El pr¨ªncipe Jorge de Cambridge cumple 10 a?os: un ni?o que ya sabe que un d¨ªa ser¨¢ rey
El segundo en la l¨ªnea de sucesi¨®n al trono brit¨¢nico ya es consciente del papel que tendr¨¢ que ejercer en el futuro y acompa?a a sus padres, los pr¨ªncipes Guillermo y Kate de Gales, en gran parte de los actos que engloban su agenda real, donde irradia naturalidad
No todos los d¨ªas uno se entera de que su futuro ya est¨¢ escrito y que forma parte de una de las familias m¨¢s importantes e hist¨®ricas del Reino Unido. El pr¨ªncipe Jorge de Cambridge lo supo una vez cumplidos los siete a?os. Ahora, con los 10 reci¨¦n estrenados, el segundo en la l¨ªnea de sucesi¨®n al trono brit¨¢nico ya acostumbra a acompa?ar a sus padres, los pr¨ªncipes de Gales, en la agenda real.
El nieto mayor del rey Carlos III ya es conocedor del papel que tendr¨¢ en el futuro, pero sus padres prefieren que siga creciendo como un ni?o, aunque aprendiendo cada d¨ªa la responsabilidad que tendr¨¢ m¨¢s adelante. Guillermo y Kate, desde su nacimiento, han querido criar a Jorge en la intimidad, aun sabiendo que no era una tarea f¨¢cil. Para ello, se han encargado de controlar la imagen que quieren dar de su hijo: ellos son los que difunden las fotograf¨ªas y el contenido relacionado con sus tres v¨¢stagos. De esta manera, evitan las filtraciones de periodistas o de trabajadores cercanos.
En cuanto a su educaci¨®n, el pr¨ªncipe Jorge y sus hermanos, Carlota, de ocho a?os, y Luis, de cinco, comenzaron una nueva etapa el pasado mes de septiembre, cuando ingresaron en la exclusiva escuela Lambrook ¡ªa unos 20 minutos en coche de Windsor¡ª. Un cambio que lleg¨® tras el traslado de la familia a Adelaide Cottage, una casa restaurada en 2015 situada dentro de la localidad y cerca del castillo donde, hasta su fallecimiento, residi¨® la reina Isabel II. Ahora, parece que el heredero al trono seguir¨¢ los pasos de su padre y de su t¨ªo, el pr¨ªncipe Enrique. El pasado mes de junio, medios brit¨¢nicos captaron im¨¢genes del matrimonio, junto a su hijo mayor visitando el exclusivo colegio privado de Eton.
Pero este cambio no ser¨ªa inmediato, puesto que la edad m¨ªnima de ingreso al internado es a partir de los 13 a?os. Aun as¨ª, las familias deben registrar a sus hijos antes del 30 de junio del a?o en el que estos cumplen los 10. En el caso de Jorge, ya tendr¨ªan que haber formalizado la matr¨ªcula. Seg¨²n se?ala la propia p¨¢gina web del centro, la educaci¨®n de un alumno gira en torno a los 54.000 euros anuales, lo que lo convierte en el sexto m¨¢s caro del pa¨ªs.
El pr¨ªncipe Guillermo de Inglaterra, para muchos, es el s¨ªmbolo presente y futuro de la estabilidad de la monarqu¨ªa brit¨¢nica; y el pr¨ªncipe Jorge es la imagen lejana de la instituci¨®n. Con el ascenso del rey Carlos III, la corona est¨¢ comenzando un proceso de renovaci¨®n en el que es importante adaptarse a las innovaciones y ser cercano al pueblo, ya sea a trav¨¦s de redes sociales o en sus eventos oficiales. A la vez que los hijos de los pr¨ªncipes de Gales tienen una infancia lo m¨¢s normal posible ¡ªdentro de las limitaciones de ser miembro activo de la familia real brit¨¢nica¡ª, estos le van sumergiendo poco a poco en sus deberes como parte de los Windsor.
Este a?o, en la coronaci¨®n de su abuelo Carlos III, tuvo un papel imprescindible. El pr¨ªncipe Jorge se convirti¨® en Paje de Honor y cumpli¨® con sus obligaciones, a la par que era el centro de todas las miradas: acompa?¨® al monarca por el pasillo y sostuvo su larga capa. De hecho, no fue la primera vez que ejerci¨® de paje: en la boda del pr¨ªncipe Enrique y Meghan Markle, hace un lustro, form¨® parte del s¨¦quito que acompa?¨® a la duquesa de Sussex hasta el altar.
