El escupitajo fantasma de Harry Styles a Chris Pine es el nuevo vestido azul o dorado
Miles de usuarios de las redes quisieron ver un enfrentamiento entre los dos actores en el pase en Venecia de ¡®Don¡¯t Worry Darling¡¯. El representante de Pine se ha visto obligado a desmentir que el esputo tuviera lugar, pero la historia ya se hab¨ªa viralizado
?Escupi¨® Harry Styles a Chris Pine en el festival de cine de Venecia? Miles de usuarios llevan 24 horas haci¨¦ndose esta pregunta en las redes sociales, pero ahora hay una respuesta oficial. En un comunicado, el representante de Pine ha negado que tal incidente tuviera lugar, calific¨¢ndolo de ¡°historia rid¨ªcula¡±. ¡°Es una completa invenci¨®n, el resultado de una extra?a ilusi¨®n en l¨ªnea claramente enga?osa y que permite la especulaci¨®n tonta¡±, reza el escrito. Pero, ?por qu¨¦ esta historia rid¨ªcula, esta historia hipot¨¦tica, esta no historia, ha monopolizado la conversaci¨®n de internet en las ¨²ltimas horas?
Todo surge por un v¨ªdeo. En la presentaci¨®n de Don¡¯t Worry Darling, el esperado thriller de la actriz y directora Olivia Wilde, se ve a Styles acerc¨¢ndose a Pine para tomar asiento en la sala de cine. Cuando Styles se va a acomodar en su silla, reclin¨¢ndose ante su compa?ero, hace un sutil, casi invisible, movimiento con la boca. No es esto lo que llama la atenci¨®n del espectador, sino la reacci¨®n de Pine. En ese momento el actor mira hacia su regazo, deja de aplaudir, sacude la cabeza y sonr¨ªe con resignaci¨®n. El v¨ªdeo es suficientemente ambiguo y de mala calidad para dar margen a la especulaci¨®n. ?Le ha lanzado un escupitajo? ?Es una broma interna entre ellos o se trata de un gesto hostil? El esputo fantasma se convirti¨® en redes en el nuevo vestido azul o dorado que cop¨® la conversaci¨®n en febrero de 2015. Se comparte porque el incidente interpela directamente al espectador, anim¨¢ndole a opinar sobre su existencia.
¡°No creo que nadie haya visto el escupitajo en la presentaci¨®n¡±, informa Tommaso Koch, enviado especial de EL PA?S a Venecia. El periodista reconoce haber palpado cierta tensi¨®n en el evento, pero ni rastro del gargajo misterioso. ?l se enter¨® del supuesto incidente, como muchos de sus compa?eros, al d¨ªa siguiente, en las redes sociales. En el v¨ªdeo original, que acumula cerca de mill¨®n y medio de visionados (y eso que hay cientos de r¨¦plicas en YouTube y redes sociales), hay margen para intuir un salivazo. Pero r¨¢pidamente salieron otras tomas de la escena desde distintos ¨¢ngulos, que ponen en duda el relato original.
En uno de esos v¨ªdeos, publicado por el subdirector de la revista de cine Variety, se ve¨ªa a los actores charlando tranquilamente segundos despu¨¦s de que el supuesto gargajo fuera lanzado. En otro, posterior a la proyecci¨®n de la pel¨ªcula, se ve¨ªa a los compa?eros sonre¨ªr y bromear con aire distendido. A pesar de todos estos v¨ªdeos, la etiqueta #spitgate sigui¨® estando entre lo m¨¢s comentado de Twitter. La b¨²squeda de las palabras Harry Styles goat (cabra en ingl¨¦s) creci¨® un 2.450% seg¨²n Google Trends. ?Por qu¨¦ la gente sigui¨® ¡ªy sigue¨D comentando un incidente ya desmentido?
En su libro, La ciencia de contar historias, el periodista Will Storr se?ala la importancia de la causalidad para que una historia triunfe y se haga viral. ¡°El cerebro no puede evitar establecer conexiones de causa y efecto. Lo hace autom¨¢ticamente¡±, argumenta. Storr propone un experimento al lector con dos palabras: pl¨¢tanos, v¨®mito. ¡°El psic¨®logo Daniel Kahneman describe lo que acaba de suceder en nuestro cerebro, que esboza un guion en el que los pl¨¢tanos han causado el malestar¡±, argumenta. ¡°El cerebro establece conexiones de causa y efecto, incluso cuando estas son inexistentes¡±.
