El almac¨¦n de arte de R¨®terdam que puede revolucionar los museos m¨¢s importantes del mundo

La historia de Pa¨ªses Bajos, con grandes extensiones de terreno ganado al mar, es la de su lucha contra las aguas. La ciudad portuaria de R¨®terdam ha sufrido varias inundaciones hist¨®ricas, por eso cuando Sjarel Ex fue nombrado director del museo Boijmans Van Beuningen su principal preocupaci¨®n era el riesgo que corr¨ªan las obras de arte. ¡°Me parec¨ªa muy peligroso para las que estaban en el almac¨¦n, que adem¨¢s se manten¨ªan en muy malas condiciones¡±, recuerda. La conciencia de este peligro le dio una idea: hacer otro almac¨¦n m¨¢s seguro en las afueras. Quince a?os despu¨¦s, su propuesta se ha hecho realidad. Solo que no se ha construido en las afueras, sino al lado del edificio principal, y m¨¢s que un almac¨¦n parece otro museo.

¡°Esto no es un museo¡±, niega la mayor Sjarel Ex pocos d¨ªas antes de la apertura al p¨²blico del Depot Boijmans Van Beuningen, prevista para el 6 de noviembre. El nuevo edificio posee una funci¨®n de dep¨®sito para las 150.000 obras que componen los extensos fondos de este museo que lleva abierto m¨¢s de 170 a?os y que atesora joyas firmadas por artistas como El Bosco, Rembrandt, Van Gogh o Kandinsky, pero tambi¨¦n permitir¨¢ al p¨²blico acceder a ¨¦l y admirar todo su contenido. Por ello pertenece a una tipolog¨ªa h¨ªbrida de la que no existen precedentes. Adem¨¢s, los responsables de la instituci¨®n quer¨ªan sustentar el edificio sobre criterios de sostenibilidad. Para su dise?o se abri¨® un concurso que gan¨® el estudio MVRDV, liderado por el neerland¨¦s Winy Maas: una firma que comenz¨® a obtener reconocimiento internacional gracias al pabell¨®n de su pa¨ªs para la Expo 2000 de Hannover, un proyecto sobre la creaci¨®n de espacio sostenible considerando las restricciones de tierra en Pa¨ªses Bajos.

En esta ocasi¨®n, MVRDV ha concebido un edificio de 39,5 metros de altura con seis plantas conectadas por escaleras suspendidas. El exterior presenta una forma de campana invertida ¡ªotras hip¨®tesis: un jarr¨®n, un macetero, una taza¡ª que va ensanch¨¢ndose desde la base, y su fachada convexa de 1.664 paneles de vidrio que refleja el entorno. ¡°Es como si flotara sobre el suelo, y adem¨¢s no da la espalda al vecindario¡±, explica Winy Maas para ICON Design. ¡°Desde fuera es como una pintura viviente, al reflejar los edificios de los alrededores, las nubes, a los paseantes y tambi¨¦n a los patinadores, que han encontrado aqu¨ª un sitio perfecto para practicar¡±. Tambi¨¦n destaca la vegetaci¨®n que asoma desde su azotea, un espacio que posee m¨¢s superficie de la que se ¡°roba¡± al suelo, lo que fue totalmente buscado: ¡°Quer¨ªamos devolver el verde sobre el tejado para compensar la p¨¦rdida de espacio del parque. El bosque de la azotea es agradable para los visitantes, pero tambi¨¦n da un valor a?adido en t¨¦rminos de sostenibilidad. Los abedules y pinos y el c¨¦sped que hemos ubicado all¨ª ayudan a la retenci¨®n de agua, promueven la biodiversidad y disminuyen el estr¨¦s cal¨®rico de la ciudad¡±.

