La reinvenci¨®n de Bobbi Brown despu¨¦s de Bobbi Brown
La aclamada como ¡°la maquilladora del pueblo¡± vuelve a triunfar con una nueva firma cosm¨¦tica, Jones Road, que ha expandido el evangelio del ¡®no makeup-makeup¡¯ con el que comenz¨® su culto en los a?os noventa a las redes sociales
El d¨ªa que a Bobbi Brown (Chicago, 66 a?os) le pusieron sobre la mesa el contrato de no competencia, no tuvo demasiadas dudas. Acababa de dar el pelotazo de su vida, ten¨ªa 38 a?os y pens¨® que, para cuando expirara, ya habr¨ªa cumplido los 60 y no tendr¨ªa ganas de seguir trabajando. As¨ª que firm¨®. En octubre de 2020, justo al vencer aquel acuerdo draconiano que le impidi¨® poner sus conocimientos al servicio de una firma cosm¨¦tica que no fuera la que llevaba su nombre durante un cuarto de siglo, mand¨® hacerse un colgante con la fecha 10/20, que luce al cuello desde entonces para recordarle lo que significa ser libre.
¡°Primero est¨¢ el sentimiento de p¨¦rdida. Despu¨¦s, viene la rabia¡±, ha reconocido la que una vez fuera aclamada como ¡°la maquilladora del pueblo¡±. Brown, que en 1995 vendi¨® su marca de belleza hom¨®nima al gigante Est¨¦e Lauder por cerca de 68 millones de euros ¨Dcasi 145 millones al cambio actual seg¨²n la inflaci¨®n acumulada¨D, volvi¨® por sus fueros hace tres a?os, a sus 63, con una nueva empresa cosm¨¦tica que la ha resarcido con creces de las penurias corporativas. Jones Road, se llama el arma maqueada de su venganza. En 2021, ingresaba alrededor de 20 millones de euros, multiplicando por 10 los apenas dos invertidos en el lanzamiento de la empresa junto a su socio y marido, el abogado inmobiliario Steven Plofker. Hoy es noticia porque se estima que los beneficios obtenidos al final de este ejercicio fiscal alcanzar¨¢n los 100 millones, seg¨²n cifra la consultora Beauty Matters. ¡°Me hab¨ªa prometido no involucrarme otra vez en una compa?¨ªa multimillonaria, pero parece que ese es el camino¡±, asegur¨® en una reciente entrevista para The Financial Times a prop¨®sito de su fulgurante ¨¦xito.
El caso es que con Brown siempre ha sido igual. Reci¨¦n estrenada en la pasarela neoyorquina y las sesiones fotogr¨¢ficas de rigor, la maquilladora (artista maquilladora, en realidad, licenciada en Maquillaje Teatral por el Emerson College de Boston, en 1979) lamentaba los productos que hab¨ªa en el mercado ¡ªdemasiado grasos, demasiado brillantes, malolientes incluso¡ª, y le pidi¨® a un qu¨ªmico de Kiehl¡¯s que testara alguna de las formulaciones que estaba ensayando. La respuesta del experto fue que crearan una peque?a l¨ªnea de base hidratante y fueran a medias. Comenzaron a distribuirla entre modelos y amigas y entonces la revista Glamour se interes¨® por el hallazgo. Y luego los grandes almacenes Bergdorf Goodman. Para 1991, ya operaba en un laboratorio en el barrio de Queens con etiqueta propia, Bobbi Brown Essentials, germen de Bobbi Brown Cosmetics. En solo cuatro a?os, ten¨ªa detr¨¢s a Est¨¦e Lauder, preocupado por el terreno que le estaba comiendo en los centros comerciales de todo Estados Unidos.