Las reacciones causa-efecto provocan la curiosidad del p¨²blico. Es lo que sucede con el v¨ªdeo de Styles y Pine, donde la reacci¨®n de este ¨²ltimo es evidente. Est¨¢ el efecto, pero falta la causa. El espectador tiende a rellenar ese hueco de informaci¨®n y la existencia de un salivazo encaja a la perfecci¨®n no solo en el v¨ªdeo, sino en el relato que se ha ido creando en los ¨²ltimos meses sobre la pel¨ªcula.
Don¡¯t Worry Darling est¨¢ siendo una de las pel¨ªculas m¨¢s comentadas de la temporada por motivos que trascienden lo cinematogr¨¢fico. Su rodaje y promoci¨®n han suscitado una serie de pol¨¦micas y noticias que dar¨ªan para un documental en s¨ª mismo. La principal es el supuesto enfrentamiento entre Olivia Wilde, su directora, y Florence Pugh, su protagonista. Esta ¨²ltima ha anunciado que no participar¨¢ en la promoci¨®n del filme y, durante su presentaci¨®n en Venecia, se salt¨® la rueda de prensa y solo acudi¨® a la alfombra roja.
Wilde tambi¨¦n se enfrent¨® con otro actor, Shia LaBeouf, a quien acab¨® despidiendo del proyecto. Ella desliz¨® a Variety que los motivos estaban relacionados con el comportamiento de LaBeouf. ?l, despu¨¦s, public¨® una carta abierta para dar su versi¨®n de la historia. ¡°Yo me fui de tu pel¨ªcula (¡) T¨² y yo sabemos los motivos de mi salida¡±, dec¨ªa. Adem¨¢s, comparti¨® un v¨ªdeo en el que se puede o¨ªr a la cineasta animando a que LaBeouf y Pugh pudieran ¡°hacer las paces¡±. No se refer¨ªa a la actriz como Pugh sino como ¡°Miss Flo¡±, un apodo que deslizaba en un tono ir¨®nico que no ha ayudado a destensar el clima.
little miss olivia said ¡°scheduling conflicts¡± and here flo is ??? pic.twitter.com/G87NYcijvB
— mads ? MADE EYE CONTACT WITH HARRY (@womanrry_) September 5, 2022
Finalmente, Harry Styles sustituy¨® a LaBeouf. Pero no solo. Semanas despu¨¦s de la entrada en el proyecto del cantante, la directora anunci¨® el fin de su relaci¨®n de nueve a?os con el actor Jason Sudeikis. Unos meses despu¨¦s empez¨® a ser fotografiada junto a Styles en actitud cari?osa. Sus apariciones conjuntas se han ido repitiendo a media que la relaci¨®n se afianzaba, siempre a la vista del p¨²blico.
Todas estas noticias han ido creando un relato de desencuentros, rencillas y rivalidades en torno a todos los implicados en la pel¨ªcula. Hasta ahora todas las noticias y las especulaciones se han producido en diferido y de forma indirecta, pero el festival de Venecia ha supuesto una posibilidad para ver en vivo y en directo a todos los implicados y analizar c¨®mo interact¨²an entre ellos.
La pel¨ªcula ven¨ªa precedida por una expectaci¨®n brutal y todas las c¨¢maras y los m¨®viles se han centrado en sus int¨¦rpretes para colgar im¨¢genes que despu¨¦s han sido diseccionadas y analizadas hasta la saciedad por los internautas. As¨ª se ha comentado mucho c¨®mo Olivia Wilde y Florence Pugh se sentaron a cuatro asientos de distancia, demasiado lejos para lanzarse un esputo, pero tambi¨¦n para mirarse a la cara durante los tres o cuatro minutos que dur¨® el aplauso del p¨²blico. Aqu¨ª, una vez m¨¢s, se viraliz¨® un primer v¨ªdeo donde se evitaba el contacto visual, pero un segundo montaje, m¨¢s largo y desde otro ¨¢ngulo, desmont¨® este relato.
Florence Pugh refuses to make eye contact with Olivia Wilde during the 4-minute #Venezia79 standing ovation for #DontWorryDarling. pic.twitter.com/Xi6lJyZHbj
— Ramin Setoodeh (@RaminSetoodeh) September 5, 2022
Tambi¨¦n llam¨® la atenci¨®n la actitud, supuestamente ausente, de Pine durante la rueda de prensa, o el v¨ªdeo que public¨® la estilista de Florence Pugh, que mostraba a la actriz brindando con un Spritz mientras en la rueda de prensa sus compa?eros justificaban su ausencia por problemas de agenda. Fue all¨ª donde Olivia Wilde intent¨® acallar las distintas pol¨¦micas con una frase que resume muy bien la deriva digital de su pel¨ªcula.¡°En cuanto a todo el cotilleo, internet se alimenta de eso, est¨¢ suficientemente bien alimentado y no voy a contribuir¡±. Tampoco parece que haga falta.
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