Cuando los latinos y las raperas convulsionaron unos premios conservadores: los momentazos de los Grammy 2021

Hace tres a?os, Adele subi¨® a recoger el Grammy a disco del a?o por 25 y dijo ¡°No puedo aceptarlo. Lemonade es un monumento¡±. Adele lo hab¨ªa ganado todo con dos discos consecutivos (15 Grammys de 18 nominaciones) y se sent¨ªa culpable por derrotar a Beyonc¨¦, cuyo Lemonade hab¨ªa sido el disco del a?o y un aut¨¦ntico momento cultural. As¨ª que cogi¨® el premio, lo parti¨® en dos y le dio un trozo a Beyonc¨¦, tal y como hac¨ªa Lindsay Lohan con su corona al final de Chicas malas.

Este domingo por la noche (madrugada del lunes en Espa?a) la historia se repiti¨® cuando Billie Eilish, un a?o despu¨¦s de ganar cinco Grammy incluyendo los cuatro principales, subi¨® a recoger el de grabaci¨®n del a?o y dedic¨® sus minutos sobre el escenario a celebrar a Megan Thee Stallion. ¡°Esto es tuyo. No he preparado ning¨²n discurso porque me parec¨ªa inconcebible que no ganases. Has tenido un a?o insuperable, quiero llorar de tanto que te admiro. Vamos a limitarnos a darle un aplauso a Megan¡±, dijo Eilish.

El patr¨®n de una artista blanca avergonz¨¢ndose de su propia victoria genera momentos entra?ables, pero tambi¨¦n pone el foco en las mujeres negras que acaban de perder el premio y quiz¨¢ preferir¨ªan no tener una c¨¢mara en la cara. Sobre todo, pone de manifiesto la sistem¨¢tica miop¨ªa de los Grammy, unos premios que empiezan a ser conocidos por premiar a la gente equivocada. Es como si ni siquiera los propios artistas se los tomaran en serio ya. ?Acaso alguien se imagina a un actor recibiendo un Oscar y parti¨¦ndolo en dos?

Estos fueron los momentos m¨¢s memorables de una gala dominada por las mujeres: Beyonc¨¦, Dua Lipa, Taylor Swift, Billie Eilish y Megan Thee Stallion se lo repartieron casi todo.

Hay una persona en el mundo a la que no le gusta The Weeknd y trabaja en los Grammy

La cr¨ªtica, la industria y el p¨²blico se quedaron perplejos ante las cero nominaciones de The Weeknd, el artista m¨¢s exitoso de 2020. Hasta su representante desvel¨® que la organizaci¨®n hab¨ªa insistido mucho en asegurar su actuaci¨®n hasta que el d¨ªa de las nominaciones dejaron de llamarlo. Hace unos d¨ªas, mientras Blinded By The Light bat¨ªa r¨¦cords al cumplir su 52? semana en el top 10 de Estados Unidos, el cantante anunci¨® que no va a volver a participar en los Grammy. (A diferencia de en los Oscar, para estar nominado a los Grammy el artista debe inscribirse en las categor¨ªas que desee). El motivo que ha dado es el sistema de ¡°comit¨¦s secretos¡±.

Los Grammy tienen un comit¨¦ an¨®nimo que, una vez contados los votos, hace los cambios que le da la gana: a?ade y elimina nominados a su discreci¨®n sin dar explicaci¨®n alguna. Oficialmente, la intenci¨®n es garantizar que artistas m¨¢s minoritarios o vanguardistas tengan la oportunidad de ser rescatados por estos expertos, pero a menudo el comit¨¦ es se?alado como el responsable de ausencias tan controvertidas como la de The Weeknd.

