Jeffrey Sachs: ¡°Esta crisis deber¨ªa conducir a un viaje hacia dentro, tambi¨¦n en los pol¨ªticos¡±

Todos piensan en cambiar el mundo, pero nadie en cambiarse a s¨ª mismo¡±. Cuando el escritor sovi¨¦tico Alex¨¦i Tolst¨®i solt¨® esta frase a mediados del siglo pasado, posiblemente no previ¨® excepciones como la de Jeffrey Sachs. El economista de Detroit asesorar¨ªa a?os despu¨¦s a la URSS en su transici¨®n al capitalismo, a trav¨¦s de la privatizaci¨®n masiva de empresas y la desregulaci¨®n del mercado. Hoy, a sus 66 a?os, es consejero de Naciones Unidas en la consecuci¨®n de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y defiende justo lo contrario: la inapelable necesidad de que los poderes p¨²blicos se arremanguen para llevarnos a un mundo m¨¢s justo sorteando las crisis. Como la de la covid-19. ¡°Estamos encerrados y temerosos, el impacto de la pandemia se ve por todos lados¡±, arranca el economista esta conversaci¨®n por Internet desde su residencia de Nueva York.

PREGUNTA. Si me lo permite, comenzar¨¦ esta entrevista con una frase que dijo hace un a?o durante una conferencia en Espa?a: ¡°Donald Trump es un psic¨®pata¡±. Se refer¨ªa a su negaci¨®n del cambio clim¨¢tico y su salida del Acuerdo de Par¨ªs. ?Qu¨¦ balance hace hoy de la gesti¨®n de su Gobierno en la crisis de la covid-19?

RESPUESTA.?La psicopat¨ªa de Trump ha provocado la muerte innecesaria de decenas de miles de estadounidenses. Las agencias de inteligencia de Estados Unidos le advirtieron repetidamente desde principios de enero sobre los peligros de la covid-19. Tiene legiones de cient¨ªficos y especialistas en salud p¨²blica que podr¨ªa consultar, pero ¨¦l es un narcisista y un ignorante. No puede asimilar informaci¨®n real y actuar racionalmente sobre ella, ni capacitar a otros para que lo hagan. Es tr¨¢gico.

P. Y junto a la crisis sanitaria y econ¨®mica, ahora Trump debe afrontar otra: la social.

R. Es un supremacista blanco intolerante y, parte de sus bases, tambi¨¦n.

P. El homicidio de George Floyd ha detonado un malestar que viene de mucho antes de este Gobierno.

R. EE UU siempre ha tenido dos realidades en conflicto. Se fund¨® en la libertad y la diversidad de un lado, y en la esclavitud y el genocidio de los nativos del otro. Pero es alentador que hoy, los supremacistas est¨¢n en clara minor¨ªa en la opini¨®n p¨²blica: el 75% apoya las protestas y el movimiento Black Lives Matter, y solo el 25% apoya la represi¨®n de los manifestantes. Esto podr¨ªa marcar un punto de inflexi¨®n, ya que la intolerancia se concentra en la gente de cierta edad, mientras los m¨¢s j¨®venes son inclusivos.

¡°Los supremacistas est¨¢n en clara minor¨ªa. Solo el 25% de la opini¨®n p¨²blica en EE UU apoya la represi¨®n de los manifestantes¡±

P. Su pa¨ªs es un ejemplo de acogida y multiculturalismo. ?Teme que la Administraci¨®n actual acabe con esas virtudes?

R. Hemos reunido los talentos de todo el mundo una generaci¨®n tras otra, lo que nos ha dado vitalidad, creatividad y energ¨ªa. Los fan¨¢ticos, incluido Trump, atacan a nuestra mayor fortaleza. Trump es un peligro para este pa¨ªs, y para el mundo.

P. La pandemia nos est¨¢ llevando a una crisis econ¨®mica mundial sin precedentes. ?Puede dificultar el logro de los ODS con efectos sobre la justicia social?

