Giorgio Agamben, el fil¨®sofo que vio en el estado de excepci¨®n la nueva normalidad
El pensador italiano, autor de l¨²cidas obras sobre el abuso de la soberan¨ªa en democracia, naufrag¨® en diatribas contra la gesti¨®n de la pandemia
El ni?o Giorgio Agamben descubri¨® en su Roma natal que las relaciones humanas no eran como las imaginaba. Un d¨ªa en un barrio del norte de la capital italiana, donde hab¨ªa nacido en 1942, vio abrirse una puerta y a un hombre de mediana edad que echaban a patadas a la calle. ¡°Mientras se levantaba del suelo y se volv¨ªa a colocar los anteojos (¡), repet¨ªa sollozando: ¡°Soy el contable Ghislanzoni, soy el contable Ghislanzoni¡¡±, escribi¨® Agamben, siendo ¨¦l ya un fil¨®sofo de renombre, en Autorretrato en el estudio (Adriana Hidalgo editora). ¡°Desde aquel momento la idea de injusticia entr¨® en mi mente y en mi coraz¨®n y nunca m¨¢s ha salido de all¨ª¡±, a?ad¨ªa en 2018 en esa autobiograf¨ªa intelectual. Este septiembre, la misma editorial publica Lo que he visto, o¨ªdo y aprendido¡, una especie de cuaderno de notas de quien va a escribir su testamento, pero no reconoce herederos.
Muchas noticias e injusticias actuales se entienden mejor leyendo lo que Agamben escribi¨® hace d¨¦cadas. El estado de excepci¨®n, decretado en Ecuador tras el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio el mi¨¦rcoles, o el estado de emergencia del Gobierno italiano de Giorgia Meloni en mayo para gestionar la inmigraci¨®n nos recuerdan la tesis de Agamben de que, lejos de deberse a las recurrentes crisis que parecen justificarlo, el estado de excepci¨®n es la norma del poder pol¨ªtico actual. Al dictar la ley, el poder abusa del decreto y desprecia la deliberaci¨®n parlamentaria; frente a la inmigraci¨®n, en particular, el ejecutivo escapa a todo control en nombre de la soberan¨ªa. As¨ª, el Gobierno brit¨¢nico, que se dispone a retener en un barco a los demandantes de asilo que no puede expulsar, o las devoluciones en caliente que la polic¨ªa espa?ola practica en Ceuta y Melilla.
Homo sacer. El poder soberano y la nuda vida, el libro m¨¢s importante y original de Agamben, o Medios sin fin, ambos de 1995 y, como Estado de excepci¨®n, traducidos por Pre-Textos, describen el marco com¨²n de muchas injusticias soberanas: un mundo de Estados-naci¨®n regido por el principio de soberan¨ªa, pero recorrido por personas que no aceptan vivir ¡ªque no aceptan morir¡ª donde y como nacen. ?Qu¨¦ significa, entonces, ser ciudadano? ¡°Agamben desmonta el exterior de los Estados haci¨¦ndonos ver que, para el poder, el ser humano es nuda vida sin m¨¢s derechos que los que el Estado tiene a bien reconocerle¡±, afirma el fil¨®sofo del CSIC Reyes Mate.
Nacido en la Italia que a¨²n no hab¨ªa ahorcado a Mussolini, de una familia jud¨ªa de origen armenio, Agamben se doctor¨® con un trabajo sobre la filosof¨ªa de Simone Weil, de quien este mes se conmemoran los 80 a?os de su muerte. En Autorretrato en el estudio, esbozado con las cosas que el autor tiene en su lugar de trabajo (libros, libretas de notas, fotograf¨ªas, una polichinela, postales¡), aparece una invitaci¨®n a una cena con una frase de Weil en el anverso: ¡°Un hombre que tiene algo novedoso que decir al principio s¨®lo puede ser escuchado por quienes lo aman¡±. Desde 1977, anota Agamben, la invitaci¨®n est¨¢ sobre su escritorio.
Para Agamben, ¡°conocer significa nacer juntos¡±, seg¨²n una etimolog¨ªa indoeuropea. En su estudio guarda recuerdos de Martin Heidegger, el fil¨®sofo alem¨¢n comprometido primero con el nazismo y despu¨¦s con el silencio sobre su compromiso, a cuyos seminarios en Le Thor (Francia) acudi¨® en los a?os sesenta. Elsa Morante, Pier Paolo Pasolini, Michel Foucault o Guy Debord est¨¢n muy presentes para este fil¨®sofo pol¨¦mico que quiso ser poeta. La sombra de Walter Benjamin, cuya obra Agamben ha editado en italiano y de quien se declara continuador, es la m¨¢s evidente. Benjamin, el ¡°pensador po¨¦tico¡± amigo de Hannah ?Arendt, se suicid¨® en Portbou huyendo de los nazis en 1940.
Agamben descubri¨® Espa?a a trav¨¦s de Jos¨¦ Bergam¨ªn. ¡°Precisamente de ¨¦l, que hab¨ªa pasado buena parte de su vida en el exilio¡±, escribe. Conceptualmente, el refugiado es central en su obra. A juicio de Reyes Mate, autor de Memoria de Auschwitz, Agamben ¡°abre una v¨ªa al futuro de una originalidad incomparable: cuestiona la figura del Estado y plantea como alternativa la di¨¢spora o el exilio. Occidente ha construido todo su pensamiento pol¨ªtico bajo la figura de la pertenencia. Se impone un nuevo orden verdaderamente universal y ¨¦ste debe inspirarse en la no pertenencia, el mestizaje¡±.
Juan Evaristo Valls Boix, autor de Giorgio Agamben: Pol¨ªtica sin obra (Gedisa, 2020), resume la distinci¨®n que opera la soberan¨ªa en la vida: de un lado, tendr¨ªamos a los ciudadanos, los trabajadores en regla, el hombre blanco y las personas cisheterosexuales; del otro, a los migrantes que mueren en las aguas del Mediterr¨¢neo, a las personas racializadas, a las trabajadoras sexuales y ¡°a los disidentes de la heteronorma¡±. ¡°La noci¨®n de vida nuda est¨¢ en la base de las teor¨ªas de Judith Butler sobre la vulnerabilidad o las reflexiones de Achille Mbembe sobre necropol¨ªtica¡±, a?ade Valls Boix.
Acusado de caer en exageraciones hist¨®ricas en sus tesis ¡ªel soberano es un criminal en potencia, el campo es el paradigma pol¨ªtico de la modernidad¡ª, el propio Agamben incurri¨®, frente a la pandemia, en esa miop¨ªa que supone la literalidad sin contexto. En el primer art¨ªculo de una serie, ¡°La invenci¨®n de una pandemia¡±, publicado el 21 de febrero de 2020, rebajaba la ¡°supuesta¡± gravedad que las medidas presupon¨ªan. ¡°Cada art¨ªculo era peor que el anterior¡±, concluye Valls Boix.
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