Francesco Risso: ¡°Nunca me he puesto l¨ªmites a la hora de comprar ropa de hombre o de mujer¡±
El director creativo de la casa italiana Marni defiende que en la moda de hoy las fronteras est¨¢n ah¨ª para ser ignoradas. Especialmente las de g¨¦nero
Hasta los cinco a?os, Francesco Risso (Cerde?a, 1982), hoy director creativo de la firma italiana Marni, vivi¨® en un barco que bogaba por el Mediterr¨¢neo. Despu¨¦s su familia se mud¨® a G¨¦nova, pero tampoco eso result¨® convencional. ¡°Aquellos a?os me definieron¡±, explica. ¡°Crec¨ª en un entorno muy loco, mi padre era muy creativo pero tambi¨¦n un reto, igual que mi abuela. Aquello no era una familia, familia, sino m¨¢s bien una comuna en torno a la que flotaban extra?as criaturas, personas muy creativas, muy ecl¨¦cticas y muy raras. La comunicaci¨®n no era f¨¢cil. No me adapt¨¦ a aquella realidad a trav¨¦s de las palabras, sino haciendo cosas con mis propias manos. Mi ropa, mis objetos. Me expresaba as¨ª. Por eso digo que mi infancia fue muy instructiva. Ahora aprecio mucho ese tipo de interacci¨®n¡±.
Risso asegura que llegar a esta conclusi¨®n no fue f¨¢cil. ¡°Mi madre trabajaba en moda, en Benetton, pero no me influy¨® porque en aquella ¨¦poca sent¨ªa mucho rechazo hacia aquella familia de alto mantenimiento¡±, confiesa entre risas. ¡°A los 16 hu¨ª para estudiar arte en Florencia. Cre¨ªa que quer¨ªa ser artista, pero como siempre se me hab¨ªa dado bien hacerme ropa, pens¨¦ que la moda pod¨ªa irme mejor. Y as¨ª fue¡±.
El dise?ador nos atiende desde su casa de Mil¨¢n. Regres¨® a la ciudad italiana tras formarse como dise?ador en Nueva York y Londres, y asegura que ha aprendido a amar la faceta ¡°misteriosa y alternativa¡± de una urbe que al principio encontraba gris. Tal vez sea porque, primero en Prada ¨Cdonde trabaj¨® diez a?os¨C y despu¨¦s en Marni, ha seguido rigi¨¦ndose por la misma intuici¨®n que le permiti¨® sobrevivir a la euforia bohemia de su infancia. ¡°Desde el primer d¨ªa supe que quer¨ªa trabajar de manera colectiva, con un sistema circular en el que cada prenda y cada idea pase de mano y mano¡±, apunta.
Risso hered¨® la direcci¨®n creativa de Consuelo Castiglioni, que hab¨ªa fundado Marni en 1994, convirti¨¦ndola instant¨¢neamente en un ¨¦xito de culto: su clientela adoraba esa elegancia c¨®moda y exc¨¦ntrica que Castiglioni consegu¨ªa gracias a patrones at¨ªpicos, colores rotundos e imitad¨ªsimos estampados. Risso debut¨® en 2016. ¡°Llegu¨¦ poco despu¨¦s de la marcha de Consuelo, y tard¨¦ algo en entender la joya que es esta firma¡±, explica. ¡°Nos dedicamos a sembrar, y pronto el jard¨ªn empez¨® a florecer. La empresa se volc¨® desde el primer momento. Hemos florecido juntos¡±.
Esta met¨¢fora biol¨®gica es muy apropiada para entender el modo en que Risso ha desarrollado la divisi¨®n masculina incrementando su relevancia, su peso espec¨ªfico y, sobre todo, su p¨²blico. De eso habla su colecci¨®n para esta primavera, forjada en tiempos de pandemia. ¡°No quer¨ªa sumergirme en una investigaci¨®n extrema ni en un planteamiento forzosamente disruptivo¡±, explica. ¡°Me pareci¨® m¨¢s apropiado celebrar lo que mejor se nos da, sentarnos a pensar cu¨¢les son nuestras piezas favoritas de ayer y de hoy, las que supusieron un reto para nuestros patronistas¡±.
El resultado son prendas llenas de mensajes emotivos y que revelan la vida cotidiana de un taller de costura con detalles que parecen a medio terminar. ¡°Evocan m¨¢s fragilidad que dureza. Hoy todo el mundo habla de resiliencia, pero nosotros pensamos que la fragilidad es nuestro caballo de Troya. Es algo mucho m¨¢s poderoso. As¨ª que las prendas est¨¢n rehechas y recompuestas para subrayar esa sensaci¨®n, recuerdan a lienzos o a toiles¡±.
A pesar de lo que pueda parecer, Risso no es un dise?ador conceptual, sino intuitivo. Imaginativo. Pl¨¢stico. En las im¨¢genes de presentaci¨®n, amigos de la marca lucen la colecci¨®n por el mundo, en un gesto comunitario que habla de la difuminaci¨®n de los l¨ªmites entre lo masculino y lo femenino, otro caballo de batalla de Risso. ¡°Por fin nuestras colecciones de hombre y mujer tienen continuidad¡±, apunta. ¡°Antes era m¨¢s complicado debido a los canales de venta, pero la verdad es que nunca he establecido fronteras entre una y otra¡±.
Tras la pandemia, Marni dejar¨¢ de celebrar desfiles separados para hombre y mujer. ¡°Creo que tiene que ver con mi propia forma de vestir. Nunca me he puesto l¨ªmites a la hora de comprar ropa de hombre o de mujer. Me gusta mezclar cosas y a la mayor¨ªa de mis amigos tambi¨¦n. Y la verdad es que muchos hombres compran ropa de mujer de Marni, y viceversa. Es una maravilla y, adem¨¢s, llena nuestras tiendas de personas de todo tipo. No hay una ¨²nica tipolog¨ªa de cliente. Cuando piensas en Marni no te viene a la mente la imagen de una mujer fumando un cigarrillo en el Pont Neuf, sino de una familia con personalidades muy distintas. Es bonito¡±.
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