R.?S¨ª. La crisis sanitaria es devastadora para el bienestar humano y exacerba las desigualdades. Los ricos pueden capear la tormenta en una suerte de refugio protector; los pobres no pueden. Los ricos pueden teletrabajar desde casa; los pobres, en general, no pueden. Los ricos pueden pagar sus facturas m¨¦dicas; los pobres no pueden. Y en Estados Unidos, sin cobertura nacional de salud, los resultados pueden ser devastadores.

P. La OMS y organizaciones cient¨ªficas han confirmado la relaci¨®n directa del cambio clim¨¢tico con la aparici¨®n de virus como el actual. ?Cree que este mensaje impregnar¨¢ a la poblaci¨®n y nos volver¨¢ m¨¢s conscientes en la lucha contra el calentamiento global?

R.?Esta crisis deber¨ªa conducir a un viaje hacia dentro. Tambi¨¦n de los pol¨ªticos. ?Por qu¨¦ han descuidado las advertencias sobre el cambio clim¨¢tico, las pandemias, la contaminaci¨®n y dem¨¢s riesgos nefastos? La pol¨ªtica se ha convertido en un juego de poder en lugar de una b¨²squeda de soluciones.

P. La econom¨ªa sufre su peor contracci¨®n desde la ¨²ltima recesi¨®n. Sin embargo, algunos ¨ªndices burs¨¢tiles est¨¢n subiendo. ?Es una demostraci¨®n de que el sistema financiero y la econom¨ªa real van por caminos distintos?

R.?El dinero f¨¢cil de la Fed y el BCE puede llevar a los inversores a perseguir los precios de las acciones al alza. El alto desempleo reduce los salarios. Adem¨¢s, las compa?¨ªas tecnol¨®gicas se est¨¢n expandiendo debido al comercio electr¨®nico y otros usos digitales. Pero todo esto deja atr¨¢s a la mayor¨ªa de la sociedad. Por eso, la pobreza y el desempleo pueden ir en una direcci¨®n mientras que los mercados van en otra. Yo no soy muy optimista sobre los precios del mercado de valores en este momento. Creo que los inversores, especialmente en Estados Unidos, son demasiado optimistas sobre el curso futuro de la econom¨ªa. No creo en un r¨¢pido rebote.

¡°Creo que en esta crisis los inversores son demasiado optimistas sobre el curso futuro de la econom¨ªa. No creo en un r¨¢pido rebote"

P. Defiende el multilateralismo y la cooperaci¨®n. Pero en un momento de crisis extrema como esta se est¨¢ demostrando que no hay una acci¨®n conjunta ni entre los pa¨ªses de Europa, ni entre los Estados de EE UU.

R.?En todas partes vemos divisiones justo cuando necesitamos cooperaci¨®n. Trump es un divisor, que fomenta el odio para promover su poder personal. Europa ha tenido un desempe?o pobre, con demasiadas pol¨ªticas tomadas a nivel nacional. Europa necesita mantenerse unida por su propio bien, especialmente porque Estados Unidos ahora es muy poco fiable.

P. El mundo se confin¨® demasiado tarde y, en casos como el de Estados Unidos, empieza a reabrir demasiado pronto. ?El mercado y la libertad individual se sacralizan hasta el punto de poner en peligro la salud de los ciudadanos?

R. La forma de abrir la econom¨ªa es actualizar y fortalecer el sistema de salud p¨²blica (pruebas, rastreo, aislamiento, monitoreo) para que cuando se alivie el cierre los casos no vuelvan a explotaR. Esto lo ha logrado la regi¨®n de Asia y el Pac¨ªfico, pero EE UU y Europa Occidental han fracasado en su mayor¨ªa. Hasta ahora.

P. Como asesor del cumplimiento de los ODS, deben preocuparle los pa¨ªses pobres. ?Qu¨¦ mensaje env¨ªa al mundo desarrollado?

R.?Que detenga la epidemia en sus propios pa¨ªses. Que empodere al FMI y a las agencias de la ONU, especialmente a la OMS, para que hagan su trabajo. Que suspenda los pagos de la deuda de los pa¨ªses en desarrollo. Y una cooperaci¨®n global. No parece que hoy tengamos el mejor escenario para esto ¨²ltimo.