Nuevo desplante (virtual) a los duques de Sussex

¡°El periodo de Luto Real tras el fallecimiento de Su Majestad la Reina Isabel ha finalizado¡±, anunciaba el martes en su perfil de Twitter la familia real brit¨¢nica. Y la vuelta a la normalidad ha tra¨ªdo algunos cambios. Enrique de Inglaterra y Meghan Markle han sido relegados a un segundo plano. Otra vez. Primero sucedi¨® de forma f¨ªsica, durante el funeral de Isabel II, cuando los duques de Sussex tuvieron que sentarse en segunda fila, rodeados de primas y royals menores. Ahora acaba de suceder de manera virtual. La p¨¢gina web de la familia real brit¨¢nica se ha actualizado, y para encontrar a Enrique ¡ªquinto en la l¨ªnea de sucesi¨®n al trono¡ª y a su mujer hay que hacer un largo scroll. Antes de dar con la medi¨¢tica pareja desfilan por la pantalla las caras de nobles grises de importancia secundaria, tanto en el palacio como en las revistas. Gente como la condesa de Wessex, la princesa Ana, la duquesa de Gloucester, el duque de Gloucester, la princesa Alejandra o el duque de Kent. Enrique y Meghan, que se alejaron de sus deberes reales hace dos a?os, comparten el ¨²ltimo tramo de la pantalla con el pr¨ªncipe Andr¨¦s, ca¨ªdo en desgracia y despojado de sus honores desde que fuera acusado de abusar sexualmente de una menor.

La relaci¨®n de los duques de Sussex con el resto de la familia real brit¨¢nica ha sido distante desde 2020, cuando renunciaron a sus funciones y se mudaron a EE UU entre acusaciones de racismo, en un episodio traum¨¢tico que hizo tambalear los cimientos de la corona brit¨¢nica. Durante los fastos por el funeral de Isabel II se pudo intuir cierto acercamiento. Los flamantes pr¨ªncipes de Gales, Guillermo y Kate Middleton, salieron a saludar a la multitud, acompa?ados de Enrique y Meghan, en una imagen in¨¦dita desde hac¨ªa a?os. En su primer discurso a la naci¨®n, Carlos III mencion¨® expresamente a los duques de Sussex, manifestando su cari?o, pero subrayando que su lugar estaba lejos del trono. ¡°Quiero tambi¨¦n expresar mi amor por Enrique y Meghan mientras contin¨²an construyendo sus vidas en el extranjero¡±, dijo el nuevo rey.

Desde que terminaran los actos p¨²blicos por la muerte de Isabel II, el inter¨¦s medi¨¢tico se ha trasladado a la web oficial de la familia real brit¨¢nica, donde cada movimiento se interpreta como un acto de acercamiento o (casi siempre) un nuevo desplante a los duques de Sussex. Esta degradaci¨®n en la p¨¢gina parece encajar en este ¨²ltimo tipo. La p¨¢gina ya se actualiz¨® tras la muerte de la monarca y entonces no se les degrad¨®. El duque y la duquesa de Sussex se encontraban a¨²n en la mitad de la p¨¢gina, por debajo de los miembros m¨¢s importantes de la realeza, seg¨²n informa el peri¨®dico brit¨¢nico Daily Mail.

Este cambio se suma a otro que no acaba de llegar. Los funcionarios del palacio de Buckingham no han aclarado hasta ahora si los hijos de Enrique y Meghan, Archie y Lilibet, de uno y dos a?os, respectivamente, recibir¨¢n o no el tratamiento de pr¨ªncipe y princesa, como el protocolo suele permitir a los nietos del soberano. Todo parece indicar que no ser¨¢ as¨ª, pues su estatus no ha cambiado en la web oficial, como s¨ª lo ha hecho el de otros miembros de la casa real.

Lo que queda del a?o se presenta movido para la familia real brit¨¢nica. Carlos III se encuentra inmerso en la operaci¨®n Golden Orb (orbe de oro, en espa?ol). As¨ª se ha bautizado el proyecto para organizar su coronaci¨®n, que tendr¨¢ lugar en 2023. En este tiempo tendr¨¢ que mejorar la imagen que tienen de ¨¦l los brit¨¢nicos y los habitantes de sus excolonias, mucho m¨¢s deteriorada que la de su madre. Por su parte, el pr¨ªncipe Enrique pretende publicar una biograf¨ªa este oto?o, un libro que la editorial Penguin Random House (que habr¨ªa pagado 20 millones de d¨®lares por los derechos) describe como ¡°¨ªntimo y sincero¡±. ¡°El rey tendr¨¢ que decidir si pide ver las pruebas previas a la publicaci¨®n o si recurre a los abogados para amenazar con acciones que impidan que se impriman secretos familiares sensibles o acusaciones controvertidas¡±, advert¨ªa The Guardian hace unas semanas. Los movimientos en la web oficial de la familia real brit¨¢nica son as¨¦pticos y silenciosos. Pueden incluso parecer anecd¨®ticos. Pero dan una pista de c¨®mo se est¨¢n colocando las fichas y avanzan c¨®mo se desarrollar¨¢ la partida en los pr¨®ximos meses.