Los mayores fen¨®menos de la m¨²sica reciente apenas han tenido repercusi¨®n en los Grammy. En el pasado Kanye West, Frank Ocean o Drake han denunciado el racismo de la Academia. Kendrick Lamar tiene un Pulitzer, pero ning¨²n Grammy en categor¨ªas principales. El ¨²ltimo artista negro en ganar disco del a?o fue Herbie Hancock, en 2008, y era un ¨¢lbum de versiones de Joni Mitchell. Los Grammy tienen debilidad por los cantantes blancos, cl¨¢sicos y que tocan la guitarra. Estamos hablando de unos premios que este a?o han nominado a Coldplay en disco del a?o de forma no ir¨®nica. Y que suelen ser los ¨²ltimos en enterarse de que un artista es relevante: anoche los Strokes ganaron un Grammy. Por primera vez.

Dua Lipa provoca nostalgia de 2020

La gala empez¨® con el presentador Trevor Noah prometiendo que har¨ªa olvidar lo duro que ha sido el pasado a?o, pero la actuaci¨®n de Dua Lipa solo sirvi¨® para hacernos pensar en el a?o que nos hemos perdido. Su disco Future Nostalgia, que por momentos fue la ¨²nica raz¨®n que la humanidad ten¨ªa para ser feliz en 2020, es una colecci¨®n de canciones que deber¨ªamos haber bailado en las discotecas. La actuaci¨®n pretend¨ªa evocar la ¨¦poca disco de los setenta, pero indirectamente tambi¨¦n evoc¨® el a?o que no hemos podido vivir.

Durante la gala los artistas repitieron hasta la saciedad el clich¨¦ de ¡°llevo toda mi vida so?ando con actuar en los Grammy¡±. Dua Lipa lo hizo, pero en cuanto puso un pie en ese escenario qued¨® claro que donde ella lleva toda la vida so?ando con actuar es en Eurovisi¨®n. Cuando se pueda volver a las discotecas, nadie va a estar tan en forma como Dua Lipa. Su flexibilidad, su atuendo y su coreograf¨ªa hacen que las Pussycat Dolls parezcan Flos Mariae.

Y Bad Bunny se qued¨® sin palabras

El presentador Trevor Noah present¨® al portorrique?o Benito Mart¨ªnez como lo que es: el artista m¨¢s escuchado en todo el mundo durante 2020. ?Qui¨¦n podr¨ªa haber imaginado hace 12 meses que escuchar¨ªamos en los Grammy la frase ¡°Toma cinco mil, g¨¢stalo en Sephora¡±? Lo que no se escuch¨® fue la palabra ¡°cojones¡±, que la CBS censur¨® a pesar de que en ingl¨¦s se usa bastante, as¨ª en castellano, y no se la considerada una palabrota: Joe Pesci amenazaba con arranc¨¢rselos a Macaulay Culkin en Solo en casa y era una pel¨ªcula infantil.

Bad Bunny gan¨® el Grammy al mejor disco latino y apenas le salieron las palabras de agradecimiento cuando subi¨® a recogerlo. Eso convierte a estos premios en una fiesta para todo el mundo y para nadie: en una misma noche coinciden Bad Bunny a d¨²o con Jhay Cortez y Lionel Richie homenajeando al difunto Kenny Rogers. Y es probable que ni los fans de unos ni los de otros estuvieran viendo la ceremonia.

El In Memoriam m¨¢s largo de la historia

Debido a la pandemia, fallecieron tantos artistas durante el a?o pasado que la conmemoraci¨®n dur¨® m¨¢s de 10 minutos. Y aun as¨ª, Trevor Noah indic¨® que la lista completa (que asciende a casi mil fallecidos) se pod¨ªa consultar en la web oficial de los Grammy. El estado de ¨¢nimo del homenaje result¨® un poco esquizofr¨¦nico. Por un lado, porque algunos difuntos llevaban adjetivos calificativos delante de su nombre (¡°legendario¡±, ¡°aclamado¡±, ¡°revolucionario¡±) y otros no. Y por otro lado, porque el montaje pasaba de m¨²sica triste a Bruno Mars homenajeando a Little Richard con un n¨²mero de rock & roll fren¨¦tico y a continuaci¨®n volv¨ªa la m¨²sica solemne.

