Vino a granel, pero del bueno

Pobre vino. Hace a?os te beb¨ªa todo el mundo, cuando buena parte de tu producci¨®n era burda y peleona. Y ahora que te elaboran bien en cualquier regi¨®n de Espa?a, cada vez te tomamos menos. Has ca¨ªdo en las garras de los sibaritas, los entendidos y los gourmets, que han proyectado una imagen de exclusividad esnob que no mereces. Por su culpa, aburres a unos, das miedo a otros y despiertas indiferencia generalizada entre los m¨¢s j¨®venes. La cerveza te est¨¢ ganando la partida.

Para que no te deprimas, me gustar¨ªa informarte de una iniciativa que trata de devolverte al pueblo llano, sin que eso suponga degradar tu calidad. Bodega Urbana es un local de Bilbao que actualiza las viejas bodegas de ciudad en las que se vend¨ªan -y a¨²n se venden- vinos a granel. La novedad reside en la buena calidad de los caldos -ni rastro de los vinachos con resac¨®n garantizado habituales en esta clase de establecimientos- y la tecnolog¨ªa con la que se transportan y conservan.

Cuando entras en la tienda, a la derecha te encuentras unas estanter¨ªas con botellas etiquetadas de bodegas peque?as y poco conocidas. Nada demasiado diferente a una vinoteca convencional. Pero a la izquierda unos dep¨®sitos met¨¢licos almacenan cientos de litros de vino sin marca, separado seg¨²n sus variedades: albari?o, cabernet sauvignon, godello, merlot, menc¨ªa, sauvignon blanc, syrah o tempranillo. Todos se pueden comprar a cinco euros la botella.

Al fondo hay un bar en el que se puede picar algo acompa?andolo de una copa de estos vinos o de otros de marca. Y al lado, una mesa en preparada para jugar al quimicefa del en¨®logo, en la que preparas tu propia mezcla de variedades para llev¨¢rtela despu¨¦s a casa embotellada. Para ello cuentas con la asesor¨ªa de la sumiller Mar¨ªa Jos¨¦ V¨¢zquez, no vayas a crear un frankenvino imbebible al juntar dos vinos que no se lleven bien.

En el colmo de la personalizaci¨®n, tambi¨¦n puedes pedir que en las etiquetas de las botellas que adquieras ponga lo que t¨² quieras, siempre que te lleves una caja como m¨ªnimo. Yo compr¨¦ tres de tempranillo y cabernet sauvignon L¨®pez Iturriaga Convention con las que di el golpe en el encuentro familiar anual de cada puente de diciembre.

"Al participar en la preparaci¨®n de la mezcla siempre consideraremos el vino un poco nuestro, y lo disfrutaremos m¨¢s", afirma una de las socias del negocio, la en¨®loga de 53 a?os Ana Mart¨ªn. "Adem¨¢s, de alguna manera est¨¢s haciendo cultura de vino. Primero prueban distintas variedades que igual no conoc¨ªan, y luego les orientas sobre unos equilibrios de olores y sabores que hay que buscar. Se pueden sentir en¨®logos por un d¨ªa".

Bodega Urbana naci¨® de las cabezas de Mart¨ªn y otro en¨®logo, Pepe Hidalgo, tras unas cuantas charlas sobre el retroceso del consumo de vino en nuestro pa¨ªs. "Siempre llegabamos a la conclusi¨®n que los del vino nos est¨¢bamos volviendo bastante insoportables", cuenta Mart¨ªn con una sinceridad de agradecer. "En lugar de acercar el vino al consumidor haci¨¦ndolo mas f¨¢cil, se hac¨ªa cada vez m¨¢s elitista, hablando con una terminolog¨ªa para cr¨ªticos, especialistas y muy fan¨¢ticos. Pero ¨¦se es un grupo muy peque?o, y la mayor¨ªa de la gente lo ¨²nico que quiere es disfrutar con el vino. Por eso pensamos que era necesario algo mas asequible, no marear tanto y hacer una venta directa m¨¢s cercana, pero con conocimiento de lo que vendes".

Despu¨¦s de a?os trabajando en el sector, Mart¨ªn e Hidalgo contaban con los conocimientos y los contactos necesarios para encontrar buenos vinos a precios razonables por toda Espa?a. "Los vinos los seleccionamos porque tengan realmente car¨¢cter varietal, y luego porque sean vinos equilibrados, no complicados. Es decir vinos ricos. Este mismo criterio lo aplicamos al seleccionar los vinos embotellados. Todos son de bodegas peque?as, que elaboran vinos especiales y que aportan algo diferente".

Ana Mart¨ªn, que trabaj¨® con la Diputaci¨®n de Vizcaya en los noventa para transformar el txakol¨ª en una bebida de altura, y despu¨¦s fue en¨®loga de Castillo de Cuzcurrita o Traslanzas, se muestra razonablemente satisfecha de c¨®mo ha funcionado su invento hasta ahora. "Los primeros d¨ªas la gente entraba s¨®lo a ver, como quien va a una exposici¨®n. Pero despu¨¦s de tres meses ya hay muchos habituales. Lo que m¨¢s me gusta es que al principio no sab¨ªan c¨®mo pedir, pero ahora entran diciendo: 'Ayer tom¨¦ Menc¨ªa, ?hoy que pruebo?".

Los due?os de Bodega Urbana tienen previsto exportar su modelo a otras ciudades espa?olas y extranjeras, "pero poco a poco". Por tu bien, amado vino que tantos momentos de placer -y de ebriedad- me has dado, espero que sea cuanto antes, y que ¨¦ste u otros negocios te hagan parecer de nuevo una bebida divertida para todos los p¨²blicos.