Los del R¨ªo: ¡°Habr¨ªa que ver cu¨¢nta gente se ha beneficiado de ¡®Macarena¡¯ sin que nosotros lo hayamos hecho¡±
Antonio Romero y Rafael Ruiz alcanzaron hace 25 a?os lo imposible: colocar su ¡®Macarena¡¯ en lo m¨¢s alto de la lista de ventas estadounidense durante 14 semanas. Hoy, con la canci¨®n todav¨ªa sonando y siendo versionada, recuerdan las luces (y alguna sombra) de aquel momento cultural irrepetible
Todo el mundo se rindi¨® al fen¨®meno Macarena en 1996. El tema de flamenco del d¨²o sevillano Los del R¨ªo, formado por Antonio Romero y Rafael Ruiz, ya hab¨ªa sido un ¨¦xito en Espa?a en 1993. Pero remezclado en forma de pop bailable y con la voz a?adida de una mujer que cantaba partes en ingl¨¦s, permaneci¨® aquel verano durante 14 semanas en lo m¨¢s alto del Billboard Hot 100. O sea, la lista de sencillos m¨¢s importante e influyente del mundo. Una haza?a asombrosa para unos artistas de Sevilla que solo fue superada en 2017 por Luis Fonsi y Daddy Yankee tras alistar a Justin Bieber en una versi¨®n spanglish de Despacito. Ellos batieron el r¨¦cord al estar un par de semanas m¨¢s encabezando la lista de ¨¦xitos estadounidense. No obstante, visto en perspectiva, nadie puede discutir que lo que consiguieron estos dos amigos de Dos Hermanas fue algo inaudito, una rareza de esas digna de estudio.
Chapurreando apenas unas palabras en ingl¨¦s y con internet a¨²n en pa?ales, Los Del R¨ªo revolucionaron el mayor y m¨¢s competitivo mercado musical. Los hechos hablan por s¨ª solos. Hace un cuarto de siglo Macarena son¨® en la Convenci¨®n Nacional Dem¨®crata (Hillary Clinton se arranc¨® a dar unas palmas) y fue usada por la selecci¨®n femenina de gimnasia de Estados Unidos en los Juegos Ol¨ªmpicos de Atlanta. Adem¨¢s, entre otros surreales logros, el d¨²o formado por Antonio Romero y Rafael Ruiz la interpret¨® el 26 de enero de 1997 al inicio de la Super Bowl ante un p¨²blico de m¨¢s de 70.000 espectadores (y decenas de millones de telespectadores en sus casas).
?Quiz¨¢ se fue todo de las manos? ¡°Para nada¡±, explica Romero. ¡°Nunca nos asustamos porque en ese momento ya llev¨¢bamos 30 a?os de carrera y hab¨ªamos pasado much¨ªsimas dificultades. Empezamos a los 14 y, siendo unos chiquillos, por entonces jug¨¢bamos tanto a cantar como a torear. No fue hasta que murieron nuestros padres que nos dijimos: ¡®No tenemos m¨¢s remedio que tomarnos en serio esto de la m¨²sica¡¯. B¨¢sicamente, porque era lo ¨²nico que nos daba dinero para poder ayudar a nuestras madres. Ese fue el mayor sacrificio que pudimos hacer¡±, apostilla.
En Espa?a el d¨²o cuenta con otros ¨¦xitos como Sevilla tiene un color especial o Se te nota en la mirada, pero en casi todo el mundo siguen siendo rehenes del one hit wonder, o sea, de esa condici¨®n de artistas que encontraron un ¨¦xito gigante con una sola canci¨®n y no volvieron a ser conocidos por ninguna otra. A ambos, a sus 73 a?os, esto ¨²ltimo les importa poco. Como se?ala Romero, ¡°llegar a ser n¨²mero uno en los cinco continentes es algo tremendamente dif¨ªcil. No es lo normal¡±. ¡°De igual forma que ¨²nicamente hemos ganado el Mundial de F¨²tbol una sola vez, afortunadamente nosotros hemos sido campeones del mundo en lo que a la m¨²sica se refiere. Siempre nos preguntan cu¨¢ndo vamos a componer otra Macarena, a lo que contestamos que ya hicimos la nuestra. Que se pongan a trabajar los dem¨¢s. Lo que nos toca es vivir y disfrutar¡±, subraya.