Harry Styles, el novio de internet

En una noche que insist¨ªa en prometernos que los sue?os se cumplen (el cantante de Black Pumas record¨® que hace unos a?os cantaba en la calle por limosna), el ¨²nico pr¨ªncipe Harry que le queda a Gran Breta?a revolucion¨® internet con su victoria. El panadero que quer¨ªa ser estrella del rock gan¨® su primer Grammy, aunque fuese en la categor¨ªa de pop, y cop¨® todos los trending topics en Twitter. El primero, #ProudOfHarry, porque en el siglo XXI las fans han pasado de querer ser novias de sus ¨ªdolos a sentirse sus madres, en una progresiva infantilizaci¨®n de las celebridades.

El segundo trending topic, #Olivia, se debi¨® a que una presentadora mencion¨® de pasada a Styles y solo dijo ¡°Olivia lo estar¨¢ viendo¡±, en referencia a su supuesta pareja, la actriz y directora Olivia Wilde. Algunas de sus fans se cabrearon. Otras estaban demasiado ocupadas celebrando que Taylor Swift, expareja de Styles, le aplaudiese con tanto entusiasmo. No es la primera vez que se reduce a un artista a ser ¡°la pareja de¡±, pero s¨ª es una de las primeras veces que ocurre con un hombre.

A Harry Styles probablemente los cotilleos le den igual: su masculinidad es de todo menos fr¨¢gil. Cada vez que le enfocaba la c¨¢mara anoche llevaba una boa distinta. Y todas eran de primera calidad: las boas de Harry Styles ten¨ªan mejor pelo que la mayor¨ªa de seres humanos.

Nadie ha amortizado el confinamiento tanto como Taylor Swift

Anoche Swift se convirti¨® en la cuarta persona (y la primera mujer) en ganar el Grammy a disco del a?o tres veces. Iguala as¨ª a Frank Sinatra, Stevie Wonder y Paul Simon. Folklore es un ¨¢lbum compuesto y grabado durante el confinamiento que acompa?¨® a millones de personas haciendo que cada casa donde sonase pareciese m¨¢s un hogar. Para su look de la carpa, la cantante eligi¨® un vestido de flores con una mascarilla a juego que hac¨ªa que pareciese que le estaban saliendo flores vivas de la boca. En Twitter, sus fans celebraron que por fin haya fotos de Taylor con mascarilla en alta definici¨®n.

En su actuaci¨®n Swift empez¨® cantando encima de un tejado, abriendo los ojos como una princesa que despertaba, y acababa dentro de la caba?a y despu¨¦s saliendo a bailar bajo una iluminaci¨®n que generaba un efecto de luz de luna. Hacia el final se volv¨ªa una bruja, una figura que ella ha querido reivindicar en Folklore porque, en este cuento, ella es la princesa, la bruja y el cazador. Al final eso de que ¡°vamos a salir de esto mejores¡± no se hizo realidad, pero al menos hemos salido con dos discos m¨¢s de Taylor Swift.

Los MEJORES MOMENTOS de los GRAMMY 2021: BEYONC? hace historia

?D¨®nde guardar¨¢ los premios Beyonc¨¦?

