Kim Basinger, de icono sexual a icono de moda a los 66 a?os
La actriz, imagen de Miu Miu, vive su retiro medi¨¢tico sin la ansiedad que sienten otras estrellas en esta etapa vital
Haber cumplido 66 a?os y seguir siendo considerado como un mito er¨®tico es una categor¨ªa en la que juegan muy pocos hombres y mujeres. Kim Basinger conserva a esa edad ¨Ccumplir¨¢ 67 el pr¨®ximo 8 de diciembre¨C el estatus del que no se ha desprendido nunca desde que comenz¨® su carrera primero como Miss Georgia a los 16 a?os y despu¨¦s como modelo, para llegar a su punto m¨¢s ¨¢lgido tras protagonizar en 1986 la pel¨ªcula Nueve semanas y media junto a Mickey Rourke.
Su carrera despeg¨® como un cohete y durante casi una d¨¦cada Basinger parec¨ªa tocada por esa varita que supone un antes y un despu¨¦s en una trayectoria profesional. Sin embargo, el mismo halo sexual que la situ¨® en el camino del ¨¦xito pes¨® como una losa y en alg¨²n momento, cuando el buen hacer como int¨¦rprete se debi¨® imponer al atractivo f¨ªsico, los papeles comenzaron a decaer y su vida personal tambi¨¦n puso palos en el camino. Su desnudo al ritmo de la sugerente canci¨®n interpretada por Joe Cocker no dej¨® que la actriz se mostrase ni siquiera tras conseguir su ¨²nico Oscar a mejor actriz secundaria por su personaje en L.A. Confidential en 1998.
Lo curioso es que en esa d¨¦cada de la vida en la que los medios barajan si relegar para siempre el adjetivo de mujer madura a una se?ora que todav¨ªa tiene cosas por demostrar, Kim Basinger ha regresado para cerrar el c¨ªrculo o abrir en ¨¦l otra etapa. Su retorno ha llegado de la mano de la profesi¨®n en la que comenz¨® y vuelve a ser noticia, tras a?os de retiro y silencio, siendo una de las protagonistas de la campa?a de primavera de la firma italiana Miu Miu, de la que es propietaria y directora creativa Miuccia Prada.
La campa?a se ha bautizado Icons (Iconos), un t¨¦rmino que a la actriz le va como anillo al dedo pero que en manos de la firma de moda cobra otra dimensi¨®n para ella, porque se trata de una marca cuyo estilo choca con los estereotipos que siempre se han asociado a su imagen, porque ya trabaj¨® con ellos antes y porque de alguna manera marca su regreso al foco medi¨¢tico tras una desaparici¨®n no se sabe bien si deseada por su confesa timidez y los ataques de p¨¢nico que sufre desde su juventud o a causa de que la industria cinematogr¨¢fica la apart¨® como opci¨®n a tener en cuenta. Un traje de chaqueta negro y un vestido de peque?os lunares con adornos de strass en los pu?os la han devuelto al set, aunque haya sido al de fotograf¨ªa. Y la est¨¦tica de las im¨¢genes siguen recordando que Kim Basinger est¨¢ dispuesta a dar guerra cuando los sesenta van llegando a su fin.
A lo mejor alguien ve en ella de nuevo ese ¡°cruce entre Marilyn Monroe, Brigitte Bardot y Judy Holliday con el talento de Julie Christie¡±, que describi¨® el productor de la pel¨ªcula Locos por amor o puede que sea la misma Kim Basinger quien no decida volver a pasar por el tsunami de la fama, el mismo que le hizo vivir lo mejor y lo peor de la profesi¨®n de actriz. Porque incluso la pel¨ªcula que supuso su ¨¦xito tambi¨¦n fue su pesadilla, porque la actriz sali¨® llorando de la prueba de casting de Nueve semanas y media y le dijo a su agente que hab¨ªa sido la peor y m¨¢s humillantes experiencia de su vida. El rodaje no fue mejor, porque el director Adrian Lyne quer¨ªa que la actriz viviera al borde del terror durante las diez semanas que dur¨® y no dej¨® que los dos protagonistas tuvieran ning¨²n acercamiento personal fuera del set porque el objetivo es que ¡°tuviera terror¡± al personaje que interpretaba Rourke.
