAF dotar¨¢n de una nueva l¨ªnea de tren ligero a Maryland y Renfe operar¨¢ el futuro AVE de Texas. Los tres son proyectos de colaboraci¨®n p¨²blico-privada que no necesariamente recibir¨¢n financiaci¨®n de los nuevos planes de infraestructuras, pero constituyen una carta de presentaci¨®n formidable para competir por los nuevos contratos que los fondos federales van a multiplicar en los pr¨®ximos cinco a?os.

Entre las empresas de mediana capitalizaci¨®n, en cambio, las ¨²nicas que han conseguido contratos ¨²ltimamente son las gallegas Copasa y Grupo Puentes, ambas en 2019, cuando se adjudicaron la remodelaci¨®n de autopistas en Texas, para lo cual tuvieron que constituir filiales locales. El problema no es que las constructoras espa?olas de este segmento no est¨¦n internacionalizadas. Al menos 15 de las 22 asociadas de ANCI operan en 46 pa¨ªses de cuatro continentes, aunque Am¨¦rica Latina concentra el 63% de su volumen de negocio exterior, con M¨¦xico como principal parada. Cruzar el r¨ªo Bravo es una aventura complicada.

¡°Los desaf¨ªos de entrada son fundamentalmente dos¡±, explica Concha Santos, presidenta de ANCI. ¡°Por un lado, la obtenci¨®n de la licencia del Departamento de Transporte de cada Estado en el que se quiera operar, ya que no hay uno para todo el pa¨ªs y el grueso de la contrataci¨®n p¨²blica se encuentra en manos de cada gobernaci¨®n, y, por otro, la propia capacidad financiera: la obtenci¨®n de garant¨ªas que cubran la totalidad del presupuesto de cada proyecto¡±, precisa. Por ejemplo, respecto a las licencias, Santos apunta que California y Florida exigen haber ejecutado obras en la naci¨®n previamente, aunque hay otros Estados m¨¢s flexibles a la hora de aceptar nuevos licitadores. ¡°Este requerimiento puede mitigarse mediante la adquisici¨®n de una empresa local con autorizaci¨®n¡±, destaca. Pero incluso salvado ese obst¨¢culo, avisa de que la trayectoria ser¨¢ ¡°determinante¡± para definir las condiciones de acceso a las fianzas.

Incluso las grandes multinacionales han recurrido a la billetera para reforzar su posici¨®n. ACS aterriz¨® en suelo estadounidense en 2005 a trav¨¦s de su filial Dragados, pero ampli¨® notablemente su implantaci¨®n con la compra en 2011 del control de Hochtief, ya que la alemana tra¨ªa consigo a Turner y Flatiron, dos pesos pesados de la industria. Ferrovial, por su parte, entr¨® en 2004 con la concesi¨®n de una autopista de peaje en Chicago, pero al a?o siguiente adquiri¨® Webber por 178 millones de euros.

¡°Hay empresas que han entrado solas y que est¨¢n abri¨¦ndose paso a pulm¨®n, como Sacyr o el Grupo Puentes, pero tambi¨¦n hay otras que han adoptado una estrategia de crecimiento que pasa por la adquisici¨®n de una compa?¨ªa local porque de esa forma se benefician de sus contactos, cartera de pedidos, permisos, personal cualificado¡­ Todo se acelera¡±, comenta Mar¨ªa Jes¨²s Fern¨¢ndez, consejera econ¨®mica y comercial del Consulado espa?ol en Chicago.

Lo que est¨¢ en juego

La ley de 1,2 billones de d¨®lares para infraestructuras promulgada por el presidente, Joe Biden, el oto?o pasado constituye la mayor inversi¨®n en obras p¨²blicas desde que Eisenhower cre¨® la red de carreteras interestatales en 1956. A estos fondos se suman los 370.000 millones que la ley para la reducci¨®n de la inflaci¨®n aprobada este verano ha reservado para energ¨ªas renovables, veh¨ªculos el¨¦ctricos y eficiencia energ¨¦tica. Los Estados, sobre todo los seis m¨¢s grandes (California, Texas, Florida, Illinois, Nueva York y Pensilvania), ya han recibido 110.000 millones de d¨®lares a cuenta de esos fondos para la financiaci¨®n de 4.300 obras en 3.000 comunidades, mientras que las agencias federales, principalmente las de Transportes, Energ¨ªa y Agua, han abierto convocatorias para propuestas por 100.000 millones.