En cuanto al interior, Sjarel Ex lo compara con los grabados de Piranesi, donde rampas y escaleras se entrecruzan interconectando los niveles de sus 14 espacios de almacenaje en cinco zonas con climatizaciones diferenciadas. ¡°Hemos hecho una especie de pan¨®ptico¡±, a?ade Winy Maas. ¡°Tiene un atrio transparente con mucho cristal atravesado por las escaleras. Todo un rompecabezas, porque ten¨ªamos que hacer accesible para todos una colecci¨®n de arte que cuesta miles de millones de euros¡±.

Ese es su principal rasgo distintivo: si la funci¨®n que se espera de un museo es exhibir y la de un almac¨¦n ocultar, aqu¨ª todo gravita en torno a la tensi¨®n entre lo que se muestra y lo que se esconde. La mayor parte de las piezas se preservan en paneles m¨®viles de almacenaje (los conocidos como peines), pero una selecci¨®n de ellas pende dentro de abigarradas urnas de vidrio que parecen inspiradas en el sistema expositivo inventado por la arquitecta ¨ªtalo-brasile?a Lina Bo Bardi. Parad¨®jicamente, la teatralidad del sistema recuerda tambi¨¦n a las paredes cubiertas de cuadros de suelo a techo de los museos del siglo XIX.

En salas como la que almacena joyas pict¨®ricas de la Edad Media al Barroco, el espectador puede ver los camiones entrando y saliendo, los procesos de conservaci¨®n y lo que ocurre en el dep¨®sito. ¡°Hay una zona m¨¢s restringida, solo accesible en compa?¨ªa de un gu¨ªa, pero el resto es de libre circulaci¨®n¡±, explica el director. No solo se mostrar¨¢n fondos pertenecientes al Boijmans Van Beuningen, sino tambi¨¦n a otras colecciones privadas: ¡°A cambio de un alquiler, los coleccionistas pueden disponer de un espacio y de nuestros servicios de conservaci¨®n para sus obras, que adem¨¢s quedan expuestas al p¨²blico¡±.

Actualmente, la sede principal se encuentra cerrada por unos trabajos de remodelaci¨®n que no se espera terminar antes del a?o 2027. Cuando se produzca la reapertura, las piezas se distribuir¨¢n entre ambos edificios: ¡°Volveremos al esquema anterior, con 3.000 obras expuestas permanentemente en el museo, mientras que el dep¨®sito se quedar¨¢ para mostrar sus cocinas¡±.

La inauguraci¨®n del Depot llega en un momento crucial para el sector muse¨ªstico. Por un lado, en unas grandes pinacotecas que suelen exponer ¨²nicamente entre un 5% y un 10% de sus fondos, est¨¢ abierta la discusi¨®n sobre los criterios de selecci¨®n por los que algunas obras deben ser mostradas al p¨²blico y otras quedan relegadas a los s¨®tanos. Por otro, el cambio clim¨¢tico amenaza tambi¨¦n las colecciones art¨ªsticas. En 2016, los museos del Louvre y de Orsay tuvieron que cerrar al p¨²blico unos d¨ªas y trasladar a las plantas superiores las obras del almac¨¦n ante el anuncio de crecidas del Sena, tras lo cual el Louvre construy¨® un nuevo dep¨®sito en Li¨¦vin, al norte de Francia, cerca de su centro de Lens. Se desvela as¨ª la necesidad de edificar almacenes m¨¢s seguros, pero tambi¨¦n m¨¢s pr¨¢cticos y espaciosos.

Los expertos del museo Victoria and Albert hicieron varias visitas a R¨®terdam cuando comenzaron a establecer los requerimientos de su propio dep¨®sito en el parque ol¨ªmpico del este de Londres, que finalmente ha dise?ado otro gran estudio, Diller Scofidio + Renfro. Sjarel Ex no descarta la posibilidad de seguir exportando su modelo a otros centros de arte: ¡°El mundo profesional nos sigue: cada semana viene alguien para ver qu¨¦ hemos hecho. Llegan de Corea del Sur, Canad¨¢, Noruega¡­ Somos una combinaci¨®n ¨²nica de museo y dep¨®sito, y eso es tener lo mejor de dos mundos¡±.