Claudia Villafa?e, la mujer m¨¢s importante en la vida de Maradona y tambi¨¦n en su adi¨®s
Permaneci¨® casada 14 a?os con el futbolista, con quien tuvo a Dalma y Giannina. Se separaron de forma abrupta pero sigui¨® teniendo influencia sobre ¨¦l
Claudia Villafa?e acompa?¨® al astro argentino Diego Armando Maradona hasta despu¨¦s de la muerte. Villafa?e, madre de sus hijas Dalma y Giannina, pidi¨® el divorcio ¡°por abandono del hogar¡± en 2003, tras 14 a?os de matrimonio, pero no dej¨® nunca de jugar un rol clave en la vida del futbolista, quien muri¨® el pasado jueves a los 60 a?os tras un paro cardiorrespiratorio. Contrat¨® a la funeraria, coordin¨® el velatorio en la Casa Rosada, y sostuvo a sus hijas en el entierro celebrado en el cementerio de Bella Vista, 30 kil¨®metros al oeste de Buenos Aires.
De perfil bajo, la empresaria y productora de 58 a?os rehus¨® las c¨¢maras durante estos d¨ªas dolorosos y falt¨® a las grabaciones del reality televisivo gastron¨®mico Masterchef Celebrity. A¨²n as¨ª, todas las miradas se posaron en ella cuando Roc¨ªo Oliva, la ¨²ltima novia de Maradona, la acus¨® de impedirle el paso en el velatorio ¨ªntimo en la Casa Rosada, celebrado antes de que abrieran las puertas para los cientos de miles de fans que quisieron despedirse.
¡°Llegu¨¦ a las tres y media de la ma?ana; me dio la direcci¨®n para saber por d¨®nde entrar una de las hermanas de Diego, y cuando vi que no pod¨ªa ingresar empec¨¦ a llamar a todo el mundo¡±, coment¨® Oliva ante las c¨¢maras. Seg¨²n dijo, todos coincidieron en que la encargada de la puerta era Villafa?e. ¡°No pueden decir que no fue Claudia. Lo sabe todo el mundo. El presidente dec¨ªa ¡®Claudia, ?hacemos esto? ?hacemos lo otro?¡¯ Entonces, ?qui¨¦n manej¨® el velorio?¡±, se pregunt¨®. Claudia me llam¨® a la madrugada cuando yo denunciaba que no me dejaban entrar, diciendo que deje de acusarla, que ella no hab¨ªa prohibido mi ingreso. Los conozco desde hace muchos a?os. El da?o tambi¨¦n se lo hicieron a Diego, no solo a m¨ª. Yo estoy ac¨¢¡±, declar¨®.
Villafa?e no respondi¨® a sus cr¨ªticas ni tampoco lo hizo ante quienes la acusaron de convertir el velatorio en un caos por la decisi¨®n de limitar a diez horas la despedida popular, lo que dej¨® a decenas de miles de personas fuera. Sus opiniones se conocen, en cambio, a trav¨¦s de quienes la rodean.
¡°Hablando con Claudia me dec¨ªa ¡®Cabez¨®n, si entrabas y ve¨ªas d¨®nde falleci¨® Diego, te mor¨ªs¡±, cont¨® Oscar Ruggeri, el defensor de la selecci¨®n argentina campeona del mundo en M¨¦xico 86. Maradona muri¨® solo, alejado de la mayor¨ªa de sus familiares y rodeado por enfermeros y m¨¦dicos que lo atendieron en una casa que hab¨ªa alquilado a las afueras de Buenos Aires para recuperarse de una operaci¨®n de un edema cerebral y de su adicci¨®n al alcohol y a los medicamentos.
Para dolor de los fan¨¢ticos, el velorio p¨²blico en la Casa Rosada fue a caj¨®n cerrado por decisi¨®n de la familia. Quer¨ªan impedir a toda costa que se publicasen fotos del cad¨¢ver, pero empleados de la funeraria burlaron la vigilancia impuesta a¨²n sabiendo que iban a perder su trabajo. Al viralizarse las im¨¢genes, el responsable de la funeraria llam¨® a Villafa?e: ¡°Ella estaba muy enojada, me dijo que esto nunca tendr¨ªa que haber pasado, que es la foto que no quer¨ªan¡±, relat¨®. ¡°Estaba furiosa pero me orden¨® terminar con el servicio tal como estaba previsto: buscar el cuerpo y trasladarlo al cementerio de Bella Vista¡±, remat¨®.
Nacida el 22 de enero de 1962, Villafa?e conoci¨® a Maradona de adolescente, cuando la familia del jugador se traslad¨® a su barrio y comenzaron su noviazgo a mediados de 1977, despu¨¦s de que el entonces futbolista de Argentinos Juniors la sacase a bailar. ¡°Los dos sab¨ªamos que nos espi¨¢bamos, as¨ª que apenas la cabece¨¦, acept¨®. Justo, justo en el momento en que empezamos a bailar, meten el tema Yo te propongo, de Roberto Carlos. ?Espectacular! Me ahorr¨® todas las palabras, que justamente no me sobraban. A partir de ah¨ª, de ese momento exacto, somos El Diego y La Claudia¡±, dijo Maradona. Ella, una personalidad tranquila, alejada de las pol¨¦micas. ?l, siempre al borde.
Villafa?e lo acompa?¨® en 1982 a Barcelona, luego a N¨¢poles y de vuelta a Argentina, donde se casaron en 1989, con Maradona ya convertido en ¨ªdolo nacional. Se mantuvo a su lado a¨²n cuando comenzaron a aparecer sus primeros hijos fuera de la pareja, primero Diego Jr. y despu¨¦s Jana, pero en 1998 se concret¨® una separaci¨®n que tard¨® cinco a?os en formalizarse y m¨¢s a¨²n en ser aceptada por Maradona. ¡°Claudia tiene su vida, arm¨® su vida, su negocio. Se merece todo lo bueno que le pasa. Yo todav¨ªa no termin¨¦ la relaci¨®n; ella la termin¨® con justa raz¨®n. Yo creo que mi ¨²nico amor fue Claudia¡±, dijo Maradona en una entrevista televisiva en 2004, un a?o despu¨¦s del divorcio.
En 2015, Maradona la demand¨® por fraude, estafa y malversaci¨®n de patrimonio. Poco antes, Villafa?e hab¨ªa hecho p¨²blica su relaci¨®n con el productor teatral Jorge Taiana, lo que aliment¨® los rumores que la denuncia se deb¨ªa al despecho. Pero la guerra judicial entre ambos vivi¨® una nueva escalada el a?o pasado, cuando Villafa?e lo denunci¨® por ¡°maltrato psicol¨®gico y emocional¡±. Incluso malherido, el v¨ªnculo resisti¨®.
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