Si la escasez de mano de obra y de materiales lo permite ¡ªque adem¨¢s deben de ser nacionales por mandato de la Buy American Act y la Hire American Act¡ª, las constructoras espa?olas establecidas all¨ª van a constatar la trascendencia de estar en el lugar correcto en el momento preciso. Juli¨¢n N¨²?ez, presidente de Seopan, destaca que estas suponen el 44% de la facturaci¨®n internacional de obras en curso en el pa¨ªs y que ¡°participan en m¨¢s de 227 proyectos con una inversi¨®n agregada superior a los 91.000 millones de euros¡±.

Antonio de Gregorio, socio de McKinsey, coincide en que la posici¨®n de las compa?¨ªas espa?olas all¨ª es ¡°superbuena¡± e incluso son la referencia de la industria en ciertos Estados porque han sido capaces de asumir obras t¨¦cnicamente complejas, como la remodelaci¨®n de la pista del aeropuerto de Dallas o la cimentaci¨®n mar adentro, frente a las costas de Nueva York, de aerogeneradores casi tan altos como el edificio Chrysler. ¡°En esa capacidad t¨¦cnica radica su valor diferencial sobre los competidores locales¡±, afirma.

Aliados y rivales

A juicio de Fern¨¢ndez, los grupos locales est¨¢n dispuestos a compartir la tarta con sus rivales extranjeros dependiendo del tama?o del contrato. Por ejemplo, ACS y Dragados trabajan en sociedad con la texana Fluor y la brit¨¢nica Balfour Beatty en el tren ligero que enlazar¨¢ por una v¨ªa elevada las terminales del aeropuerto de Los ?ngeles, mientras que FCC colabora con la australiana Macquarie, la israel¨ª Shikun & Binui y la virginiana Wagman Heavy Civil, entre otras, en la renovaci¨®n de nueve puentes en Pensilvania. En casos como los citados, la envergadura del proyecto (4.900 millones de d¨®lares en el de Los ?ngeles y 2.000 millones en el de Pensilvania) hace aconsejable repartirse el riesgo, pero en obras m¨¢s modestas, como las de agua, lo normal es licitar en solitario, puntualiza.

En cualquier caso, ya sea a golpe de pica o de talonario, los grupos espa?oles han sabido enraizarse en el terreno. ACS goza del entramado m¨¢s fuerte porque su subsidiaria Turner es, a su vez, propietaria de la canadiense Clark Builders y, en alianza con Flatiron, de la neoyorquina E. E. Cruz. Su otro brazo, Dragados, posee las firmas Pulice, Prince Contracting, Schiavone, John P. Picone y J. F. White. ACS reporta que Estados Unidos aport¨® a sus cuentas una facturaci¨®n de 8.442 millones de euros en la primera mitad del a?o, el 55% del total.

Ferrovial vendi¨® en 2015 la concesi¨®n de la Chicago Skyway, la autopista que le abri¨® las puertas del mercado, pero mantiene en cartera otras cinco en Texas, Carolina del Norte y Virginia. En obra civil, sus trofeos son la construcci¨®n de la nueva terminal del aeropuerto JFK de Nueva York, la ampliaci¨®n de la autov¨ªa I-35 que atraviesa Texas y la construcci¨®n en el mismo Estado de tres plantas de agua. OHLA se estableci¨® en Miami en 2005 con la fundaci¨®n de OHLA USA, que en los a?os siguientes creci¨® por la absorci¨®n de empresas. Sacyr entr¨® en el pa¨ªs en 2018 cuando se apunt¨® la ampliaci¨®n de una carretera en Florida. Desde entonces ha desarrollado otras 14 en el mismo Estado y en Texas. Acciona ha sido, entre las grandes, la ¨²ltima en entrar, aunque ya estaba presente a trav¨¦s de su divisi¨®n de energ¨ªa y agua. FCC tiene una presencia destacada en la recogida y tratamiento de residuos urbanos en cinco Estados.