Los secretos de la cerveza perfecta: temperatura y tiempo
Para la mayor¨ªa de los estilos, exceptuando algunos belgas como las ¡®lambic¡¯ o estilos de alta graduaci¨®n alcoh¨®lica, lo ideal es que tenga entre 2 y 3 cent¨ªmetros de espuma
Aunque no seas fan del postre, seguro que te suena el famoso coulant de chocolate, tambi¨¦n llamado volc¨¢n de chocolate. Su exterior esponjoso y horneado, junto a su interior l¨ªquido, crea una experiencia que va m¨¢s all¨¢ de lo visual: es una combinaci¨®n de texturas y sabores que elevan el disfrute al m¨¢ximo. ?Y qu¨¦ tiene que ver el coulant con la cerveza? M¨¢s de lo que imaginas. Igual que maridarlo con una kriek ¡ªuna cerveza belga con cerezas¡ª o con una sabrosa Imperial Stout puede ser una gran idea, el servicio de ambos debe cumplir ciertas reglas para que se disfruten como merecen. En ambos casos, todo gira en torno a dos aspectos clave: el tiempo y la temperatura.
Es posible que tengas un amigo que diga: ¡°En este bar tiran la ca?a como en ning¨²n otro¡±. Y probablemente tenga raz¨®n. El servicio correcto de una ca?a tiene su t¨¦cnica, y no en todos los sitios lo hacen igual. Por ejemplo, en la Rep¨²blica Checa, es com¨²n que el grifo se introduzca dentro del vaso para lograr el servicio perfecto.
Una buena cerveza requiere su tiempo, especialmente para la correcta formaci¨®n de espuma. Para la mayor¨ªa de los estilos, exceptuando algunos belgas como las lambic o estilos de alta graduaci¨®n alcoh¨®lica, lo ideal es que tenga entre 2 y 3 cent¨ªmetros de espuma. ?Por qu¨¦ es tan importante? Porque la espuma no es solo est¨¦tica, sino que juega un papel fundamental en la percepci¨®n de aromas y sabores.
Las copas y vasos est¨¢n dise?ados espec¨ªficamente para este prop¨®sito: incluyen una l¨ªnea de medida que indica hasta d¨®nde debe servirse la cerveza y d¨®nde debe comenzar la espuma. Si alguna vez ves un vaso lleno hasta el borde, no est¨¢s viendo un servicio correcto, ya que no deja espacio para esa capa de espuma que realza la experiencia.
Pasos para servir una cerveza correctamente
- Enjuaga la copa limpia con agua fría para enfriar levemente y para eliminar restos de grasa o polvo, ayudando así a la formación de espuma.
- Inclina el vaso a 45 grados mientras sirves la cerveza por un lateral.
- Endereza el vaso a mitad del servicio para formar una capa de espuma en la parte superior.
- Si es una cerveza de trigo o una que indique en la etiqueta que contiene sedimentos importantes para su perfil, agita suavemente la botella antes de servir para integrar los posos. En el caso de otras cervezas, especialmente muchas artesanas, aunque puedan tener poso al fondo, estos no están pensados para servirse, ya que podrían alterar el sabor y aroma originales diseñados por el cervecero. Siempre es una cuestión de revisar las recomendaciones del estilo y del productor.
Este peque?o ritual asegura que la espuma permita liberar los aromas atrapados en la cerveza. Pero claro, todo esto funciona si la temperatura tambi¨¦n es la adecuada.
Nunca congelada
Seguro que te ha pasado: pruebas una cerveza demasiado fr¨ªa y notas que sabe a¡ nada. Es como morder un helado; simplemente adormece tus papilas gustativas. Esto se debe a que el fr¨ªo excesivo reduce la sensibilidad en la boca y, adem¨¢s, evita que el CO? atrapado en la cerveza fluya correctamente.
La carbonataci¨®n de una cerveza no es un detalle menor; es parte esencial de su textura, aroma y sensaci¨®n en boca. Por ejemplo, en estilos como la Berliner Weisse, el CO? aporta efervescencia similar a la de un cava. Si la cerveza est¨¢ demasiado fr¨ªa, pierdes esa sensaci¨®n agradable de burbujeo y los aromas que deber¨ªan desprenderse.
Seg¨²n Randy Mosher en su libro Tasting Beer, las temperaturas ideales son entre 3,5 ¡ãC y 7 ¡ãC para las lagers y entre 7 ¡ãC y 13 ¡ãC para las ales. ?Significa esto que debes ser inflexible? Para nada. En un verano sevillano a 40 grados, nadie te va a culpar por querer una cerveza m¨¢s fr¨ªa de lo recomendado. En la vida, como en la hosteler¨ªa, lo importante es adaptarse, y si la cerveza est¨¢ muy fr¨ªa, siempre puedes esperar unos minutos para que alcance su temperatura ¨®ptima. Eso s¨ª, ?nunca congelada!
El servicio perfecto: m¨¢s que un capricho
La espuma no solo mejora la presentaci¨®n, sino que tambi¨¦n activa los sentidos al liberar los aromas de la cerveza. La temperatura, por otro lado, asegura que percibas todos sus matices. Como cuando cortas un coulant y esperas esa lava perfecta, pedir una cerveza con su servicio correcto es garantizar una experiencia completa.
No hay mayor decepci¨®n que un coulant sin lava o una cerveza sin espuma, servida a una temperatura incorrecta. La pr¨®xima vez que disfrutes de una, pide que te la sirvan como merece: con su espuma, buena temperatura y lista para deslumbrar todos tus sentidos. ?Salud!