Aunque cada uno de sus pasos est¨¢ medido al mil¨ªmetro, hay otros que son imposibles de controlar. Seg¨²n desvel¨® la especialista en la casa real brit¨¢nica Katie Nicholl en su libro The New Royals, Guillermo y Kate est¨¢n intentando criar a sus hijos para que sean ¡°conscientes del papel que tienen¡±. Sin embargo, estas revelaciones tambi¨¦n han despertado el car¨¢cter del segundo en la l¨ªnea de sucesi¨®n. Un d¨ªa en el colegio, seg¨²n la versi¨®n de Nicholl, quiso dejar claro a sus compa?eros de clase qui¨¦n era: ¡°Mi pap¨¢ ser¨¢ rey, as¨ª que es mejor que tengas cuidado¡±.
Su futuro est¨¢ decidido. Si nada cambia, ser¨¢ rey. Pero hasta el momento en el que se suba al trono ¡ªprimero su padre tendr¨ªa que convertirse en monarca¨D, ¨¦l ser¨¢ el due?o de su vida y podr¨¢ ejecutar las decisiones que ¨¦l quiera. Lo que podr¨ªa estar en peligro, tal y como aseguran medios brit¨¢nicos como Daily Mail, es su paso por el servicio militar, algo que hasta ahora era una tradici¨®n y que todos sus antepasados cumplieron.
Momentos para el recuerdo
La llegada del primer hijo del pr¨ªncipe Guillermo y Kate Middleton provoc¨® una oleada de expectaci¨®n en Reino Unido. Un d¨ªa despu¨¦s de su nacimiento ¡ªel 22 de julio de 2013¡ª, los pr¨ªncipes de Gales presentaron p¨²blicamente al que un d¨ªa se convertir¨¢ en rey. ¡°Estamos todav¨ªa pensando el nombre. Se parece a ella, gracias a Dios¡±, coment¨® Guillermo a los periodistas aglutinados a las puertas del hospital de St. Mary. Cuatro semanas despu¨¦s de su llegada, fueron ellos mismos los que se encargaron de difundir las primeras im¨¢genes oficiales del peque?o, tomadas por Michael Middleton, padre de Kate. Un gesto que dar¨ªa inicio a una larga tradici¨®n en la que son ellos los que deciden que s¨ª y que no publicar de sus hijos.
Uno de los momentos m¨¢s ic¨®nicos del peque?o Jorge fue su recepci¨®n al por entonces presidente estadounidense Barack Obama cuando ten¨ªa dos a?os. Lo hizo en pijama y con un albornoz. Con ese tierno atuendo, el pr¨ªncipe le dio un apret¨®n de manos y le mostr¨® c¨®mo jugaba con el caballito de madera que el matrimonio Obama le hab¨ªa regalado por su nacimiento.
Jorge es un aut¨¦ntico fan¨¢tico del f¨²tbol y, como no pod¨ªa ser de otra manera, muestra su apoyo a la selecci¨®n inglesa. Se dej¨® ver junto a su familia en la final de la Eurocopa 2020 entre Inglaterra e Italia, que tuvo lugar en el estadio de Wembley. El heredero brit¨¢nico no pudo contener la emoci¨®n durante el partido. Pero la felicidad se torn¨® a tristeza cuando su equipo cay¨® derrotado en la tanda de penaltis. Las redes sociales no tardaron en hacerse eco de las im¨¢genes en las que se ve¨ªa al pr¨ªncipe decepcionado y siendo consolado por su padre.
Algo similar sucedi¨® el pasado fin de semana, cuando el pr¨ªncipe Jorge asisti¨® junto a su hermana Carlota y sus padres a la final de Wimbledon entre Carlos Alcaraz y Novak Djokovic. El partido dur¨® m¨¢s de cuatro horas, en las que se vio a los hermanos disfrutando del juego, cruzando los dedos y celebrando la victoria del espa?ol. Momentos de naturalidad que se alejan de la pomposidad de la corona y que acercan al pueblo a su futuro heredero, al que han visto nacer y crecer.
Con tan solo 10 a?os, el segundo en la l¨ªnea de sucesi¨®n al trono brit¨¢nico ya se ha convertido en uno m¨¢s dentro de la agenda real. La idea de los pr¨ªncipes de Gales de acercar a su familia a sus seguidores est¨¢ sirviendo para que, aquellos que quieran, conozcan los entresijos y sientan m¨¢s de cerca al matrimonio y su familia, incluyendo la ternura que destilan sus tres hijos.
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