Con su 28? victoria en estos premios, anoche Beyonc¨¦ se convirti¨® en la mujer con m¨¢s Grammy de la historia. Empata con Quincy Jones en el segundo puesto y se queda a tres galardones de Georg Solti, el exdirector de la Orquesta Sinf¨®nica de Chicago. Aunque el Grammy a disco del a?o se le sigue resistiendo, la cantante ha ganado tantas veces por dos motivos:

1. Es Beyonc¨¦.

2. Probablemente, inscribe todo lo que puede en todas las categor¨ªas posibles.

Por desgracia, anoche no actu¨®. As¨ª que se limit¨® a hacer lo que peor se le da: hablar. En su obsesi¨®n por mantener un misterio cada vez mayor en torno a su figura, Beyonc¨¦ parece incapaz de mostrar la m¨¢s remota humanidad. Desde hace una d¨¦cada no concede entrevistas y cuando aparece en p¨²blico se comporta como un robot. Tampoco es que ella necesite mostrarse humana: nadie la percibe como una persona porque Beyonc¨¦ ya es un concepto, una promesa y un s¨ªmbolo.

Las mujeres negras que no se llaman Beyonc¨¦ lo tienen peor

En la serie Master of None, una mujer negra le explicaba a su hija en qu¨¦ consist¨ªa la discriminaci¨®n: tendr¨ªa que trabajar el triple de duro para llegar la mitad de alto que los hombres blancos. Pocas veces esta advertencia ha quedado tan en evidencia como anoche. A pesar de que Megan Thee Stallion gan¨® tres Grammy (artista revelaci¨®n, canci¨®n rap e interpretaci¨®n rap por su dueto con Beyonc¨¦ en Savage), que perdiese el premio gordo y que la propia ganadora Billie Eilish protestase dej¨® una sensaci¨®n de decepci¨®n. Especialmente despu¨¦s de hacer la ¨²nica actuaci¨®n realmente memorable de la noche, al ser la ¨²nica con significado.

Megan empez¨® con Savage, aunque Beyonc¨¦ no actu¨® con ella, vestida como una vedette cl¨¢sica: plumas, lentejuelas, transparencias. Es decir, el atuendo de las vedettes blancas. Pero tanto Megan como sus bailarinas, todas voluptuosas, hac¨ªan twerking reclamando para s¨ª una parte de la tradici¨®n musical norteamericana en la que las mujeres negras no tuvieron cabida. Mientras esto ocurr¨ªa, los bailarines masculinos arrojaban billetes en una subversi¨®n del clich¨¦ de tipos duros tir¨¢ndole dinero a las strippers: todo ese show lo hab¨ªa pagado ella.

A continuaci¨®n apareci¨® Cardi B vestida como un caballero del zodiaco sexy y bail¨® en torno a una barra americana (antes de ser rapera, Cardi B era stripper) para darle tiempo a Megan de cambiarse a otra armadura similar. Juntas, escalaron a una cama gigante y cantaron una de las canciones m¨¢s importantes del a?o, WAP. Lo que ocurri¨® a continuaci¨®n no puede expresarse con palabras, aunque podr¨ªa resumirse as¨ª: ambas se tocaron la entrepierna, engarzaron sus muslos y rodaron juntas por la cama a medio camino entre las artes marciales y el revolc¨®n. Y asombrosamente, en ning¨²n momento pareci¨® que estuvieran tratando de excitar a los espectadores masculinos. Al terminar, Megan Thee Stallion se retir¨® el sudor del bigote con un estilo con el que nadie ha conseguido hacer eso jam¨¢s.

Para recoger sus tres premios, Megan Thee Stallion de nuevo reclam¨® imaginer¨ªa blanca con un vestido que emulaba el de Marilyn Monroe en Los caballeros las prefieren rubias. Tanto ella como Cardi B exageran rasgos que tradicionalmente se han usado para insultar a las mujeres negras (la vulgaridad, la sexualidad o la pobreza) y los convierten en su iconograf¨ªa y en el centro de su poder. Que, por ejemplo, Bruno Mars actuase dos veces y se limitase a imitar estilos del pasado, siendo aun as¨ª uno de los cantantes masculinos que m¨¢s energ¨ªa pone en sus actuaciones, demuestra c¨®mo se da por hecho que las mujeres en el pop van a entregarse f¨ªsica y creativamente mientras que de los hombres solo se espera que aparezcan, se queden de pie y canten.

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