En los minimalistas a?os noventa, del menos es m¨¢s, Bobbie Brown era la marca de culto a la que recurrir, la del no makeup-makeup (maquillaje-no maquillaje). Eso, sumado a una revolucionaria colecci¨®n de labiales formulada bas¨¢ndose en los colores naturales de todo tipo de bocas (he aqu¨ª una pionera, no solo en poner la belleza comercial al alcance de distintas etnias, tambi¨¦n en saber qu¨¦ necesita cada cual), la convirtieron en un fen¨®meno. ¡°Yo no invent¨¦ el l¨¢piz de labios, pero, de alguna manera, lo reinvent¨¦¡±, alardea, no sin raz¨®n. Al final, la adquisici¨®n por Est¨¦e Lauder parec¨ªa el paso natural, sobre todo porque a la fundadora se le prometi¨® la direcci¨®n creativa sine die, lo que le permit¨ªa continuar innovando con un colch¨®n financiero inagotable que le quitaba de preocupaciones. Hasta que se dio de bruces contra el muro ejecutivo masculino.
Brown a¨²n recuerda verse en las salas de juntas cercada por hombres blandiendo los dedos frente a su cara, como si fuera una cr¨ªa que no se enteraba de nada. Se limit¨® a observarlos y a aprender lo que no hab¨ªa que hacer. En 2006, con la marca facturando 500 millones de euros, consigui¨® llevarse la oficina fuera del complejo corporativo, permitiendo a sus empleados ir en vaqueros y llevar las mascotas al trabajo. En 2016, harta de que le pasaran por encima con productos cualquiera que se sacaban de la manga sin consult¨¢rselo, sinti¨® que no pod¨ªa seguir tirando del carro (ya en los 1.000 millones) y cogi¨® la puerta, con el acuerdo de no competencia en vigor. ¡°Aquella ya no era la marca que hab¨ªa creado para ser algo ¨²nico¡±, admit¨ªa en una entrevista con la revista Inc. el pasado mayo. Pas¨® los siguientes dos a?os rabiando, atada de manos, pero entonces se sac¨® el t¨ªtulo de nutricionista y, de nuevo, eureka: en 2018 lanzaba Evolution_18, una l¨ªnea de bienestar y belleza interior (vitaminas, complejos de col¨¢geno) que la pondr¨ªa sobre la pista que concluir¨ªa en Jones Road. ¡°Estaba en un congreso sobre cosm¨¦tica org¨¢nica en California y pens¨¦: ¡®Esto puedo hacerlo mejor¡±.
@justbobbibrown No Makeup Makeup 101 with @Jones Road Beauty
? original sound - Bobbi Brown
En Montclair, acomodada localidad suburbial de Nueva Jersey donde tiene su hogar desde que form¨® su familia, Bobbi Brown ya no es una ama de casa desesperada que mata el tiempo redecorando hoteles postineros (como The George, que remoz¨® con su marido). Adem¨¢s de dividendos, su actual empe?o cosm¨¦tico suma ya 43 empleados y sigue expandiendo sus dominios en redes sociales, apelando por igual a j¨®venes zeta sin recursos que a boomers de posibles, hablando directamente a las mujeres. ¡°Hola, aqu¨ª Bobbi Brown. Soy nueva en TikTok, as¨ª que ten¨¦is que ayudarme. Decidme qu¨¦ os gustar¨ªa ver¡±, se presentaba a principios de 2022.
Desde entonces, el hashtag #NoMakeupMakeupLook lleva acumuladas m¨¢s de ocho millones y medio de visitas. ¡°La verdad es que no tenemos un plan de negocios o una estrategia a largo plazo. Podemos crecer o no¡±, dice. Lo que s¨ª tiene claro es que no desea m¨¢s inversores. Tampoco ceder a las comodidades del mercado. Y, mucho menos, venderse a otro gran conglomerado. ¡°Resulta agradable saber que estas cosas en las que pierdo el tiempo inspiran a la gente¡±, concluye la maquilladora. Ojo, porque en septiembre lanzar¨¢ la primera fragancia de Jones Road.
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