Cuidado, quiz¨¢ es usted comunista y no lo sabe
El PP dice que regular el alquiler como en Nueva York o Berl¨ªn es comunista y suicida. Yo no s¨¦ si mucha gente que conozco es comunista, lo dudo mucho, pero s¨ª que la veo al borde del suicidio con el precio de los pisos
Siempre me intrig¨® el c¨¦lebre concepto de la mano invisible de la econom¨ªa, que Adam Smith describi¨® en 1759. Hablando de los ricos, dec¨ªa: ¡°A pesar de su natural ego¨ªsmo y avaricia, aunque solo buscan su propia conveniencia, aunque el ¨²nico fin que se proponen es la satisfacci¨®n de sus propios vanos e insaciables deseos, comparten con los pobres el fruto de todos sus progresos. Son conducidos por una mano invisible a realizar casi la misma distribuci¨®n de las cosas necesarias para la vida que habr¨ªa tenido lugar si la tierra hubiera estado repartida en porciones iguales (¡), y entonces sin pretenderlo, sin saberlo, promueven el inter¨¦s de la sociedad¡±. Traducido, las ganancias de las empresas caen natural y misteriosamente en cascada sobre el resto de los mortales. Un milagro: no solo es que la famosa mano no se vea, es que ni idea de c¨®mo funciona. Estas semanas hemos tenido un ejemplo luminoso: los llamados ¡°beneficios ca¨ªdos del cielo¡± de las compa?¨ªas el¨¦ctricas. Ahora bien, temo que a los dem¨¢s solo nos queda la bonoloto. Por eso quiz¨¢ es necesario que no todo sea esperar un prodigio e intervenga un Gobierno o alguien, una mano bien visible, como con la factura de la luz o los alquileres.
Sin embargo, el PP dice, como con todo, que regular el alquiler como hacen en Nueva York o Berl¨ªn es comunista y suicida, que a lo loco se vive mejor. Yo no s¨¦ si mucha gente que conozco es comunista, lo dudo mucho, pero s¨ª que la veo al borde del suicidio con el precio de los pisos y de los alquileres. Dec¨ªa John Lennon que la vida es lo que te pasa mientras est¨¢s haciendo planes. M¨¢s bien es lo que te pasa mientras est¨¢s pensando c¨®mo demonios har¨¢s para comprarte un piso o vivir con estos alquileres. Pero si a usted le pasa eso, cuidado: quiz¨¢ es usted comunista.
Arrastramos una derecha un poco arcaica, que en Europa les hace gracia, como ver las fotos de los abuelos. Aqu¨ª les presentas un socialdem¨®crata b¨¢varo y lo toman por un peligroso bolivariano. Pero se equivocan llamando comunista a tanta gente corriente y nada ¨¢crata, porque a muchos que no lo han sido en su vida les entran dudas de si a lo mejor lo son y no se hab¨ªan dado cuenta. Le pierden miedo, se miran y ven que no tienen cuernos ni rabo. No s¨¦ si la derecha es consciente de que est¨¢ creando m¨¢s comunistas de los que hay realmente. Es un aut¨¦ntico motor de conciencia de clase.
Para m¨¢s confusi¨®n, si estos que mandan son comunistas (y creo que en el Gobierno son todos propietarios de piso y ninguno vive de alquiler), despista mucho ver luego a Iv¨¢n Redondo, que no cita a Lenin, sino m¨¢ximas de El coche fant¨¢stico, y va por ah¨ª con piezas de ajedrez en el bolsillo, o a Antonio Miguel Carmona, un socialista que de repente es vicepresidente de Iberdrola.
La verdad es que las tentaciones de ser comunista son constantes. ?ltimamente hay titulares que si los lees en voz alta en el metro puedes organizar una revoluci¨®n all¨ª mismo. Este del lunes: ¡°Una de cada tres multinacionales espa?olas paga en impuestos menos del 10% de su beneficio global. Veinte grandes grupos abonaron al fisco menos del 2% de sus ganancias en 2018¡±. Con los Papeles de Pandora o el papel¨®n del d¨ªa despu¨¦s de las estrellas de la convenci¨®n del PP tienes una revelaci¨®n: ah¨ª s¨ª que ves por fin la mano invisible. Es una epifan¨ªa, te invade una honda sensaci¨®n espiritual de estar haciendo el tonto. Si nos contaran a todos el truco de la mano invisible en sociedades ocultas y chanchullos, si estuvi¨¦ramos en la pomada, no nos confundir¨ªan con comunistas. Adem¨¢s es que luego votamos mal y es peor.
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