Por mucho que ahora se celebre la efem¨¦ride de su conquista estadounidense, la Macarena original se public¨® por primera vez en su ¨¢lbum A m¨ª me gusta, de 1993. Aunque su pegajosa letra surgi¨® algo antes, a finales de 1992. Aprovechando que se encontraban en Caracas, el empresario Gustavo Cisneros no dud¨® en invitarles a una fiesta en su casa. Entre aquellas paredes tambi¨¦n se hallaba Carlos Andr¨¦s P¨¦rez, el presidente de Venezuela de la ¨¦poca, as¨ª como Diana Patricia Cubill¨¢n Herrera, una bailaora de flamenco local.
¡°La joven se puso a bailar y me dio por decirle: ¡®Dale a tu cuerpo alegr¨ªa, Magdalena, que tu cuerpo es pa¡¯ darle alegr¨ªa y cosa buena¡¯. As¨ª fue c¨®mo me inspir¨¦ para escribirla. Pero como resulta que tengo una hija que se llama Esperanza Macarena, finalmente decid¨ª cambiar Magdalena por Macarena¡±, subraya Romero. ¡°A ella [a Patricia Cubill¨¢n] le ha ido muy bien porque al ser nuestra musa ha podido decirles a todos que es la verdadera Macarena. Lejos de ocultar su identidad, hemos sido muy sinceros al respecto. Nos parece muy bien que haya aprovechado lo que ocurri¨® aquel d¨ªa para abrir su propia escuela de baile y participar en alguna telenovela. Nos trae unos recuerdos maravillosos. Solo esperamos que se encuentre bien en Venezuela porque ella y su familia son un encanto¡±, a?ade por su parte Ruiz.
A prop¨®sito del remix que Fangoria firm¨® de la pieza, cuya controversia lleg¨® al Tribunal de Estrasburgo, Ruiz simplemente se limita a recordar que ¡°como Macarena peg¨® ese zambombazo tan bestial, todo el mundo quer¨ªa montarse al carrito¡±. S¨ª, d¨¦cadas despu¨¦s contin¨²a siendo un asunto espinoso del que prefieren no hablar. Alaska tampoco quiso dar muchos detalles cuando fue preguntada al respecto al 2013 en Vanity Fair: ¡°Macarena¡¯ triunfa en Espa?a en 1993. Nosotros, como Fangoria, hacemos una remezcla y esa remezcla vuelve a triunfar en Espa?a. Entonces en Miami, de repente, utilizan nuestra remezcla y a?aden unas voces. No es que sea otra remezcla, ?era la nuestra! Eso lleg¨® al Tribunal Europeo, pero est¨¢ desestimado, as¨ª que no hay nada que hacer¡±. Que no parezca que hay animadversi¨®n entre los artistas: en 2017, hablando del tema tambi¨¦n con reservas y precauci¨®n en el programa de Bert¨ªn Osborne, el d¨²o aclar¨®: ¡°Adoramos a Alaska¡±.
Pasase lo que pasase, esa remezcla firmada en las car¨¢tulas de los singles por los Bayside Boys les abri¨® de par en par las puertas al otro lado del charco. Los productores Mike Triay y Carlos de Yarza la grabaron en 1995 con la ayuda de la vocalista Patty Alfaro. Inicialmente no contaba con el visto bueno de su sello, BMG/Ariola, que hasta amenaz¨® con demandarles. Sin embargo, dado que sonaba incesantemente en radios como Power 96 o la neoyorquina WKTU, la discogr¨¢fica lleg¨® a un acuerdo con ellos porque sab¨ªa que no pod¨ªa desperdiciar su incidencia medi¨¢tica. La letra peque?a del contrato se desconoce por completo.
