Del ¡°gotel¨¦ a lo bestia¡± a muros con cicatrices: ?ha llegado el fin de las paredes perfectas y aburridas?
En respuesta a las paredes lisas, neutras y anodinas que nos dej¨® el reinado del estilo escandinavo, llegan un volumen y unas texturas que generan matices y sensaciones que hacen mucho m¨¢s rico un ambiente
Si lleva tiempo pensando en quitar el gotel¨¦ para alisar las paredes, se le est¨¢ pasando el momento. A no ser que est¨¦ convencido de querer un estilo neutro, quiz¨¢ deber¨ªa valorar si esa inversi¨®n podr¨ªa ir en otra direcci¨®n que aporte m¨¢s riqueza al dise?o de sus espacios. Una primera opci¨®n para generar una textura sugerente y, al mismo tiempo, perder de vista esa gota que hace da?o a los ojos es no tratar de quitarla sino ocultarla bajo otro material que lo permita. Por ejemplo, una capa de mortero de arcilla en la que se perciba la huella y textura de su aplicaci¨®n artesanal, en lugar de optar por un acabado liso.
Una superficie con las imperfecciones de una aplicaci¨®n manual o con un acabado rugoso aporta una mayor profundidad a un espacio que una pared lisa, generando matices, sensaciones y una reflexi¨®n de la luz que hace mucho m¨¢s rico un ambiente, ya sea buscando una est¨¦tica org¨¢nica, natural, vern¨¢cula, industrial o gr¨¢fica. Los acabados texturizados se pueden conseguir de muchas maneras, incluso a trav¨¦s de ciertos revestimientos gracias a las nuevas tecnolog¨ªas de producci¨®n. Si se est¨¢ en un proceso de reforma o de nueva construcci¨®n conviene examinar qu¨¦ puede ser interesante dejar en estado crudo o d¨®nde se podr¨ªan aplicar revocos o enlucidos m¨¢s t¨¢ctiles, en lugar de perfectamente lisos.
En un extremo de esta creciente texturizaci¨®n de las paredes estar¨ªa la Villain House de la arquitecta Cl¨¤udia Raurell: la rehabilitaci¨®n de una barraca autoconstruida en la falda norte de Montju?c (Barcelona) que ¡°celebra un brutalismo desnudo, honesto y que expone sus cicatrices sin complejos¡±, explica Cl¨¤udia. La materialidad de las texturas ranuradas y rugosas que presentan algunos de sus muros tiene la intenci¨®n de homenajear a la autoconstrucci¨®n original. Por eso, tambi¨¦n en el interior todo en esta vivienda se ti?e de gris, ¡°desplegando un amplio espectro de su (des)tonificaci¨®n y texturizaci¨®n¡±.
¡°Se trata de un muro de carga de bloque de hormig¨®n. El estado cr¨ªtico que presentaban las medianeras nos oblig¨® a reforzarlas con un nuevo muro estructural tangente a dichas medianeras. Inicialmente, este muro iba a ser de bloque de hormig¨®n liso, pero como la materialidad del proyecto se basaba en la destonificaci¨®n y texturizaci¨®n del gris, estuvimos investigando las diferentes tipolog¨ªas de bloque que el mercado nos ofrec¨ªa, hasta encontrar este de hormig¨®n ranurado¡±, explica la arquitecta. La riqueza sensorial y est¨¦tica que aporta al dise?o interior es incuestionable.
En esta misma l¨ªnea de acabado s¨²per rugoso, el estudio madrile?o Burr ha recuperado para algunos de sus proyectos una t¨¦cnica conocida como tirolesa: una especie de ¡°gotel¨¦ a lo bestia¡±, extremadamente rugoso, que seg¨²n c¨®mo se aplique, d¨®nde y en compa?¨ªa de qu¨¦, puede generar un resultado muy interesante a nivel de texturas, percepci¨®n y contrastes. Tanto en su proyecto Blas¨®n como en Isabelita, lo han aplicado en dos naves industriales, consiguiendo introducir, a trav¨¦s de los materiales, una referencia que conecta el lugar con su tipolog¨ªa y ¨¦poca de construcci¨®n, al tiempo que la suaviza para que transicione estableciendo v¨ªnculos con su pasado hacia su nueva funci¨®n.
