Lo que hay que comer en verano
El verano es una explosi¨®n de lujuria hortofrut¨ªcola. La abundancia de jugos de los productos de la naturaleza no puede ser m¨¢s adecuada para una ¨¦poca en la que necesitamos meter l¨ªquido en el cuerpo para aguantar el calorazo. Yo dir¨ªa que es mi estaci¨®n favorita en cuanto a frutas y verduras. Aunque claro, tambi¨¦n lo dir¨ªa del oto?o por la calabaza y las setas. Y del invierno por las naranjas y la coliflor. Y de la primavera por las fresas y los esp¨¢rragos. En fin, lo importante es no ser cortimer y tomar los alimentos frescos en su temporada: es m¨¢s barato, m¨¢s sabroso y m¨¢s sostenible. Estas son algunas de las maravillas que nos depara la estaci¨®n, ordenadas m¨¢s o menos por orden de aparici¨®n.
Brevas e higos
Una breva es lo mismo que un higo, pero recogido al principio del verano y no al final. Aunque son un poco m¨¢s sosillas que sus hermanos tard¨ªos, los adictos a la especie no podemos esperar y nos lanzamos a por ellas en cuanto asoman por los mercados. Cualquier cosa que hagas con unas lo puedes replicar con los otros: con jam¨®n, mozzarella y avellanas est¨¢n espectaculares, y al horno, todav¨ªa m¨¢s.
Melocotones, nectarinas y paraguayas
En mi humilde opini¨®n, los melocotones son la fruta estrella del verano. Hay que aprovechar bien junio, julio y el principio de agosto, porque despu¨¦s se empiezan a poner pastosillos (aunque esto depende de las zonas). Tratar de comprar ejemplares de proximidad en mercados o fruter¨ªas tambi¨¦n ayuda a evitar el poliesp¨¢n naranja con aspecto de melocot¨®n habitual en las grandes sufisies. Lo mismo se puede decir de las paraguayas o de las nectarinas. Estas ¨²ltimas son perfectas para comerlas cuando te da el ataque de vagancia y pasas de pelar fruta, porque la piel no da cosica (siempre he alucinado con la gente que se come los melocotones y los paraguayos a pelo: para m¨ª es como meterte un trozo de ante en la boca). Las tres frutas son muy vers¨¢tiles: recomiendo el gazpacho de tomate y melocot¨®n, el melocot¨®n con picotas y vainilla, el lomo relleno con nectarinas, y el sabl¨¦ bret¨®n con nata, higos y nectarinas.
Calabac¨ªn y berenjena
Aunque ya se encuentran en los mercados casi todo el a?o, la ¨¦poca de esplendor del calabac¨ªn y la berenjena es el inicio del verano (una vez m¨¢s, esto depende de las zonas: cuanto m¨¢s al norte, m¨¢s tarde). Ahora puedes disfrutar de los ejemplares que mejor funcionan en la cocina por su sabor y carnosidad. Prueba a salirte del rollo de siempre (berenjena frita, tortilla de calabac¨ªn) con un gazpacho verde con hierbabuena, unos calabaguetis con ajo y guindilla, una ensalada de calabac¨ªn marinado, una parmigiana de berenjenas con morcilla o un arroz especiado con berenjenas y yogur. Y si te va lo cl¨¢sico, aqu¨ª est¨¢ el legendario pisto de mi madre.
Calabaguetis. / AINHOA GOM?
Ciruelas
Pocas cosas existen m¨¢s deliciosas que una ciruela dulce y jugosa. L¨¢stima que, con el tomate, sea uno de los frutos que peor ha llevado el ajetreo de la vida contempor¨¢nea: supongo que al favorecer las variedades m¨¢s productivas se ha dejado atr¨¢s buena parte de su exquisito sabor original. Hoy es dif¨ªcil comerlas buenas, especialmente las claudias, pero todav¨ªa se encuentran ejemplares decentes. Recuerda: la buena ciruela tiene que estar madura, pero firme: ni rebotante cual pelota de ping pong ni blanda como un globo lleno de agua. A m¨ª me encantan solas, pero puedes experimentar con ellas haciendo un bizcocho de ciruelas frescas.
Tomate, pimiento y pepino
O la Sant¨ªsima Trinidad del verano. Se unen en el gazpacho, sin el que parece dif¨ªcil sobrevivir al verano, aunque yo tampoco los desde?ar¨ªa juntos en ensalada. Nunca est¨¢n tan buenos como ahora, especialmente esa especie literalmente destruida en t¨¦rminos de sabor en las ¨²ltimas d¨¦cadas llamada tomate. En esta ¨¦poca del a?o, en algunos mercados o en algunas zonas todav¨ªa sobreviven muestras dignas de la especie, que si se compran en buen estado de maduraci¨®n y no se castigan con la nevera pueden proporcionarnos la satisfacci¨®n que s¨®lo da este prodigio de la naturaleza. Las recetas son infinitas, pero puestos a destacar, propondremos una ensalada de tomate, pimiento verde y pan, un gazpablanco de tomate y almendra, un conejo con pimientos y aceitunas, una sopa fr¨ªa de pepino, yogur y menta o un bonito con tomate.
'Gazpablanco'. / AINHOA GOM?
Jud¨ªas verdes
Si alguna verdura me despista con su temporada es la jud¨ªa verde. En el Pa¨ªs Vasco, donde crec¨ª, siempre ha sido de verano. El Ministerio de Agricultura casi dice lo contrario. En Catalu?a, donde vivo, su precio y calidad sufren unas oscilaciones con las que no hay manera de aclararte de cu¨¢ndo es tiempo y cu¨¢ndo no. En cualquier caso, si las pillas cercanas, tiernas y sin fibras duras ni correas de transmisi¨®n en los bordes -s¨ª, hay algunas con las que te podr¨ªas hacer unas alpargatas-, dat¨¦ un jart¨®n de jud¨ªas verdes con salsa verde y cusc¨²s, t¨®malas con almendras y salsa de miso o en plan m¨¢s normalito con zanahoria, patata y cebolla al vino.
Sand¨ªa y mel¨®n
Puede que no sean las dos frutas con el sabor m¨¢s intenso del mundo, pero la cantidad de l¨ªquido que almacenan en su interior las convierte en campeonas absolutas en los d¨ªas de m¨¢s de 35 grados. La pregunta clave con el mel¨®n es: ?c¨®mo saber si est¨¢ maduro? F¨¢cil: debe oler a mel¨®n -si est¨¢ verde tendr¨¢ escasa o nula fragancia- y la base -la punta opuesta a la del tallo- ha de estar un poco blanda. Dicho esto, es posible que yo sea monguer, pero ambas pruebas siempre me han dado resultados irregulares. En cuanto a la sand¨ªa, seg¨²n dicen en Consumer.es, debe tener una mancha amarillenta en la zona que ha estado en contacto con la tierra -se?al de que no ha madurado en una c¨¢mara frigor¨ªfica-, y al darle golpecitos con los dedos se debe "sentir hueca". Aparte del mel¨®n con jam¨®n, que ya s¨¦ que os va lo viejuno, pod¨¦is hacer un megarrefrescante ajoblanco de mel¨®n; con la sand¨ªa, os emplazo a que no os vay¨¢is de este mundo sin probar la ensalada de sand¨ªa, queso feta y cebolla roja.
Ajoblanco de mel¨®n. / AINHOA GOM?
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