Ella afirm¨® que sali¨® reforzada pero sus ataques de p¨¢nico se convirtieron en agorafobia y las personas de todo el mundo que sab¨ªa que estaban pendientes de sus palabras cuando recogi¨® el Oscar, transformaron su noche triunfal en una de las peores de su vida.
Su vida personal ha sido como sus pel¨ªculas, a veces en lo m¨¢s alto y a veces tocando fondo. Se cas¨® primero con el maquillador Ron Snyder, un matrimonio que dur¨® nueve a?os y que no tuvo hijos. Despu¨¦s lleg¨® a su vida el actor Alec Baldwin con quien contrajo matrimonio en 1993 y se divorciaron en 2002. Los dos estaban en la cresta de la ola y sal¨ªan en todas partes, pero cuando su relaci¨®n acab¨® vivieron un agrio proceso de divorcio en el que las dos partes intercambiaron duras acusaciones tratando de conseguir la custodia de la hija que tienen en com¨²n, Ireland, y que es la ¨²nica de la actriz. Baldwin calific¨® a su exesposa de psic¨®pata y de querer poner contra ¨¦l a la ni?a.
Muchos a?os despu¨¦s, la actriz habl¨® de aquella etapa y de lo desagradable que result¨® para ella y su hija: ¡°Un divorcio es dif¨ªcil para un ni?o sin importar c¨®mo se produzca. Pero el nuestro fue muy p¨²blico y sucio. Crie a Ireland de una manera poco convencional. Solo quer¨ªa que se sintiera libre. Si quer¨ªa invitar a amigos y rayar las paredes con l¨¢pices, me parec¨ªa bien. Hoy estamos bien, la vida sigue¡±, dijo entonces. Pero brome¨® diciendo que deber¨ªa haber elegido mejor sus pel¨ªculas porque en una de ellas conoci¨® a su exmarido. Para rodarla renunci¨® a protagonizar el filme Durmiendo con mi enemigo. ¡°?No es curioso?¡±, afirm¨® entonces Basinger, ¡°luego me fui precisamente a dormir con el enemigo¡±. En los ¨²ltimos a?os mantiene una relaci¨®n sentimental con Mitch Stone, quien fue su peluquero, y aunque durante 2020 ha habido rumores de ruptura, no hay datos ni declaraciones que lo confirmen.
Lo realmente curioso es que la mujer que elev¨® la temperatura de medio mundo es en realidad una t¨ªmida compulsiva afectada por el miedo esc¨¦nico durante toda su vida profesional. La actriz no lo ha ocultado nunca e incluso ha reconocido que este problema la ha obligado en ocasiones a recluirse en casa durante meses. Tampoco ha rehuido reconocer que en sus comienzos consumi¨® estupefacientes y que tuvo que luchar contra sus adicciones durante mucho tiempo para librarse de ellas. Siente pasi¨®n por los animales y vivi¨® una t¨®rrida aventura con el cantante Prince en la ¨¦poca en la que rod¨® Batman, al final de la d¨¦cada de los ochenta.
Todo aquello forma parte de su vida pero tampoco la perturba ahora. Ese retiro que algunas estrellas casi no pueden soportar cuando los focos dejan de iluminarlas, Kim Basinger lo vive con tranquilidad. Ha aceptado volver a ejercer como modelo como en 2017 acept¨® un papel en Cincuenta sombras m¨¢s oscuras solo por complacer a su hija. Lo dijo claramente en una entrevista: ¡°No siento presi¨®n por no estar donde sol¨ªa¡± y adem¨¢s le importa bien poco lo que la gente piense sobre ella, por tanto las veces que veamos o escuchemos a Kim Basinger ser¨¢ porque se siente segura y c¨®moda con lo que hacer o porque su hija ha vuelto a convencerla de nuevo.
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