¡°En Burr estamos muy interesados en la historia de algunas de las t¨¦cnicas de construcci¨®n con las que nos encontramos. Entendemos que, al emplear un determinado proceso constructivo, en cierta medida se pone de manifiesto la historia impl¨ªcita que conlleva¡±, explica Elena Fuertes. ¡°La t¨¦cnica tirolesa ha sido aborrecida porque se us¨® durante mucho tiempo para ocultar los defectos de una mala ejecuci¨®n, dado que las protuberancias que genera crean sombras irregulares que disimulan los posibles errores. Es una t¨¦cnica tradicional que se realiza a mano y a nosotros, por el contrario, nos parece interesante rescatarla. Creemos que reivindica un patrimonio constructivo que nos parece ¨²til y relevante, especialmente a la hora de trabajar con estructuras preexistentes¡±.
Otra manera de usar los acabados texturizados podr¨ªa ser para generar, de paso, un punto focal o un elemento de contraste. Be Studio lo han utilizado as¨ª en su proyecto Churruca, un edificio en Matar¨® (Barcelona) cuyo interior presenta un gran vac¨ªo central que funciona como una segunda fachada interior para las viviendas. Las amplias zonas comunes y de paso han sido tratadas con sumo cuidado est¨¦tico, alternando materiales muy contrastados y con una gama crom¨¢tica que les aportan mucho ritmo y singularidad. En la zona de acceso, por ejemplo, la escalera comunitaria presenta un acabado rugoso y texturizado que, adem¨¢s, se ha pintado en un potente color caldera, lo que la refuerza doblemente como punto focal. Adem¨¢s, como contraste, la pared de enfrente, donde se encuentra el ascensor, est¨¢ recubierta de un azulejo vidriado en su misma gama crom¨¢tica.
¡°Optamos por este material y tono porque quer¨ªamos crear un ambiente que reflejara calidez, car¨¢cter y que se viera natural. Se trata de un revoco de cemento aplicado a mano, buscando una superficie con un acabado ligeramente irregular. Posteriormente se le ha aplicado una pintura transpirable dentro de la gama de colores tierra, acorde con lo que expresa el propio revestimiento. La textura, adem¨¢s de aportar una sensaci¨®n t¨¢ctil y visual, juega con la luz de manera interesante, generando profundidades y matices que evolucionan seg¨²n la iluminaci¨®n¡±, explica Silvia Baulies.
Un acabado texturizado tambi¨¦n se puede conseguir a trav¨¦s de revestimientos, como el porcel¨¢nico de inspiraci¨®n met¨¢lica de la colecci¨®n Fe, dise?o de Francesc Rif¨¦ para Nadis Design. En su caso, presenta una microtextura, suficiente para reproducir acabados met¨¢licos e iridiscentes y resultar, al mismo tiempo, una superficie t¨¢ctil. ¡°Creo que la inclinaci¨®n de muchos profesionales hacia acabados texturizados y revestimientos que evocan lo artesanal responde a una b¨²squeda de la autenticidad en los espacios¡±, reflexiona Francesc Rif¨¦. ¡°Al menos yo, por muy pragm¨¢tico que me sienta, aprecio la emoci¨®n de lo imperfecto y no quiero alejarme de ello. Con Fe quer¨ªa precisamente eso: recuperar los matices que solo te ofrecen los materiales vivos como el acero, el hierro o el lat¨®n, pero ganar en resistencia, durabilidad y mantenimiento¡±.
El avance y la tendencia a la inclusi¨®n de diferentes vol¨²menes que ha experimentado la cer¨¢mica es otra opci¨®n para conseguir revestimientos texturizados. Como ya se puede hilar muy fino, incluso es posible reproducir dise?os con una est¨¦tica gr¨¢fica construida desde el volumen, como la colecci¨®n Lins, dise?o de Yonoh para Harmony. Los seis dise?os que integran esta colecci¨®n se pueden colocar de forma aleatoria, generando una superficie cer¨¢mica con un acanalado gr¨¢fico muy fino, sutil y visualmente sugerente.
¡°Al dise?ar Lins, nos alineamos con la tendencia actual hacia superficies m¨¢s texturizadas que aporten una nueva dimensi¨®n a los interiores, en este caso a trav¨¦s de una textura sutil. M¨¢s all¨¢ de la versatilidad de su aleatoriedad, la interacci¨®n con la luz de la textura de Lins a?ade una dimensi¨®n din¨¢mica a los interiores, transformando el espacio a lo largo del d¨ªa con sombras y reflejos que realzan la belleza de las superficies¡±, explica Alex Selma. ¡°Despu¨¦s de un prolongado per¨ªodo en el que los espacios as¨¦pticos dominaban el dise?o de interiores, hoy buscamos crear ambientes m¨¢s humanos y aut¨¦nticos, en los que la imperfecci¨®n o las irregularidades sirvan como medio para generar una atm¨®sfera m¨¢s acogedora¡±.
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