De todas formas, Macarena se podr¨ªa haber transformado en un monstruo a¨²n mayor. O, al menos, eso es lo que se desprende cuando Romero admite que el mism¨ªsimo Michael Jackson ¡°quer¨ªa grabar una nueva versi¨®n con Los del R¨ªo¡±. As¨ª lo narra: ¡°Le volv¨ªa loco nuestra canci¨®n y sol¨ªa ponerla antes de arrancar sus espect¨¢culos para calentar a su clientela. Su abogado nos contact¨® y nos dijo que Miguel, porque as¨ª le llamaba ¨¦l, ten¨ªa muchas ganas de trabajar con nosotros. Nos coment¨® que estaba de m¨¦dicos y que cuando se recuperara lo tirar¨ªamos adelante. Eso pas¨® seis u ocho meses antes de que cayera en declive y se nos fuera. Estaba muy ilusionado, pero no pudo ser¡±.
Aun as¨ª, en 2016 colaboraron con la banda Gente de Zona en M¨¢s Macarena. Y, por incre¨ªble que parezca, en 2019 recibieron la llamada del rapero estadounidense Tyga para participar en la viral Ayy Macarena, que acumula m¨¢s de 150 millones de visualizaciones en YouTube. ¡°F¨ªjate que pienso que, all¨¢ donde est¨¦ Miguel, como dec¨ªa su abogado, puso algo de su parte en plan ¡®conmigo no, pero s¨ª con el otro¡±, conjetura.
Mucho se ha escrito acerca de si Los del R¨ªo son millonarios gracias a su mastodonte buque insignia. En definitiva, siguen ingresando una cantidad indeterminada en concepto de royalties y derechos de autor. Cuando se les interroga por ello intentan dar un capotazo con elegancia. Pero, a rega?adientes, acaban abordando la cuesti¨®n. ¡°?Por qu¨¦ no contact¨¢is con la editorial? Al ser el autor, me exigieron que les diera el 50% para hacerla popular y venderla bien. Lo que habr¨ªa que poner sobre la mesa es cu¨¢nta gente se ha beneficiado de Macarena sin que nosotros lo hayamos hecho. Con esto no quiero decir que nos vamos a arrancar a llorar y a decir qu¨¦ pena, no. Nos han dado lo que creo que nos ha correspondido, pero eso no quiere decir que se ajuste a la pura realidad¡±, explica Romero.
Ruiz toma la palabra para aclarar: ¡°Encima, Antonio parti¨® ese 50% conmigo. Y los primeros dos a?os tuvimos que darle a Hacienda algo m¨¢s de la mitad de los beneficios. As¨ª que ajusta las cuentas¡±. ¡°Nuestra riqueza no est¨¢ en Macarena, est¨¢ en nuestras familias¡±, sentencia su compa?ero. ¡°Tenemos unos hijos maravillosos y unos nietos encantadores que ya empiezan a despuntar y cantan mejor que nosotros. La humildad en la vida es la que triunfa siempre. No hay cosa m¨¢s importante y rica que ser humilde. Eso lo hemos aprendido de nuestros padres, que eran tremendamente trabajadores. Independientemente del tiempo que ha pasado, seguimos jugando a cantar con la misma ilusi¨®n de nuestros inicios para que el mundo sea un lugar m¨¢s feliz¡±.
Macarena sigue viva y coleando. Prueba de ello es que Los del R¨ªo se han aliado con Airbnb y, este agosto, ejercer¨¢n de anfitriones de una villa en Utrera. Los primeros cuatro hu¨¦spedes que esta misma semana confirmaron su reserva no solo ser¨¢n recibidos en persona por estas leyendas: tendr¨¢n acceso a una sala de karaoke privada repleta de guitarras espa?olas y hasta obtendr¨¢n consejos del d¨²o para perfeccionar la coreograf¨ªa del c¨¦lebre tema. Asimismo, aseveran: ¡°Les vamos a ense?ar c¨®mo se hace un buen gazpacho¡±. ¡°La casa no es propiedad nuestra. Es de unos amigos a los que habitualmente les dejamos las llaves de nuestro hogar y ellos nos prestan las suyas. Al fin y al cabo, es como un intercambio familiar. Todav¨ªa no sabemos qui¨¦nes vendr¨¢n, pero te aseguro que tendr¨¢n un recibimiento muy especial. Se lo van a pasar de maravilla¡±, anticipa Romero. Es l¨®gico imaginar que ese himno intergeneracional llamado Macarena sonar¨¢ en alg¨²n momento, aunque no sabemos en cu¨¢l de sus versiones.
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